ARTE GÓTICO .-
Inicialmente el alzado de las catedrales góticas francesas sigue el modelo de peregrinación románico con cuatro pisos: arcadas ojivales separando las naves, tribunas, pasaje del triforio en el espesor del muro y ventanas superiores o vidrieras hasta el arranque de las bóvedas (claristorio). Con el tiempo, el alzado quedará reducido a tres cuerpos, sobre todo en España: arcadas entre naves y capillas, triforio (generalmente de arquillos ciegos) y cuerpo de ventanas.
La decoración cambia radicalmente de signo. En ella podemos reconocer claramente lo que de naturalista tiene el estilo gótico. La abstracción geométrica tan representativa de la ornamentación románica se torna aquí en elementos vegetales que se mueven en entera libertad.. Los capiteles van perdiendo importancia como catecismos pétreos y tienden a desaparecer o a ser simplemente indicados por una pequeña moldura o una hoja de acanto.
Y todo queda bañado por la luz, al poder abrir grandes vanos y ventanales en los muros, ya que la descarga de la bóveda se hace al exterior, hacia los arbotantes y pináculos. El gótico es el arte de las vidrieras de colores. Como motivo decorativo también, además de expulsar el agua del tejado, estaba las gárgolas, normalmente con cuerpo de animal y la boca abierta, por donde salía el agua.
Vidrieras con tracerías y vidriera de la Catedral de Chartres
Gárgolas de Nôtre-Dame de París
No hay comentarios:
Publicar un comentario