El pastel vasco (en francés gâteau basque en euskera biskotxa) es un postre cuyo origen está en la región vasco-francesa de Lapurdi.
Consta de una masa de pasta de harina, manteca y huevos que se rellena generalmente de crema pastelera, aunque también los hay rellenos de albaricoques o de alguna fruta. Su origen se encuentra en el siglo XVIII en la localidad labortana de Cambo, cuando estaba relleno de fruta como higos, moras y cerezas de Itsasu. A partir del siglo XIX se empezó a rellenar de crema pastelera.
A la versión francesa se le suele poner una capa de mermelada o alguna confitura.
Los pastissets (en Cataluña y Comunidad Valenciana donde se llaman pastelicos en las comarcas castellanohablantes) o tortas de alma (en Aragón), también conocidos como casquetes, son unos pequeños dulces típicos de Aragón (elaborados en la provincia de Teruel, siendo famosos los de las comarcas del Matarraña, Maestrazgo, Andorra-Sierra de Arcos, Cuencas Mineras de Aragón y Bajo Aragón), Cataluña (en la zona que comprende la Tierras del Ebro en la Provincia de Tarragona) y en la Comunidad Valenciana.
Composición[editar]
Son unas empanadillas de masa no fermentada con forma semicircular, de 10 cm de largo, 5 de ancho y 3 de grosor. La receta original aragonesa está rellena de mermelada de calabaza, aunque es común el relleno de cabello de ángel y se elabora la masa con aceite, harina de trigo, huevo, anís y mistela o moscatel dependiendo de la zona. Existen variantes como la que se prepara en la localidad tarraconense de Amposta que puede llevar boniato o requesón en lugar de cabello de ángel. Son también muy conocidos los pastissets elaborados en la localidad catalana de Tortosa.
Las peras al vino son una elaboración repostera típica de la cocina riojana (España) que emplea peras ligeramente escaldadas, desprovistas de su piel y de su centro, cortadas en mitadas.1 Dependiendo del tipo de vino las peras alcanzarán diversos matices de color, más cobriza cuanto más maduro sea el vino tinto. Se suelen servir frías con su salsa convertida en un almíbar, generalmente solas o acompañadas de nata o una crema pastelera. A veces distribuyendo un poco de helado junto con las peras.
Preparación[editar]
Las peras se suelen sumergir previamente en un medio ácido con zumo de limón. Las peras de invierno suelen tener la piel rugosa, gruesa y de color que oscila amarillo dorado y marrón. Estas peras son aromáticas y de sabor ácido y pulpa granulosa. El vino empleado se suele mezclar con azúcar y aromatizar con canela o vainilla. O incluso por clavo de olor, cardamomo y jengibre. Se pone a hervir y las peras en maceración previa se ponen a cocer en este almíbar hasta que adquieran el color violáceo del vino. Se dejan enfriar inmersas en la salsa hasta que se enfríen. Se ponen a macerar en un lugar fresco como puede ser la nevera.
Los pets de monja, traducido al español como pedos de monja, son unas galletas típicas de Cataluña.
No deben confundirse, aunque se asemejan mucho, con las paciencias de Almazán ni con las tetillas de monja.
El nombre de este postre no tiene nada que ver con las ventosidades: su inventor fue un pastelero italiano de Barcelona que las llamó petto di monaca, en referencia a su forma de pecho (pecho de monja), y que derivó en el nombre de pets de monja.
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