Género musical[editar]
En su origen tenía un movimiento lento aunque, ahora se ha convertido en una
danza de ritmo vivo y rápido. Su característica más significativa es que sus compases son de 3/4. En el compás del vals, el primer tiempo siempre es considerado como el tiempo fuerte (F), y los otros dos son débiles (d). Así, el patrón es "F, d, d". Al oír la palabra "vals", enseguida se relaciona con música clásica, pero lo cierto es que el vals sólo es un género musical y puede estar en cualquier estilo, por ejemplo en forma de rancheras mexicanas, aunque donde siempre es el ritmo más usado es en el
Swing (el cual es de 4/4, en patrón F, d, F, d). Puede tener forma binaria, ternaria, rondó y rock.
Se habla de "vals roto" cuando en lugar del usual compás ternario de 3/4, está escrito en compás de 5/4. Puede escucharse, por ejemplo en el segundo movimiento de la
Sinfonía n.º 6 de
Chaikovski.
El vals vienés[editar]
Con este nombre se conoce la danza de pasos rápidos, en un
tempo que comprende entre 110 y 180 intervalos por minuto. Existen también versiones lentas (tempo de 60 a 80), denominados
vals inglés o
boston.
Aunque existen muchas variantes en múltiples países, en los concursos de baile, el vals vienés se atiene, en la actualidad, a dos formas:
- el estilo internacional: las parejas de baile permanecen siempre enlazadas, lo que limita el número de figuras. Este estilo de danza es mucho más elegante.
- el estilo americano: baile mucho más libre, en este estilo la pareja puede separarse y efectuar figuras variadas.
En el estilo Vals internacional, en cambio, las dos versiones de vals son más reguladas, en lo que se refiere a las velocidades.
El vals vienés tiene 58-60 compases por minuto (174-180 intervalos por minuto), y el vals inglés 28-30 compases por minuto (84-90 intervalos por minuto).
El vals francés o valse musette[editar]
Danza popular típica de
París, que surgió en los
vals musette. La
musette (en música) es una de las muchas piezas básicas que componen una
suite. El término
mussette se aplica a un instrumento de la familia de la
gaita; a un pequeño
oboe sin llaves, normalmente en G; y a una danza.
La
musette es una pieza danzable pseudopastoril del siglo XVIII. Se refiere a un aire en
compás de 2/4, 3/4 o 6/8, con un
tempo moderado y con un carácter suave y sencillo, lo cual se corresponde con el instrumento del que toma su nombre:
musette o
cornamusa. Así, la
musette generalmente tiene un bajo pedal que responde al nombre de
bordón -que imita al instrumento homónimo-, mientras que en la parte superior abundan los pasajes rápidos, plagados de notas de adorno como las apoyaturas o las
acciaccaturas. Estas piezas se bailaban en los
ballets franceses de comienzos del siglo XVIII.
Este tipo de aires fue adaptado a danzas pastoriles, también llamadas
musettes, las cuales fueron del gusto de
Luis XIV y
Luis XV. Esto se puede observar en las pinturas de
Antoine Watteu y otros pintores de su mismo estilo.
También se refiere a un estilo musical predominante en París, donde el acordeón era el instrumento principal. Con el paso del tiempo, el estilo musette se convirtió en una forma de vida y aún en la actualidad es común relacionar este tipo de "música urbana" con el París moderno. Ya en el XIX, un gran autor de valses fue el judío francés
Émile Waldteufel.
El vals tango o valsesito criollo[editar]
Música y danza
argentina y
uruguaya frecuentemente acompañada con letras similares a las del tango argentino, el
valsesito criollo surgió a fines de siglo XIX por un doble motivo: en esa época el "vals vienés", como el de los
Johann Strauss, era una de las grandes músicas de moda de la
Belle Époque y porque a gran parte del
Litoral argentino inmigraron multitud de suizos, austríacos y alemanes, los cuales influyeron con su música en la
música folclórica argentina, así surgieron en Argentina "valsesitos criollos" tan célebres como
Salud, dinero y amor o
Caserón de tejas entre muchos otros. En general el valsesito criollo argentino tiene una instrumentación (acompañada de una típica vocalización por parte de un o una cantante) que está más próxima al tango argentino aunque su ritmo, más lento y armónico, y el compás de 3/4 usualmente utilizado, se deriva del vals clásico o , mejor dicho, del vals vienés. El valsesito criollo argentino usualmente también se baila en un compás de 3/4; a esta música se le llama también tango vals o vals criollo argentino.
El vals ecuatoriano[editar]
El Vals quiteño respetó la originalidad europea al tratarse de una música creada para los bailes la alta sociedad quiteña y entonada en los grandes banquetes presidenciales de finales del siglo IX y principios de los años XX. Las colonias francesas asentadas en Esmeraldas y Quito distribuyeron el material sonoro y los músicos quiteños se encargaron de crear nuevas canciones fieles a sus mentores europeos. Entre sus máximos exponentes estuvieron Vicente Blacio. Juan Luces C. Luis Manuel Galvez. Salvador Bustamante, Antonio C. Cabezas y José Ignacio de Veintimilla. La música creada en el territorio ecuatoriano Porvenir, Mi Pensamiento, Presidente Alfaro, Últimas Quejas, Luz de Luna, Chile y Ecuador.
La recopilación del vals quiteño estuvo a cargo de
Carlos Bonilla Chavez y sus 6 cuerdas. LP lanzado por la disquera Onix en 1970.
El vals chilote[editar]
El
Vals chilote, es uno de los bailes más conocidos en
Chiloé,
Chile. Esta danza considera las características del vals típico, en que el hombre y la mujer bailan enlazados; sin embargo, su característica personal es que se pronuncia con mayor intensidad los saltos y la forma de abrazar a la pareja. Muy arraigado también en la zona Central de Chile, la diferencia radica en que el ritmo es más marcado, redundando en la intensidad del paso y en la forma de abrazar a la pareja.
El vals venezolano[editar]
De acuerdo con Luis Felipe Ramón y Rivera, existen dos corrientes en el vals venezolano: el de salón y el popular. En el vals de salón, el instrumento favorito para su ejecución es el piano. Se enfatiza en los nombres de Manuel Azpúrua, Manuel Guadalajara, Rafael Isaza, Rogelio Caraballo y Ramón Delgado Palacios en el inicio de este género en Venezuela, y se dedicaron a la composición de vals de dos partes. A partir de esto, el compositor Antonio Lauro tomó una importante literatura del vals para la guitarra.
El vals de tradición oral, o vals popular, utiliza para su ejecución los instrumentos típicos de cada región venezolana, siendo cultivado mayormente en los Andes y el la región centro-occidental de Venezuela. En la región andina, el violín y la bandola son instrumentos solistas, acompañados de la guitarra, triple y cuatro. En Lara se ejecuta con violín, mandolina, cuatro y guitarra.
La estructura musical característica de los valses populares constan de tres partes. Aun cuando muchos músicos firman sus composiciones con sus nombres, la mayoría han dejado sus creaciones en el anonimato.
En la tradición popular se puede encontrar el vals en muchos bailes y manifestaciones folklóricas, como el joropo y el tamunangue, entre otros.
El vals peruano[editar]
Danza influenciada por los ritmos negros del Perú que se desarrolló a lo largo del siglo XX en la costa peruana, y en particular en la ciudad de
Lima. Sus compositores e intérpretes más famosos fueron
Felipe Pinglo Alva, Oscar Avilés, Lorenzo Humberto Sotomayor, Filomeno Ormeño, Jorge Huirse, Arturo Cavero, Los Morochucos,
Los Troveros Criollos, Los Embajadores Criollos,
Chabuca Granda, Lucha Reyes, entre otros. Su auge fue en los años 40 y 50, representando entonces la mayor parte de la producción musical peruana.
Sus pasos son más cortos y más cadenciados que en el vals tradicional. Suele también ser más rápido.
Los valses criollos se inspiran de temas amorosos (Alma, Corazón y Vida, Nunca me faltes, Idolatría), de la idiosincrasia limeña (
La flor de la canela, Si Lima pudiera hablar, Romance en la Parada) y de temas patrióticos (Y se llama Perú, Mi Bandera).
Es hoy en día la expresión más variada del criollismo peruano.
Desde la aparición en los ochenta del vals Bandida de
Los Troveros Criollos hasta la actualidad, este género ha sido renovado por obras de fusión musical chill out o por influencia del
jazz y el
bossa nova.
El vals mexicano[editar]
Los valses fueron una moda global y en México tuvo una pronta aceptación tanto por las élites, como de las clases populares adaptándose a las diferentes regiones de México, interpretándose con los instrumentos musicales de estas regiones, como la
marimba,
mariachi y otras.
Entre 1810 y 1815 el vals llegó a México adquiriendo rápidamente popularidad. Se convirtió en un eslabón entre la música clásica y la popular.
El vals mexicano tuvo desde un principio características propias. Disminuyo el vértigo y rapidez de la danza, se hizo más lento y adecuado para escucharse.
Cuenta las siguientes obras más reconocidas:
El Castigo en Ecuador es un símbolo nacional, en el siglo XIX pasó por
Colombia hacia
Panamá y
Costa Rica; posteriormente se extendió a
El Salvador y a
Nicaragua tomando en cada una de estas características regionales. En
Venezuela se le conoce como valse y el pasillo ecuatoriano goza de gran popularidad, en su propio país.
Otras formas de vals[editar]
La música y la danza tradicionales comprenden, asimismo, otros vals más complejos que el vals de 3 tiempos, llamados vals asimétricos, en general de 5, 8 u 11 tiempos. Los tiempos suplementarios, en el paso de vals, se bailan apoyándose, alternativamente, en cada una de las piernas permitiendo, así, una ligera elevación que acentúa los giros.
Compositores y obras destacadas[editar]
Frédéric Chopin, el gran compositor y pianista polaco, aportó una cantidad de excelentes valses para
piano y, entre ellos, el vals más breve denominado
Vals del Minuto. Los
Strauss también destacaron como grandes compositores de vals, especialmente
Johann Strauss (hijo). El francés
Émile Waldteufel compuso valses tan célebres como
Los patinadores; se hicieron también famosos el
Valse triste de
Jean Sibelius y el
Vals núm. 2 de
Dmitri Shostakóvich. Fueron también muy populares, de
Piotr Ilich Chaikovski, piezas como el "Vals de las flores" de
El cascanueces, el "Vals" de
La bella durmiente o el "Vals" de
El lago de los cisnes, pero sin duda alguna los testimonios más recordados del género son piezas de Strauss tales como
Sangre Vienesa, el
Vals de los Novios, el
Danubio azul o el
Vals del Emperador. En Latinoamérica existen diversas variantes como el
vals peruano, el vals venezolano, el vals colombiano, el vals brasileño y el vals ecuatoriano con características que difieren de país a país. Podemos decir con exactitud que estos testimonios entre otros han llegado a formar un gran género que constituye un tesoro esencial en el patrimonio musical de la humanidad. También destaca el tema musical
Tiempo de Vals del cantautor boricua
Chayanne.
La palabra «virelay» procede del
francés virer (‘girar’) +
lai (‘
lay’).
Un virelay es una forma musical similar a un rondó, y también semejante al
zéjel hispanoandalusí. Consta de un
estribillo más o menos extenso que alterna con varias estrofas divididas en dos secciones: la primera sección (
A) se subdivide a su vez en dos mitades, llamadas
mudanzas, con la misma estructura
métrica que se cantan con la misma melodía, variando a veces el final para terminar con dos cadencias distintas, llamadas «final abierto» y «final cerrado». La segunda sección (
B) de cada estrofa, llamada
vuelta,
repite la estructura métrica del estribillo y se canta con la misma melodía, sirviendo así de engarce musical. Las estrofas tienen, pues, forma
AAB, llamada «
forma bar». Cada
estrofa tiene dos
rimas, y la rima final se recupera como rima inicial de la estrofa siguiente. La estructura musical subyacente es también un casi invariable
AbbaA, con la primera y última secciones compartiendo la misma letra. Es la misma forma que la
ballata italiana.
Hacia la mitad del
siglo XV la forma poética se había alejado mucho de la musical, y se escribían numerosos virelayes (así como baladas y rondós) sin intención de que fueran musicados; o bien la mayoría de sus partituras se han perdido.
- Douce dame jolie,
- Pour dieu ne pensés mie
- Que nulle ait signorie
- Seur moy fors vous seulement.
- Qu'adès sans tricherie
- Chierie
- Vous ay et humblement
- Tous les jours de ma vie
- Servie
- Sans villain pensement.
- Helas! et je mendie
- D'esperance et d'aïe;
- Dont ma joie est fenie,
- Se pité ne vous en prent.
- Douce dame jolie,
- Pour dieu ne pensés mie
- Que nulle ait signorie
- Seur moy fors vous seulement.
El
zéjel o
zajal (en
árabe,
زجل,
zajal, en ár. hisp. pronunciado
zajál, 'canción' en dialecto) es una forma tradicional de
poesía de la
literatura árabe recitada en
dialecto coloquial con antiguas raíces en la cultura mediterránea. El zéjel, en su forma más típica, consiste en un estribillo de dos versos, al que siguen otros sonidos acompasados que a su vez tienen una rima seguida de otros tres versos (mudanza) y un cuarto verso (vuelta) que rima con los sonidos acompasados de antes pertenecientes al estribillo, anunciando su repetición. La distribución de la rima es la siguiente: aa (estribillo), bbb (mudanza), a (vuelta) y repetición del estribillo. Es decir, aa-bbba, aa-ccca, aa-ddda.
Zéjel en Al-Ándalus[editar]
En origen fue un género poético de la
poesía mozárabe, que se desarrolló en forma de canción en
Al-Ándalus, cultivado luego por poetas
hebreos castellanos y europeos. En
Al-Ándalus estaban escritos en árabe dialectal (árabe andalusí, no árabe clásico), y a menudo con palabras y expresiones en romance, muestra del bilingüismo de la sociedad andalusí. El más típico cancionero escrito en forma de zéjeles es el de Abû Bakr ibn Abdul-Malik ibn Quzmân, más conocido simplemente por
Ben Quzman, poeta cordobés del siglo XII.
-
- ¡Ay fortuna, (a)
- cógeme esta aceituna! (a) [Estribillo de 2 versos]
- Aceituna lisonjera (b)
- verde y tierna por defuera, (b)
- y por dentro de madera, (b) [Mudanza]
- ¡fruta dura e importuna! (a) [Vuelta]
- ¡Ay fortuna, (a)
- cógeme esta aceituna! (a) [Repetición del estribillo]
- Fruta en madurar tan larga (c)
- que sin aderezo amarga; (c)
- y aunque se coja una carga, (c) [Mudanza]
- se ha de comer sola una. (a) [Vuelta]
- ¡Ay fortuna, (a)
- cógeme esta aceituna! (a)
El zéjel era cantado por coro y solista. Era una forma muy popular en
Al-Ándalus y solía acompañarse de
laúd,
flautas,
tambor y
adufes o
castañuelas. A veces, se acompañaba de baile. Tuvo una gran repercusión en todo el mundo árabe de la época, como reseña el historiador
Ibn Galib. También tenía mucho éxito en los
reinos cristianos, que pagaban altas retribuciones a los
juglares moros.
2
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Existen variaciones más libres sobre esta forma tradicional, entre ellas la de
Rafael Alberti y la del zéjel asonantado o arromanzado creado por el poeta mallorquín
Llorenç Vidal, que mantiene la estructura estrófica del zéjel clásico de
Ben Quzman combinada con la rima suavizada del romance.
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Zéjel en la actualidad[editar]
Aunque los orígenes del zéjel son medievales, aún sobrevive tanto en el
Magreb, en especial en
Argelia como en el
Levante mediterráneo, fundamentalmente en
Líbano y
Palestina donde los declamadores profesionales del zéjel puede alcanzar altas cotas de reconocimiento y popularidad. El zéjel actual se interpreta en formato de diálogo o debate entre
zaŷŷalin (poetas que improvisan el zéjel) como expresión semi-improvisada y semi-cantada. Normalmente se acompaña de instrumentos musicales de percusión (ocasionalmente también con instrumentos de viento. como el
ney) y un coro de hombres (y más recientemente de mujeres) que cantan partes de los versos.
Algunos zaŷŷaali libaneses muy conocidos son Zein Sh'eib, Talih Hamdan, Zaghloul alDamour, Moussa Zgheib, Asaad Said o Khalil Rukoz.
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