miércoles, 18 de octubre de 2017

Santos del día


Próculo, Acucio y Eutiquio, Santos




Mártires

Martirologio Romano: En Pozzuoli, en la Campania, santos Próculo, diácono, Eutiquio y Acucio (c. s. IV).
Breve Semblanza
La vida terrena de los mártires de Pozzuoli, Próculo, Eutiquio y Acuzio, debe ser colocada en el siglo IV, y está estrechamente relacionada con el martirio de otros más conocidos, el obispo san Jenaro junto con santos Sosio, Festo y Desiderio.
Según las llamadas «Actas Boloniesas», cuando arreciaba la persecución del emperador Diocleciano (284-305) contra los cristianos, el obispo de Benevento, Jenaro, se encontraba en Pozzuoli disfrazado para evitar ser reconocidos por los paganos, que corrían en masa a consultar a la Sibila Cumana, que vivía en su cueva, cerca de la vecina Cumas. Sin embargo, la presencia del obispo era conocida por los cristianos en la zona, debido a que el diácono de Miseno, Sosio, acompañado por el diácono Festo y el lector Desiderio, fueron a visitarlo varias veces con gran cautela y circunspección. Pero los paganos desenmascararon a Sosio como cristiano y lo denunciaron al juez Dragonzio; el diácono de Miseno fue capturado y encarcelado y luego condenado a ser devorado por los osos en el anfiteatro de Pozzuoli.
El obispo Jenaro, Festo, y Desiderio, al enterarse de su detención, a pesar de saber los riesgos que enfrentaban, querían visitar a Sosio, para llevarle consuelo; fueron también descubiertos, confesaron ser cristianos y entonces se vieron conducidos al tribunal de Dragonzio, quien -viendo su negativa a retractarse- los condenó a la misma pena que a Sosio. No se sabe bien por qué, pero la sentencia "ad bestias" fue conmutada para todos por el propio Dagonzio en decapitación.
En este punto entran en el relato los tres habitantes de Pozzuoli que celebramos hoy, diáconos y laicos cristianos Próculo, Acucio y Eutiquio, que protestaron enérgicamente contra la sentencia, cuando los mártires eran conducidos a la ejecución. Con la facilidad y el fanatismo de la época, fueron apresados también, y condenados a la misma pena de la decapitación, que tuvo lugar, según la tradición, el 19 de septiembre del 305, en el Foro Vulcano, cerca de la célebre Solfatara. En esa fecha se celebra en la Iglesia el martirio de san Jenaro y el grupo principal de estos siete (Sosio, Festo y Desiderio).


Las reliquias de Eutiquio y Acucio, se mantuvieron en «Praetorium Falcidii», junto a la basílica paleocristiana de San Esteban, primera catedral de Pozzuoli, pero parece que en la segunda mitad del siglo VIII, fueron colocadas en la catedral de San Esteban en Nápoles. El santo diácono Próculo en cambio, patrono principal de la ciudad de Pozzuoli, habría encontrado un lugar permanente en el templo Calpurniano, transformado en el nueva catedral de la ciudad.




San Isaac Jogues (OrleansFrancia ,10 de enero de 1607AuriesvilleNew York,18 de octubre de 1646) fue un santo, presbítero jesuita y misionero.
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San Isaac Jogues, S.J., retrato al óleo de Donald Guthrie McNab
Presbítero y Mártir
NombreIsaac Jogues
Nacimiento10 de enero de 1607
OrleansFlag of France.svg Francia
Fallecimiento18 de octubre de 1646
AuriesvilleFlag of the United States.svg Estados Unidos
Venerado enIglesia católica
Beatificación21 de julio de 1925,
Canonización29 de junio de 1930, por el Papa Pío XI
ÓrdenesCompañía de Jesús
Festividad26 de septiembre en Canadá, 19 de octubre (general)

Biografía[editar]

Entró a los 17 años a la Compañía de Jesús. Fue ordenado presbítero unos años más tarde.
Desde 1636 predicó el evangelio en condiciones extremadamente difíciles en la misión de los hurones en Canadá, con grandes logros. En 1642 fue apresado y torturado por iroqueses, en su cautiverio continuó convirtiendo iroqueses al cristianismo.
Regresó a Francia, donde se entrevistó con el Papa y el Rey de Francia.
En 1644 volvió a Canadá, actuando como mediador de paz entre los franceses y los mohawk. En 1646 viajó rumbo a los territorios de los mohawks para activar el tratado de paz pactado con el donado Juan de Lalande y un jefe hurón. Pero una epidemia de gripe causada por su anterior presencia había perturbado a los mohawks. Los mohawk lo asesinaron.
Fue beatificado el 21 de julio de 1925. Fue canonizado el 29 de junio de 1930.






Mártir

Santo Tradicional - No incluido en el actual Martirologio Romano
(Sugerimos leer el artículo ¿Santos descanonizados?)
Etimologicamente: Justo = “prudente, recto”. Viene de la lengua latina.
Breve Biografía

Nació este mártir de la Iglesia en la ciudad de Auxerre, en la Borgoña.

Sus padres eran profundamente cristianos. Aunque era todavía un niño, sin embargo, gracia a su educación, parecía más maduro de lo que aparentaba.

A los ocho años sostenía controversias contra los paganos, que invadían la región, sobre temas religiosos.

Tenía una inteligencia poco común. No llegó a conocer a su hermano Justiniano.

Se lo robaron a sus padres para venderlo a unos mercaderes de Beauvais.

Dios le reveló a Justo en dónde estaba. Llegados a la casa del comerciante, éste reunió a los doce esclavos. Le devolvió a su hijo con la única condición de que salieran en seguida de la ciudad.

Pero el gobernador mandó que los cogieran. Quería vengarse de su condición cristiana. No podía, influido por los paganos pudientes, ver a un seguidor de Jesucristo.

Una vez que tuvo ante su presencial al bueno de Justo, lo envió a una hoguera. No se sabe qué hizo con su padre y su madre. 
Era el año 306.

Su cabeza se venera hoy en Beauvais.





San Pedro de Alcántara, O.F.M., (Alcántara1499-Arenas de San Pedro18 de octubre de 1562) fue fraile franciscanoespañol. Su nombre real es Juan de Garavito y Vilela de Sanabria. Muere a la edad de 63 años. Fue beatificado por el papa Gregorio XV en 1622 y canonizado por Clemente IX en 1669.

Biografía[editar]

Nació en el seno de una familia noble. Sus padres, Alonso Garabito y María Vilela de Sanabria y Maldonado, vivieron en Villaturiel un pueblo cerca de León, a mediados del siglo XV. Estudia leyes en la Universidad de Salamanca, abandona los estudios y toma los hábitos en 1515 en el convento de San Pedro de los Majarretes, cerca de Valencia de Alcántara, donde toma el nombre de Fray Pedro de Alcántara.
Fundó el convento más pequeño del mundo, "El Palancar", cerca de Pedroso de Acim. Fue amigo y consejero de Santa Teresa de Jesús. Llamado por Carlos V en su retiro de Yuste para ser su confesor, declinó el santo alcantarino dicha proposición. Conocido sobre todo por su penitencia, encandilaba a las masas con su oratoria. Redujo el "Libro de la oración y Meditación" de Fray Luis de Granada a su versión portátil y popular, el "Tratado de la oración y meditación".
Esta vida de contemplación no era obstáculo para estar en relaciones con muchas personas por vía epistolar e, incluso, para hacer largos viajes, generalmente a pie, especialmente por Extremadura y Portugal. Hay testimonios de una entrevista con Carlos V en Yuste. Por donde iba dejaba su rastro de santidad, caminaba descalzo, y se contaban los prodigios que ocurrían en torno a su persona como serían pasar el Tiétar sobre las aguas, el no mojarse en plena tormenta o el que la nieve formase una pequeña cavidad a su alrededor en el Puerto del Pico cuando regresaba de un viaje a Ávila.
En 1560 se encuentra con Santa Teresa en casa de doña Guiomar de Ulloa y trata sobre la fundación del convento de Arenas, tras haber concluido antes las del convento de La Viciosa y del Rosario en términos de Oropesa. Pedro de Alcántara tranquiliza y asegura el espíritu de Teresa de Jesús, y entre ambos santos surge una profunda y sincera amistad: en adelante, él es el consejero fiel de la santa y quien la orienta y le da el impulso definitivo para iniciar la reforma del Carmelo con la fundación del convento de San José de Ávila; y fray Pedro abre su corazón a la Madre Teresa, que será su primer biógrafo, dedicándole tres capítulos de su Autobiografía.
Es probablemente con ocasión de este viaje, de paso para Ávila, cuando Pedro de Alcántara conoce en Arenas (actualmente Arenas de San Pedro) la ermita de San Andrés del Monte, a poco más de dos kilómetros de la villa. Levantada en el primer tercio del siglo XVI, era ésta una pequeña edificación de poco más de treinta metros cuadrados, de estilo gótico isabelino. La cofradía arenense de San Andrés se la ofrece para la fundación de un nuevo convento de su reforma. Cuentan las crónicas que tanto agradó al santo el lugar que exclamó: «Dios tiene grandes designios sobre este lugar».
De ahora en adelante Arenas y su comarca experimentarán las riquezas del apostolado y el ejemplo de la vida de fray Pedro, que fija su residencia en Arenas en la primavera de 1562. Viajaba, en un asnillo, a Ávila, Oropesa y al convento de Ntra. Sra. del Rosario, situado en las proximidades del actual pantano del Rosarito. Mientras se construía el pequeño convento, vivía en una casa que tenía la cofradía del mismo nombre en el pueblo y que después se convirtió en Enfermería.
Glorioso Tránsito
Al agravarse su enfermedad, el 12 de octubre se hace llevar a Arenas, donde quiere recibir la muerte rodeado de sus hermanos. En el amanecer del 18 de octubre, alegre de verse ya de partida para la Gloria, después de pedir perdón a su cuerpo por las asperezas y rigores con que le había tratado todo el tiempo de su vida, comenzó a rezar el salmo «miserere», quedándose absorto en la contemplación de la Trinidad y de la Virgen María. Vuelto en sí, y diciendo: «¡Qué alegría cuando me dijeron, vamos a la casa del Señor!», entregaba su espíritu.
La noticia de su muerte se difundió inmediatamente por toda la comarca. Las gentes de Arenas y sus alrededores acudieron en masa a dar su último adiós a aquel de cuya compañía, amistad, favores espirituales y testimonio de vida habían gozado, y al que todos consideraban santo.
Se le entierra en la iglesia del convento llamado entonces de San Andrés del Monte. Con motivo de su beatificación, la villa lo declara patrón en 1622, e hizo voto de tener por día de fiesta perpetuamente el 19 de octubre de cada año.

San Pedro de Alcántara confesando a Santa Teresa, de José García Hidalgo (Museo del Prado).jpg
San Pedro de Alcántara confesando a Santa Teresa, deJosé García Hidalgo (Museo del Prado).
Nacimiento1499
AlcántaraCáceres
Fallecimiento18 de octubre de 1562
Arenas de San PedroÁvila
Venerado enIglesia católica
Beatificación1622 por Gregorio XV
Canonización1669 por Clemente IX
Festividad19 de octubre
PatronazgoArenas de San PedroDiócesis de Coria-CáceresExtremaduraCasa Imperial de BrasilSan Pedro AlcántaraAlcántara

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