miércoles, 18 de octubre de 2017

Sagradas Escrituras

Génesis

22 Ahora bien, después de estas cosas aconteció que el Dios [verdadero] puso a prueba+ a Abrahán. Por consiguiente, le dijo: “¡Abrahán!”, a lo cual dijo él: “¡Aquí estoy!”.+ Y él pasó a decir: “Toma, por favor, a tu hijo, a tu hijo único a quien amas tanto,+ a Isaac,+ y haz un viaje a la tierra de Moria,+y allí ofrécelo como ofrenda quemada sobre una de las montañas que yo te designaré”.+
De modo que Abrahán se levantó muy de mañana y aparejó su asno y tomó consigo a dos de sus servidores* y a Isaac su hijo;+ y partió la leña para la ofrenda quemada. Entonces se levantó y emprendió el viaje al lugar que le designó el Dios [verdadero]. Fue por primera vez al tercer día cuando Abrahán alzó los ojos y empezó a ver el lugar desde lejos. Entonces Abrahán dijo a sus servidores:+ “Quédense aquí con el asno, pero yo y el muchacho queremos ir allá, y adorar,+ y volver a ustedes”.
Después de eso, Abrahán tomó la leña de la ofrenda quemada y la puso sobre Isaac su hijo,+ y tomó en sus manos el fuego y el cuchillo de degüello, y ambos siguieron adelante juntos.+ E Isaac empezó a decir a Abrahán su padre:* “¡Padre mío!”.+ Él a su vez dijo: “¡Aquí estoy, hijo mío!”.+ De modo que continuó: “Aquí están el fuego y la leña, ¿pero dónde está la oveja para la ofrenda quemada?”.+ A lo cual dijo Abrahán: “Dios se proveerá la oveja para la ofrenda quemada,+ hijo mío”. Y ambos siguieron andando juntos.
Finalmente llegaron al lugar que le había designado el Dios [verdadero], y allí Abrahán edificó un altar+ y puso en orden la leña y ató de manos y pies a Isaac su hijo y lo puso sobre el altar, encima de la leña.+10 Entonces Abrahán extendió la mano y tomó el cuchillo de degüello para matar a su hijo.+ 11 Pero el ángel de Jehová se puso a llamarlo desde los cielos y a decir:+ “¡Abrahán, Abrahán!”, a lo cual él contestó: “¡Aquí estoy!”. 12 Y pasó a decir: “No extiendas tu mano contra el muchacho y no le hagas nada,+ porque ahora sé de veras que eres temeroso de Dios,* puesto que no has retenido de mí a tu hijo, tu único”.+ 13 En esto Abrahán alzó los ojos y miró, y allí, a poca distancia enfrente de él, había un carnero prendido por los cuernos en un matorral. De modo que Abrahán fue y tomó el carnero y lo ofreció como ofrenda quemada en lugar de su hijo.+ 14 Y Abrahán se puso a llamar aquel lugar por nombre Jehová-yiré.* Por eso se acostumbra decir hoy: “En la montaña de Jehová se proveerá”.*+
15 Y el ángel de Jehová procedió a llamar a Abrahán por segunda vez desde los cielos 16 y a decir: “‘Por mí mismo de veras juro —es la expresión de Jehová+— que por motivo de que has hecho esta cosa y no has retenido a tu hijo, tu único,+ 17 yo de seguro te bendeciré y de seguro multiplicaré tu descendencia como las estrellas de los cielos y como los granos de arena que hay en la orilla del mar;+ y tu descendencia tomará posesión de la puerta* de sus enemigos.+ 18 Y mediante tu descendencia+ ciertamente se bendecirán* todas las naciones de la tierra debido a que has escuchado mi voz’”.+
19 Después de eso Abrahán volvió a sus servidores, y se levantaron, y juntos procedieron a irse a Beer-seba;+ y Abrahán continuó morando en Beer-seba.
20 Ahora bien, después de estas cosas aconteció que le llegó a Abrahán el informe: “Mira que Milcá+ misma también le ha dado a luz hijos a Nacor+tu hermano: 21 Uz su primogénito y Buz+ su hermano y Quemuel el padre de Aram, 22 y Késed y Hazó y Pildás y Jidlaf y Betuel”.+ 23 Y Betuel llegó a ser padre de Rebeca.+ Estos ocho le dio a luz Milcá a Nacor el hermano de Abrahán. 24 Estaba también su concubina, cuyo nombre era Reumá. Con el tiempo ella misma también dio a luz a Tébah y Gaham y Tahas y Maacá.+

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EL GÉNESIS

Capítulo 22
1 Y ACONTECIÓ después de estas cosas, que tentó Dios á Abraham, y le dijo: Abraham. Y él respondió: Heme aquí.
2 Y dijo: Toma ahora tu hijo, tu único, Isaac, á quien amas, y vete á tierra de Moriah, y ofrécelo allí en holocausto sobre uno de los montes que yo te diré.
3 Y Abraham se levantó muy de mañana, y enalbardó su asno, y tomó consigo dos mozos suyos, y á Isaac su hijo: y cortó leña para el holocausto, y levantóse, y fué al lugar que Dios le dijo.
4 Al tercer día alzó Abraham sus ojos, y vió el lugar de lejos.
5 Entonces dijo Abraham á sus mozos: Esperaos aquí con el asno, y yo y el muchacho iremos hasta allí, y adoraremos, y volveremos á vosotros.
6 Y tomó Abraham la leña del holocausto, y púsola sobre Isaac su hijo: y él tomó en su mano el fuego y el cuchillo; y fueron ambos juntos.
7 Entonces habló Isaac á Abraham su padre, y dijo: Padre mío. Y él respondió: Heme aquí, mi hijo. Y él dijo: He aquí el fuego y la leña; mas ¿dónde está el cordero para el holocausto?
8 Y respondió Abraham: Dios se proveerá de cordero para el holocausto, hijo mío. E iban juntos.
9 Y como llegaron al lugar que Dios le había dicho, edificó allí Abraham un altar, y compuso la leña, y ató á Isaac su hijo, y púsole en el altar sobre la leña.
10 Y extendió Abraham su mano, y tomó el cuchillo, para degollar á su hijo.
11 Entonces el ángel de Jehová le dió voces del cielo, y dijo: Abraham, Abraham. Y él respondió: Heme aquí.
12 Y dijo: No extiendas tu mano sobre el muchacho, ni le hagas nada; que ya conozco que temes á Dios, pues que no me rehusaste tu hijo, tu único;
13 Entonces alzó Abraham sus ojos, y miró, y he aquí un carnero á sus espaldas trabado en un zarzal por sus cuernos: y fué Abraham, y tomó el carnero, y ofrecióle en holocausto en lugar de su hijo.
14 Y llamó Abraham el nombre de aquel lugar, Jehová proveerá. Por tanto se dice hoy: En el monte de Jehová será provisto.
15 Y llamó el ángel de Jehová á Abraham segunda vez desde el cielo,
16 Y dijo: Por mí mismo he jurado, dice Jehová, que por cuanto has hecho esto, y no me has rehusado tu hijo, tu único;
17 Bendiciendo te bendeciré, y multiplicando multiplicaré tu simiente como las estrellas del cielo, y como la arena que está á la orilla del mar; y tu simiente poseerá las puertas de sus enemigos:
18 En tu simiente serán benditas todas las gentes de la tierra, por cuanto obedeciste á mi voz.
19 Y tornóse Abraham á sus mozos, y levantáronse y se fueron juntos á Beer-seba; y habitó Abraham en Beer-seba.
20 Y aconteció después de estas cosas, que fué dada nueva á Abraham, diciendo: He aquí que también Milca ha parido hijos á Nachôr tu hermano:
21 A Huz su primogénito, y á Buz su hermano, y á Kemuel padre de Aram.
22 Y á Chêsed, y á Hazo, y á Pildas, y á Jidlaph, y á Bethuel.
23 Y Bethuel engendró á Rebeca. Estos ocho parió Milca á Nachôr, hermano de Abraham.
24 Y su concubina, que se llamaba Reúma, parió también á Teba, y á Gaham, y á Taas, y á Maachâ.
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Génesis

23 Y la vida de Sara llegó a ciento veintisiete años. Estos fueron los años de la vida de Sara.+ De modo que murió Sara en Quiryat-arbá,+ es decir, Hebrón,+ en la tierra de Canaán,+ y Abrahán entró a plañir a Sara y a llorarla. Entonces se levantó Abrahán de delante de su muerto y procedió a hablar a los hijos de Het,*+ diciendo: “Residente forastero y poblador soy yo entre ustedes.+ Denme la posesión de una sepultura entre ustedes para que entierre a mi muerto fuera del alcance de mi vista”.+ Ante esto, los hijos de Het contestaron a Abrahán, y le dijeron: “Escúchanos, señor mío.*+ Un principal de Dios* eres tú en medio de nosotros.+ En la más selecta* de nuestras sepulturas entierra a tu muerto.+ Ninguno de nosotros retendrá de ti su sepultura para impedir el entierro de tu muerto”.+
Por lo tanto Abrahán se levantó y se inclinó ante los naturales,*+ ante los hijos de Het,+ y habló con ellos, y dijo: “Si sus almas convienen* en enterrar a mi muerto fuera del alcance de mi vista, escúchenme e insten por mí a Efrón el hijo de Zóhar,+ para que me dé la cueva de Macpelá,*+ que es suya, la cual está a la extremidad de su campo. Por la plena cantidad de plata, que me la dé en medio de ustedes para la posesión de una sepultura”.+
10 El caso era que Efrón estaba sentado en medio de los hijos de Het. Así que Efrón el hitita+ contestó a Abrahán, a oídos de los hijos de Het junto con todos los que entraban por la puerta de su ciudad, y dijo:+ 11 “¡No, señor mío! Escúchame. El campo sí te lo doy, y la cueva que está en él a ti te la doy, sí. Ante los ojos de los hijos de mi pueblo de veras te la doy.+ Entierra a tu muerto”. 12 En esto se inclinó Abrahán ante los naturales 13 y habló a Efrón, oyéndolo los naturales, y dijo: “Solamente si tú... ¡no, escúchame! Ciertamente te daré la cantidad de plata por el campo. Tómala de mí,+ para que yo entierre allí a mi muerto”.
14 Entonces contestó Efrón a Abrahán, diciéndole: 15 “Señor mío, escúchame. Una porción de terreno que vale cuatrocientos siclos de plata,*¿qué es eso entre yo y tú? De modo que entierra a tu muerto”.+ 16 Por consiguiente, escuchó Abrahán a Efrón, y Abrahán le pesó a Efrón la cantidad de plata de que había hablado a oídos de los hijos de Het, cuatrocientos siclos de plata, corriente entre mercaderes.+ 17 Así el campo de Efrón que estaba en Macpelá, que está enfrente de Mamré, el campo y la cueva que estaba en él, y todos los árboles que estaban en el campo,+ que estaban dentro de todos sus límites en derredor, quedaron confirmados+18 a Abrahán como propiedad suya comprada ante los ojos de los hijos de Het, entre todos los que entraban por la puerta de su ciudad.+ 19 Y después de aquello Abrahán enterró a Sara su esposa en la cueva del campo de Macpelá, enfrente de Mamré, es decir, Hebrón, en la tierra de Canaán.+20 Así el campo y la cueva que estaba en él quedaron confirmados a Abrahán para posesión de sepultura, de mano de los hijos de Het.+

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EL GÉNESIS

Capítulo 23
1 Y FUÉ la vida de Sara ciento veintisiete años: tantos fueron los años de la vida de Sara.
2 Y murió Sara en Kiriath-arba, que es Hebrón, en la tierra de Canaán: y vino Abraham á hacer el duelo á Sara y á llorarla.
3 Y levantóse Abraham de delante de su muerto, y habló á los hijos de Heth, diciendo:
4 Peregrino y advenedizo soy entre vosotros; dadme heredad de sepultura con vosotros, y sepultaré mi muerto de delante de mí.
5 Y respondieron los hijos de Heth á Abraham, y dijéronle:
6 Óyenos, señor mío, eres un príncipe de Dios entre nosotros; en lo mejor de nuestras sepulturas sepulta á tu muerto; ninguno de nosotros te impedirá su sepultura, para que entierres tu muerto.
7 Y Abraham se levantó, é inclinóse al pueblo de aquella tierra, á los hijos de Heth;
8 Y habló con ellos, diciendo: Si tenéis voluntad que yo sepulte mi muerto de delante de mí, oídme, é interceded por mí con Ephrón, hijo de Zohar,
9 Para que me dé la cueva de Macpela, que tiene al cabo de su heredad: que por su justo precio me la dé, para posesión de sepultura en medio de vosotros.
10 Este Ephrón hallábase entre los hijos de Heth: y respondió Perón Hetheo á Abraham, en oídos de los hijos de Heth, de todos los que entraban por la puerta de su ciudad, diciendo:
11 No, señor mío, óyeme: te doy la heredad, y te doy también la cueva que está en ella; delante de los hijos de mi pueblo te la doy; sepulta tu muerto.
12 Y Abraham se inclinó delante del pueblo de la tierra.
13 Y respondió á Ephrón en oídos del pueblo de la tierra, diciendo: Antes, si te place, ruégote que me oigas; yo daré el precio de la heredad, tómalo de mí, y sepultaré en ella mi muerto.
14 Y respondió Ephrón á Abraham, diciéndole:
15 Señor mío, escúchame: la tierra vale cuatrocientos siclos de plata: ¿qué es esto entre mí y ti? entierra pues tu muerto.
16 Entonces Abraham se convino con Ephrón, y pesó Abraham á Ephrón el dinero que dijo, oyéndolo los hijos de Heth, cuatrocientos siclos de plata, de buena ley entre mercaderes.
17 Y quedó la heredad de Ephrón que estaba en Macpela enfrente de Mamre, la heredad y la cueva que estaba en ella, y todos los árboles que había en la heredad, y en todo su término al derredor,
18 Por de Abraham en posesión, á vista de los hijos de Heth, y de todos los que entraban por la puerta de la ciudad.
19 Y después de esto sepultó Abraham á Sara su mujer en la cueva de la heredad de Macpela enfrente de Mamre, que es Hebrón en la tierra de Canaán.
20 Y quedó la heredad y la cueva que en ella había, por de Abraham, en posesión de sepultura adquirida de los hijos de Heth.

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