jueves, 10 de julio de 2014
BATALLAS DE LA ANTIGUEDAD
BATALLAS .-
Gaugamela
Esta batalla tuvo lugar el 1 de octubre de 331 a. C. en Gaugamela , en la ribera del río Bumodos, tributario del Gran Zab. En la batalla se enfrentaron el ejército persa a las órdenes de su rey Darío III y el ejército macedonio bajo el mando de Alejandro Magno. Darío eligió esa localidad porque era una amplia llanura que favorecía a sus numerosas fuerzas montadas. Es imposible calcular las bajas de esta batalla. Los historiadores antiguos van desde 300.000 persas muertos y solamente 100 macedonios y 1.000 caballos, hasta otros más modernos que las estiman en 40.000 muertos persas y 5.000 macedonios. Alejandro se dirigió desde Arbelas a Babilonia, donde ordenó reconstruir el templo de Marduk. Luego tomó Susa, donde se apoderó de 120.000 talentos, y más tarde conquistó Persépolis, donde en un acto ritual de venganza quemó el palacio de Jerjes. En el invierno del año 330 a. C. partió de Persépolis a Ecbatana, donde se apoderó de 180.000 talentos, pero Darío lo eludió nuevamente. Por fin, tras recorrer 585 km en once días, logró alcanzar a la comitiva de Darío para enterarse que éste había sido asesinado por Besso. Con la muerte de Darío se cumplió el objetivo político de Alejandro:imponer su voluntad en el Imperio y establecer su dominio sobre las satrapías del este.
Batalla de Ipsos
Tuvo lugar en 301 a. C. y se inscribe en las batallas de los diádocos, es decir, los sucesores de Alejandro Magno. En el curso de la tercera guerra de los Diádocos tuvo lugar la batalla de Ipsos, que fue ganada por Ptolomeo y permitió la dominación de Egipto sobre Palestina y Chipre. Esta batalla enfrentó a las fuerzas coaligadas de Ptolomeo I (faraón de Egipto), de Seleuco (emperador de Babilonia y de los sátrapas orientales), de Casandro (rey de Macedonia) y de Lisímaco (soberano de Tracia) con los ejércitos de Antígono y de su hijo Demetrio I Poliorcetes ("asediador de ciudades"), que habían conseguido agrupar bajo su égida el Levante: Siria, Asia Menor y Grecia (en 302 a. C.). Según Plutarco (Vida de Demetrios, XXVIII, 6. XXX), el ejército antigónida estaba compuesto por 70.000 hombres a pie, 10.000 a caballo y 75 elefantes, frente a una fuerza coaligada de 64.000 hombres, 10.500 jinetes, 400 elefantes, así como 120 carros de guerra. Al día siguiente de comenzar la batalla, Demetrio, a la cabeza de su mejor caballería, atacó a Antíoco, hijo de Seleuco, que huyó en espantada. Pero en lugar de detenerse, Demetrio avanzó y, rápidamente, los elefantes del ejército coaligado le bloquearon la salida: ¡había caído en la trampa! La mayor parte de su caballería tuvo miedo de ser masacrada y cambió de bando. El resto fue derrotado. Antígono luchó bravamente y murió abandonado por todos, salvo por Thorax de Larisa. Estando la infantería antigónida privada del sostén de su caballería, el ejército coaligado se lanzó al asalto general, la caballería a la cabeza, y el frente se rompió. Tras la derrota, Demetrios, que había dirigido al resto del ejército en ausencia de su padre, huyó con 40.000 soldados y 5.000 jinetes. Al término de esta batalla, los vencedores se repartieron el imperio de Antígono: Ptolomeo se apoderó del Mediterráneo oriental, Casandro de Grecia y Seleuco, el gran vencedor, de toda Asia Menor y de Siria.
Batalla de Pidna
Puso fin a la Tercera Guerra Macedónica entre Roma y Macedonia. El ejército romano estuvo bajo el mando del cónsul Lucio Emilio Paulo y el de Macedonia dirigido por su rey Perseo. Tuvo lugar el 22 de junio de 168 a. C. en el noreste de Grecia cerca de la localidad de Pidna en el golfo de Tesalónica. Esta batalla puso de manifiesto la supremacía de la legión romana sobre la rígida falange macedonia. Esta batalla puso fin definitivo al Imperio de Alejandro Magno 144 años después de su muerte, y casi todo el Mediterráneo quedó bajo el dominio de Roma. En cuanto Roma supo el resultado de la batalla, dispuso que todos los estados de macedonios y griegos, amigos y enemigos, fueran despojados de su fuerza. Macedonia desapareció siendo dividida en una federación compuesta por cuatro ligas republicanas. Emilio Paulo tuvo que permitir, contra su voluntad, que fueran saqueadas setenta ciudades y se vendiera como esclavos a 150,000 hombres. Roma, una vez que aplastó a sus enemigos, hizo lo mismo con sus aliados. Así fue como Roma, después de Pidna, quedó convertida en potencia mundial y en un auténtico imperio, aunque aún no llevara tal nombre.
Batalla de Carras
Fue una importante batalla que tuvo lugar en el año 53 a. C. en la ciudad de Carras (actualmente Harrán, Turquía) entre el ejército romano al mando del general Marco Licinio Craso, gobernador de Siria por aquel entonces, y el ejército parto al mando del general Surena. Fue una de las derrotas más severasque sufrió la República romana. Para Roma la principal consecuencia de esta batalla fue la muerte de Craso, y en consecuencia la desaparición del primer triunvirato, pasando de una regla de tres a otra de dos. Pero aún así dos era multitud para el gobierno de la República y el camino estaba despejadopara el inicio de la guerra civil entre Julio César y Pompeyo.
Otra de las implicaciones de esta batalla fue el hecho de que el continente europeo se abriera a un nuevo y preciado material: la seda. Los romanos que lograron sobrevivir a la batalla describieron haber visto unas banderas brillantes, hechas al parecer con seda, usadas por los partos mientras les perseguían. Así, al mismo tiempo que el interés en Europa por este tejido crecía, se extendía la ruta de la seda entre este continente y China, dando comienzo a una de las rutas comerciales más grandes y prósperas de la historia.
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