Cordelería es el arte que enseña a fabricar los cabos y a trabajar en ellos para su recomposición o su mejor uso.
Mientras que la habilidad de un marinero en la era de la navegación a vela se juzgaba frecuentemente por lo bien que utilizaba elburil de marinería, estos conocimientos también abarcan el amarre a otra embarcación, el remolque, reparaciones en movimiento y otras habilidades que siguen siendo críticas para los marineros modernos.
Los cabos son una combinación de varios hilos de cáñamo torcidos. Un largo mechón de cáñamo torcido, que casi siempre lo está de derecha a izquierda, se llama filástica. Si la torsión de la filástica es considerable, adquiere ésta una gran fuerza de elasticidad que tiende a destorcerla. Uniendo varias filásticas y dejando obrar esta fuerza, cada una de ellas se destorcerá arrollándose sobre las otras y formarán lo que se llama un cordón que estará torcido al revés o de izquierda a derecha. El cordón es el elemento del cabo que se forma torciendo varios cordones uniéndolos y dejando obrar su elasticidad para que se arrollen unos sobre otros. De este modo el cabo está torcido en el mismo sentido que la filástica. Los cabos que generalmente se usan son los formados por tres o cuatro cordones.
En cordelería se usa la voz colchar en lugar de torcer, y se dice que un cabo tiene buena colcha o que está bien colchado cuando está bien torcido. Se llama también colcha la huella que deja en un cabo el cordón que se desliza. Los cabos que están colchados de derecha a izquierda, se dice que están colchados al derecho o que tienen colcha de guindaleza, y los que están colchados de izquierda a derecha que lo están al revés o que la tienen de calabrote.
Nudos
Los empalmes cortos son nudos para mantener juntos el extremo cortado de una cuerda para evitar que se deshilache y asegurar la facilidad de su uso. Los nudos constrictores pueden servir como empalmes temporales al cortar cuerdas, al igual que un par de capas de cinta adhesiva.1 La forma más simple es el nudo común.
Las fibras sintéticas modernas, tales como nailon y poliéster, requieren métodos alternativos tales como la fusión, que utiliza calor para fundir las fibras para hacer un corte limpio y permanente; para las fibras que no se pueden fusionar en caliente, por ejemplo, la aramida, es necesario sumergir el extremo cortado en un recubrimiento adhesivo de goma, resina o pintura.
Sin embargo, el experto en cuerdas y nudos, Geoffrey Budworth, advierte contra este modo de unir las fibras de los extremos con calor:2
Sellar las puntas de los cabos de esta manera es descuidado y puede resultar peligroso. En una ocasión, un operador de un remolcador se abrió la palma de la mano hasta los tendones cuando un cabo de cuerda endurecido (y obviamente, afilado) que había sido sellado en caliente se le resbaló al agarrarlo. No hay nada como un empalme corto bien hecho.
Tipos de cabos
Los cabos con relación a sus gruesos toman los nombres siguientes:
- Beta. Cuando tienen menos de 0,116 m. (5") de circunferencia.
- Guindaleza. Cuando tienen de 0,116 m. a 0,255 m. (5" a 11") y están colchados al derecho.
- Calabrote. Cuando tienen de 0,139 m. a 0,255 m. (6" a 11") y están colchados al revés.
- Cable. Cuando tienen más de 0,255 m. (11") de circunferencia y están colchados al revés.
Para medir los cabos se emplea una cinta dividida en pulgadas y líneas, llamada pulgadera, arrollándola al que se quiere medir. En la cordelería se usan con mucha frecuencia cabos de muy poca mena de diversas clases. Los principales son:
- el hilo de vela o bramante. Se compone de dos filásticas muy delgadas.
- el merlín. Generalmente, es negro y está formado por tres filásticas muy bien torcidas.
- el baibén. Se hace con tres cordones formado cada uno de dos o tres filásticas colchadas al derecho.
- el meollar. Es un cordoncito flojo compuesto de tres o más filásticas que se hace en general de cáñamo usado y en este caso se llama contrahecho.
El extremo de un cabo, cordón o filástica se llama chicote y el cabo considerado con relación al chicote toma el nombre de firme.
El encaje puede definirse como un tejido ornamental y transparente, tradicionalmete hecho a mano, que se adorna conbordados. También existen «encajes mecánicos», hechos a máquina.
Se llama encaje porque al principio, se solía hacer entre los bordes de dos tiras paralelas de lienzo, como si fuera una labor encajada entre ellas, y se denominaba asimismo randa (del alemán rand —borde u orilla—) porque suele bordear a otra pieza. Por esta misma causa, y por terminar en picos o dentellones, se conoce también con el nombre de puntas opuntilla (en francés, dentelles) aunque este nombre se aplica en España sólo a los encajes pequeños y dentellados.
Encaje y bordado
El encaje propiamente dicho se diferencia del bordado sobre malla o sobre cualquier tela muy transparente en que no exige un tejido previo, como lo requiere el bordado. Por eso, no deben considerarse encajes, hablando con propiedad, las labores de calados o de puntos cortados y las que se llaman a hilo sacado o tirado, ni aún las pequeñas puntas bordadas en la orilla de alguna prenda de vestir, ni el llamado por los italianos punto al aria (en el aire) cuando sólo es la misma labor de aguja que se hace para llenar los orificios de los puntos cortados o las pequeñas labores puntiagudas antedichas, pues todas ellas requieren un tejido preexistente sobre el cual se trabaja. Pero muy bien pueden considerarse tales labores como de transición del bordado al encaje y, sin duda, fueron ellas las que inspiraron u ocasionaron la invención de esta artesanía.
Características
Se distinguen por lo común en los encajes dos elementos constitutivos:
- el dibujo o bordado que ofrece forma geométrica en sus comienzos y tiende más a la interpretación de la fauna o flora natural, desde el siglo XVII.
- la red sobre la que se destaca el anterior. Está constituida por un conjunto de bridas que unen los dibujos entre sí, las cuales forman en muchos casos una verdadera red de cuatro o seis lados. Algunas veces, los hilos de unión llegan a ser tan cortos que los dibujos se tocan entre sí, dejando espacios calados y sin bridas.
Los trazos del dibujo o bordado son frecuentemente llenos y tupidos. A menudo se disponen de modo que sólo el perfil aparezca firme, ya de relieve, ya llano, quedando el espesor o interior de dichos trazos hueco y relleno o nutrido con una red fina, según la escuela o taller a que pertenezca el encaje.
Hilos
Los hilos preferidos para los encajes son siempre los de seda y lino por su finura y resistencia, y sólo para encajes o puntillas más vulgares se hace uso del algodón o equivalente. Con ellos, se unen a veces, algunos hilillos de plata u oro para realzar el dibujo. Se llama «blonda» al encaje de seda (del francés blond, rubio), pues en los comienzos de su confección en Francia, solía tener color blanco-amarillento de la seda natural.
Tipos de encaje
Por el medio o instrumento con que se elaboran los encajes se distinguen varios tipos:
- al bolillo.
- a la aguja, que es de labor más fina y costosa y suele presentar algún mayor realce que el anterior.
- ambos pueden suplirse en parte por el ganchillo que produce una labor más gruesa y menos artística.
- mecánico, todos, en fin, se reemplazan desde el siglo XIX por máquinas que imitan los encajes hechos a mano.
Con los procedimientos mencionados pueden obtenerse las distintas clases de labores:
- un tejido de redecilla o tul (cuadrada o hexagonal) sin más.
- un tejido de redecilla con dibujos y figuras, o «encaje llano».
- un tejido de redecilla con dibujos y figuras por separado para unirlas después al tejido de fondo, o «encaje de realce», por el relieve que presentan. Este tipo de encaje, llamado también de aplicación, se forma uniendo, por medio de la aguja, las figuras hechas aparte (de encaje) —y recortando luego la parte del fondo que corresponde a cada figura— a un fondo reticulado o a un lienzo.
Historia
El origen histórico del encaje se fija por lo general a mediados del siglo XVI y se supone que nació en Venecia. Pero si se considera enncaje cualquier tejido transparente y bordado, hay que remontarse a las antiguas civilizaciones de Oriente para encontrar sus primeros vestigios.
Se pudieron fabricar en la antigüedad bordados sobre telas transparentes, al igual que sobre piezas tupidas y hasta llegar a formarse mallas de pasamanería con adornos, de todo lo cual hay indicios y noticias; así la historia del encaje se confunde con la del bordado. Pero según la definición de encaje, se supone que es más reciente habiéndose disputado su paternidad venecianos y flamencos a mediados del siglo XVI. Sin embargo, en España ya se ejercitaban las labores de encaje de aguja y al bolillo medio siglo antes en varias poblaciones de España y con seguridad procedían de los conventos de monjas.
El extraordinario y creciente uso que se hacía de estas manufacturas en los siglos XVI y XVII para golas o gorgueras, cuellos, vuelillos en las bocamangas, cortinajes, etc. contribuyó grandemente al desarrollo de esta industria y a que se fundaran centros muy activos de la misma, durante ese período en toda Europa, sobre todo, enItalia, Francia, estados flamencos, Inglaterra y España.
Variedades de punto de encaje
De acuerdo con su origen fueron apareciendo gran variedad de puntos que son conocidos con nombres como:
- punto de Venecia. Fue el primero conocido en los mercados de Europa y el que más influencia tuvo en sus talleres.
- punto de Malinas. El punto de Flandes floreció en Malinas. Se distingue por sus mallas de orificios redondos o hexagonales y por sus flores y hojas naturales que se bordean con un hilo más grueso pero sin relieve. También se fabricaba en Amberes y Lovaina y con hilo más grueso y peor malla en Arras y Lille.
- punto de Alenzón o punto de Francia. Desde el siglo XVI, se trabajaban los encajes en diversas poblaciones de Francia pero desde 1665 prevalecieron los talleres de Alençon, imitando a Venecia. Se distingue de ésta en dar más precisión y naturalidad al dibujo.
- punto Colbert. Llamado así en memoria del ministro de Luis XIV, Jean-Baptiste Colbert que tanto favoreció estas industrias en Francia desde 1661, un punto que tuvo gran desarrollo en Alenzón y otras ciudades francesas. Se caracteriza por el gran relieve de sus dibujos.
- punto de Bruselas. Se caracteriza por la finura del hilo que procede de un lino especial y la tendencia a la naturalidad en las figuras y motivos vegetales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario