EL ORDOVICICO .-
la sala del Ordovícico del museo de El Carmen cuenta con una nueva atracción. Se trata de una reproducción de un trilobite, en concreto un Neseoretus Cristani, que viene a sustituir a la anterior maqueta de la exposición itinerante que se mostraba al público. El animal, representado en su espacio natural y a una escala de 10/1 (a un tamaño diez veces mayor que el real) está realizado en madera, masilla epoxídica y poliestireno.
Está representado en el ámbito marino al que pertenece y, en el suelo, puede observarse el característico rastro que deja a su paso. La maqueta completa tiene unas medidas de 1,20 metros de largo por 60 centímetros de ancho y, además, fue realizada por una empresa riosellana. Se trata de Maquetas Lezzagon, ubicada en la localidad de Pando. «Esperamos que este trabajo nos ayude a promocionarnos», explicó Juan Pablo González, uno de los responsables de convertir en realidad el proyecto de reproducción del trilobite riosellano.
Asegura que sacar adelante este trabajo les llevó «unos tres meses», pero que el resultado ha merecido la pena. La responsable del equipamiento museístico, Teresa del Campo, celebró la llegada de esta nueva pieza, que viene a complementar una interesante exposición sobre los hallazgos que aparecieron en El Fabar durante las obras de la Autovía del Cantábrico. «Complementará la información de una forma didáctica y directa», explicó.
Y es que los que se acerquen a partir de ahora al museo riosellano podrán contemplar cómo eran estos animales de los que tanto se ha oído hablar y que, a la vez, son tan desconocidos para el gran público. «La nueva maqueta permitirá conocer el aspecto del trilobites y, además, mostrarlo tal y como era en vida, en el lugar que habitaba», detalló. Una mejora que, seguramente, atraerá aún a más gente a este original equipamiento cultural.
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