A lo largo del año se celebran en Puerto Lumbreras (Región de Murcia, España) diferentes festividades que con el paso del tiempo han arraigado en el sentir local, atrayendo además a numerosos visitantes de las comarcas vecinas.
Fiestas[editar]
Semana Santa[editar]
Aunque en Puerto Lumbreras se celebran procesiones desde al menos la década de los cincuenta del siglo XX, éstas no adquieren una organización formal hasta la década de los noventa de esa misma centuria con la creación de las tres cofradías que procesionan en la Semana Santa y que se organizan en el Cabildo de Cofradías: la Real e Ilustre Cofradía del Santísimo Cristo de la Fé y María Santísima de la Piedad (fundada el 16 de abril de 1990), la Antigua y Venerable Cofradía de la Virgen de los Dolores (fundada el 27 de junio de 1991) y la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno (fundada el 10 de octubre de 1996).1
Se celebran las procesiones del Domingo de Ramos (conocida como la procesión del Pueblo Hebreo), la del Miércoles Santo (Procesión de Nuestro Padre Jesús Nazareno), el Jueves Santo (Procesión del Silencio), el Viernes Santo (Procesión del Dolor y del Santo Entierro) y el Domingo de Resurrección (Procesión del Encuentro), en la que tiene lugar el encuentro entre la Virgen de los Dolores, el Cristo Resucitado y San Juan Evangelista, los dos últimos portados exclusivamente por mujeres.
Otro acto que ha cobrado importancia con el paso del tiempo es el Encuentro de saetas de las noches de Jueves y Viernes Santo, durante las procesiones del Silencio y del Dolor y Santo Entierro,al que acuden artistas de relevancia nacional como José Meneses, José de la Tomasa, Chano Lobato o Curro Piñana. En el año 2012 ha celebrado su XIV edición.2
En la Casa-Museo de las Cofradías se da a conocer la historia y patrimonio de la Semana Santa de Puerto Lumbreras.
Fiestas patronales[editar]
Las fiestas en honor a la Virgen del Rosario (patrona de Puerto Lumbreras) se celebran la primera semana de octubre siendo fiesta local el día siete de ese mes (festividad de la Virgen del Rosario). Cuentan cada año con un gran programa de actividades entre las que destacan el Desfile de Carrozas, el Mercado de Artesanía, la Feria de Mediodía, la Ofrenda Floral a la Virgen y el desfile en honor a la Virgen del Rosario.
Unas semanas antes, en un sábado del mes de septiembre, tiene lugar el conocido Baile de la Reina, la antesala de las fiestas patronales. Es una gala en la que acude todo el pueblo y en la que se elige a la reina de las fiestas. Según el historiador Romera Sánchez, cronista oficial de Puerto Lumbreras, el primer baile tuvo lugar en el año 1957 junto a la Balsa de la Sociedad de Aguas, acto que sirvió además para recaudar fondos para pagar las posteriores fiestas patronales de octubre.
Dia de la independencia[editar]
La constitución como municipio independiente se conmemora el 7 de julio. En este día tan señalado se celebra la creación en 1958 del municipio de Puerto Lumbreras que hasta aquel año había formado parte de Lorca. Tienen lugar varios actos, como la jura de la bandera civil o la distinción a ciudadanos e instituciones que han contribuido al progreso de la localidad.
Ferias y Festivales[editar]
Mercado del Ganado[editar]
Tiene su origen en los inicios del siglo XX en los tratos que ganadores y agricultores realizaban para que éstos últimos comprasen los animales que necesitaban para el laboreo agrícola. Con el paso del tiempo, el mercado fue ganando importancia hasta el punto que actualmente se celebran dos ferias cada año. La Feria Grande, en el mes de mayo y que abre la temporada en España de ferias de ganado equino, y la Feria Chica, en el mes de diciembre. Sendas ferias están dedicadas al ganado equino, asnal y mular.
Festival de Arte Actual Explum[editar]
Certamen de arte actual y música que se organiza en Puerto Lumbreras desde el año 2004. Tiene dos secciones, Explum arte, que muestra las últimas tendencias del arte contemporáneo a través de una selección de obras de jóvenes artistas menores de 35 años y la producción de proyectos artísticos de artistas galardonados en ediciones previas y Explum música, que mediante conciertos en el cerro del Castillo muestran las expresiones más actuales de la creación musical contemporánea.
Nogalte Cultural[editar]
En los meses de verano se organizan numerosas actividades en diferentes espacios del municipio relacionadas con la música, el teatro, la danza o el cine. Una de las más destacadas es el Festival del Folclore, que se celebra anualmente durante el mes de julio, y en el que participan grupos regionales, nacionales e internacionales.
Otras fiestas[editar]
Además de las fiestas relacionadas que tienen lugar en la localidad de Puerto Lumbreras, en el municipio hay otras festividades en las diputaciones del Esparragal-La Estación y Puerto Adentro.
Fiestas del esparragal[editar]
El 8 de diciembre es el día grande de las fiestas de la diputación del Esparragal-La Estación. Ese día es la festividad de la Purísima Concepción, patrona de la localidad. Se organizan numerosas actividades como la ofrenda de flores, la misa solemne y la procesión de la imagen de la Virgen entre las localidades del Esparragal y La Estación y en la que la cuadrilla de ánimas local improvisa coplas dedicadas a familiares y difuntos de diferentes casas a cambio de las limosnas entregadas por los interesados.3
Junto a las celebraciones religiosas, tienen lugar otros actos de carácter lúdico como el campeonato de petanca o la carrera popular.
Fiestas de Goñar (Puerto Adentro)[editar]
Las fiestas de esta pequeña localidad, a caballo entre los municipios de Puerto Lumbreras y Huércal Overa, tienen lugar los días 14 y 15 de agosto, durante la festividad de la Virgen del Carmen, patrona de la localidad. Unos días antes, en el primer fin de semana del mes, se realiza una romería por las calles del pueblo.
Durante las fiestas destaca el campeonato de fútbol, uno de los acontecimientos más importantes ya que a él concurren equipos de varias poblaciones lorquinas.
Fiestas del Niño de Nápoles[editar]
Tienen lugar en la Ermita del Niño de Nápoles, en el mes de enero, el domingo siguiente al día de San Antonio. Son unas fiestas muy arraigadas entre los vecinos de Puerto Lumbreras. Tiene lugar una misa y procesión en honor al Niño de Nápoles, un Encuentro de Cuadrillas en el que actúan cuadrillas de diputaciones vecinas, además de otras actividades culturales y deportivas.
Mussona es uno de los personajes que representan el Carnaval de Águilas, y una de las máscaras más antiguas de dichas fiestas. Es una figura, mitad humana mitad animal, que representa la dualidad entre el hombre civilizado y el lado salvaje que todo ser humano lleva en su interior.
Hay testimonios, tanto escritos como gráficos, que atestiguan que personas del pueblo, durante los Carnavales de principios del S.XX, y debido a la carencias económicas de la época (no había posibilidad de elaborar o comprar grandes disfraces), se ataviaban con estopas (los restos de las fábricas de esparto que existían en Águilas por aquellos años) que se rodeaban por todo el cuerpo, y se pintaban la cara con tiznes negros para que no se les conociese; durante las fiestas recorrían las calles metiéndose con la gente, bromeando, asustando a los niños y, en definitiva, haciendo el mamarracho (término que ha sido recogido en el léxico propio del Carnaval de Águilas como persona que se disfraza con cualquier vestimenta durante las noches de carnaval, y que recorre las calles divirtiéndose y bromeando con la gente). Para atraer a los niños, y así poder "atacarlos", la Mussona llevaba un alambre a modo de rabo en el que se colocaba churros. La figura de la Mussona desapareció y quedó en el olvido. Pero en 1999, Lorenzo Antonio Hernández Pallarés, historiador aguileño, rescató a la Mussona de entre documentos históricos que demostraban su existencia, y trabajando conjuntamente con la federación de peñas del carnaval de la localidad, se instauró, el jueves previo al domingo de carnaval, un acto que se empezó a denominar Suelta de la Mussona.
"Suelta de la Mussona"[editar]
Durante la Suelta de la Mussona, la persona encargada de representar a dicho personaje, baja desde el Castillo de San Juan de las Águilas hasta la Plaza de España ataviado como un ser mitad hombre, mitad bestia. Durante el trayecto, el séquito que la acompaña (con vestimentas acordes con la Mussona y tocando caracolas) y el público asistente, corean un cántico para reclamar la atención de la bestia y hacerle enfadar (Mussooooona na!! Mussooooona na!!). La pseudo-bestia, alterada por los cánticos, intenta asustar a los que le rodean gruñiendo, trepando, atacando a adultos y niños que la acompañan, e incluso colándose en casas y establecimientos. Cuando la Mussona llega a la Plaza de España, frente al ayuntamiento, las Mussonas de años anteriores, acompañadas de otros antiguos personajes del carnaval, llevan a cabo una invocación hacia la Mussona, culminando la Suelta de ésta, y dando el pistoletazo de salida al Carnaval de Águilas.
El Domador[editar]
En la Suelta de la Mussona existe otro personaje, que acompaña a la Mussona durante su recorrido, que es el denominado Músico-Domador. La función de éste es precisamente lo que su nombre indica: domar a la Mussona durante su suelta; para ello emplea un pandero, cuyo sonido es, según la tradición, lo único que amansa a la fiera. El domador es el encargado de guiar a la Mussona hasta su llegada, y el único capaz de calmarla. La persona que representa al domador es la que el año anterior representó el papel de Mussona.
El oficiante[editar]
Otra figura destacada en la Suelta de la Mussona es el denominado Oficiante. Su función la lleva a cabo en los momentos previos a que la Mussona quede en libertad. Desempeña un papel de sacerdote, encargado de leer el conjuro que hace libre a la Mussona en el Castillo de San Juan de las Águilas. La persona que desempeña este papel es el que el año previo llevó a cabo el papel de domador (por tanto, dos años atrás fue la Mussona).
Evolución del personaje[editar]
A diferencia de los otros tres personajes del Carnaval de Águilas (Musa, don Carnal y doña Cuaresma), la Mussona puede ser interpretada por un hombre o por una mujer indistintamente. Antiguamente, no era una, sino varias las "Mussonas" que salían a la calle durante las noches de carnaval. Desde el rescate del personaje, sólo una persona lo encarna, elegida por las peñas diurnas y nocturnas del Carnaval de Águilas. La primera Mussona "oficial", en 1999, se atavió con un traje que emulaba a las antiguas Mussonas: estopa rodeada en todo su cuerpo, y la cara pintada de negro. Posteriormente, las sucesivas Mussonas han ido sofisticando sus trajes y sus maquillajes, además de escoger cada año un animal o una bestia en torno a la cual se basa la representación del personaje. De este modo, hemos podido ver Mussonas con aspecto de cabra, reptil, águila, oso, tiburón, dragón, erizo, zorra o jabalí, entre otros.
Repercusión de la Mussona[editar]
La aceptación de la Mussona por parte del público durante los últimos años ha sido verdaderamente impresionante. Cada año son más las personas que se disfrazan para la ocasión, y más los visitantes que acuden a Águilas ese día provenientes desde muchos puntos de la geografía española. Tanto ha calado la Mussona en los Carnavales de Águilas que, desde 2009 se ha instaurado el personaje de la Mussona infantil, que junto a la Musa, don Carnal y doña Cuaresma infantiles, representa el carnaval infantil de la localidad.
Quema del raspajo
La Quema del raspajo es una antigua tradición de la localidad murciana de Las Torres de Cotillas, en España, que actualmente se alegoriza con la quema de un espantapájaros gigante, como colofón a las fiestas patronales en honor a Nuestra Señora de la Salceda y que procede de una antigua tradición que daba nombre a las fiestas de la localidad desde finales del siglo XVIII.
El raspajo es la raspa que queda del racimo después de quitarle las uvas. En este pueblo desde el siglo XV y hasta inicios del siglo XX era muy abundante el cultivo de la uva. La fiesta tradicional tal y como lo menciona la prensa de 1911[cita requerida] consistía:
En la pisada pública de esos restos de la cosecha de la uva por parte de los mozos y mozas del pueblo y ofreciéndole el primer mosto de esa uva a la patrona, la Virgen de la Salceda.
Actualmente nada queda de uva en la localidad y la Quema del raspajo quiere rememorar esa vieja tradición y pasado huertano, vendimiador y agrícola de la localidad. Esta tradición en forma de alegoría de la quema fue recuperada en el año 2003 y se ha convertido en un acto multitudinario y un claro emblema de las Fiestas Patronales de Las Torres de Cotillas. Es sin duda un evento variopinto y curioso de cuantos ocurren en España.
Virgen del Castillo | ||
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La Virgen del Castillo en su romería
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Venerada en | Iglesia Católica | |
Templo | Santuario del Castillo (Yecla) | |
Festividad | 8 de diciembre | |
Patrona de | Yecla | |
Fecha de la imagen | 1941 (Miguel Torregrosa) | |
Estilo | Neo-barroco | |
Virgen del Castillo, Inmaculada Concepción es una advocación mariana que se venera como patrona en la ciudad de Yecla (Murcia, España). Su santuario constituye un centro de peregrinación no sólo para los yeclanos, sino también para los habitantes de toda su comarca e incluso del resto de la región y provincias limítrofes.
Tradición y devoción[editar]
La denominación de Virgen del Castillo, aun no siendo la oficial, no es sino el apelativo popular con el que la población ha rebautizado a su patrona por recibir culto en el Santuario del Castillo, así llamado por encontrarse precisamente junto a la fortaleza medieval que corona el cerro en el que se asienta la ciudad. La advocación corresponde en realidad a la Inmaculada Concepción, siendo venerada en el citado templo desde tiempo inmemorial. Está documentada la existencia en ese mismo lugar de una iglesia mozárabe, dedicada a Santa María, que llegó incluso a ser parroquia hasta mediados del siglo XVI.
Pero el hecho que marcó la trascendencia del viejo santuario se produciría durante el reinado de Felipe IV, cuando un grupo de yeclanos dirigidos por el Capitán Martín Soriano Zaplanavuelve a la ciudad después de luchar contra las tropas francesas que habían invadido Cataluña. Los combatientes regresan a Yecla sin haber sufrido baja alguna, hecho que interpretarán como milagroso y por el que deciden subir a la ermita del Castillo en acción de gracias. Aquel acto constituyó todo un acontecimiento para la ciudad, que desde entonces vería en la imagen de Nuestra Señora del Castillo un símbolo de protección.
El recinto donde recibe culto la Virgen ha sufrido numerosas reconstrucciones y reformas a lo largo de su historia, datando el edificio actual del siglo XIX. Tampoco la talla que hoy se venera es la original, puesto que desapareció en la Guerra Civil Española; se trata de una réplica realizada por Miguel Torregrosa en 1941 a semejanza de la primitiva, la cual fue coronada canónicamente en 1954.
Fiestas[editar]
El 17 de julio de 1642, durante la Guerra de Cataluña, 61 yeclanos son convocados para acudir al frente a defender la unidad e integridad de la patria capitaneados por Martín Soriano Zaplana. El campamento se sitúa en las tierras de Vinarós, concretamente en la ermita de San Sebastián. El favorable desarrollo de la contienda conlleva que tras medio año en el acuartelamiento, no tengan que participar en el frente y puedan regresar a la villa sin ninguna baja ni herido.
El sentimiento religioso de aquellos 61 hombres les llevó a subir al Santuario del Castillo donde se daba culto a Nuestra Señora de la Encarnación, ya conocida como Virgen del Castillo, para dar gracias por el regreso de los hombres. No quedando satisfechos con esta acción de gracias, acuerdan bajar todos los años, durante unos días, a la imagen de la Virgen hasta la Iglesia de la Asunción. Estas bajadas de la Virgen iban acompañadas de salvas de arcabuz, como recuerdo a lo sucedido en la contiendo, aún no teniendo fecha fija, consta que se celebraba en diciembre, enero o incluso agosto.
En 1691 se funda la Cofradía de la Virgen, como órgano responsable de los festejos, cuya principal finalidad era adquirir una imagen de la Virgen, obra de un franciscano muy similar a la de ahora. Durante la Guerra de Sucesión, las fiestas reciben su primera regulación,, estableciéndose las celebraciones en el mes de diciembre de cada año, siendo la bajada el día 7, la festividad el día 8, día de la Inmaculada Concepción y el domingo siguiente la subida, estableciéndose ya en 1793 la obligación de que la Virgen permaneciera en la villa como mínimo nueve días para poder realizar un Solemne Novenario.
Lo más importante del siglo XVIII para estas fiestas, llegó a finales del mismo con la creación de las actuales "Ordenanzas", que reúnen las disposiciones legales por las cuales se organizan y regulan todos y cada uno de los actos de las fiestas, quedando ordenadas de un modo positivo por las autoridades ilustradas.
Ya en siglo XIX, conservando lo establecido se perfilan algunas normas para mejora de los actos. A mitad de siglo, el 30 de noviembre 1868, se lleva a cabo uno de los hechos más importantes acaecidos en la historia de la ciudad de Yecla, se inaugura y bendice la actual Basílica de la Purísima, y se determina que sea en este templo donde se desarrollen los cultos y actos religiosos en honor a la Patrona. Ya a finales de siglos se crean dos instituciones en torno a las Fiestas de la Virgen: La refundada Cofradía de la Virgen, encargada de los actos culturales de las Fiestas y la junta de ex-mayordomos para organizar los principales actos. Durante estos años, y gracias al empeño de numerosas personalidades de la ciudad, respaldados por el Ayuntamiento, las Fiestas de la Virgen reciben un gran empujon con mejoras, por ejemplo, en el Santuario del Castillo, con la edificación del Camarín y adecuación de la explanada y el paseo; realización de una carroza procesional y de una valiosa corona de oro y piedras preciosas y un valioso manto azul bordado en hilo de oro artesanalmente.
El siglo XX fue testigo de un impulso sin precedente a nuestras Fiestas de la Virgen, con el cual se intenta continuar. Unas de las personas más importantes en la historia de la Fiestas es D. José Esteban Díaz, que llega a Yecla como arcipreste de la Basílica de la Purísima. Será el encargado de constituir formalmente la actual Asociación de Mayordomos, como organizador de las Fiestas y como símbolo de unión de todos los yeclanos. También es el impulsor de la Coronación Canónica, pero cuando todo brillaba de esplendor llegaron los tristes sucesos de la Guerra Civil Española, que sería la responsable de paralizar las Fiestas durante varios años y acabar con las tradiciones de un pueblo. Cabe destacar la fatídica tarde del 16 de marzo de 1936, donde los yeclanos contemplaron como las llamas acababan con todo el trabajo de siglos, con la quema de todas las iglesias de la ciudad, así como la mayoría de imágenes iconográfias existentes, incluyendo a la imagen de la Patrona de Yecla.
Tras varios años desoladores, el pueblo de Yecla no se rinde, y aún si cabe, salen fortalecidos de la contienda, y de nuevo, encabezados por el Cura de la ciudad, D. José Esteban encargan una nueva talla de la Virgen similar a la anterior al escultor Miguel Torregrosa y la reconstrucción de los templos dañados. También se consigue sacar de nuevo el proyecto de la Coronación Canónica de la Virgen, que tras muchos años de trabajos y esfuerzos se consiguió, por obra del papa Pío XII, se concediera que la Virgen del Castillo fuera Coronada. El día 7 de diciembre de 1954, Yecla ve cómo se consigue un sueño y cómo esa fecha quedará marcada en la historia de la Ciudad, pues se celebra el acto de Coronación.
A partir de entonces, las fiestas se han ido superando año tras años, instaurando nuevos actos como la gran Ofrenda de flores, en la tarde del día 7 de diciembre y otros actos que dan esplendor a las fiestas. También se consigue la creación de más escuadras hasta llegar a las 15 actuales, teniendo estas un papel muy importante para el desarrollo de la actividad festera. Cabe destacar de las últimas décadas, el trabajo de mejora y adecuación de todos los actos, manteniendo intacto el ritual de las Fiestas. En el año 2002 se consigue la Declaración de Interés Turístico Nacional, clave para el desarrollo y proyección en el resto de España y en el año 2008 se declaran a las fiestas como Bien de Interés Cultural Inmaterial, siendo esto clave para mantener la tradición y arraigo de estas fiestas. En la actualidad las Fiestas de la Virgen se definen como las más importantes de la ciudad, con una alta participación tanto de gente de Yecla como de ciudades de la comarca y de toda España, manteniendo la tradición del antiguo alarde militar en unas fiestas adecuadas a la actualidad.
Se desarrollan entre el 5 y el 8 de diciembre, sirviendo de marco a una serie de actos muy tradicionales y enraizados entre la población:
- El Beneplácito: Petición que hacen al Ayuntamiento las escuadras que representan al ejército yeclano para que comiencen las fiestas, teniendo lugar el día 5. Quince cohetes se lanzan desde el Castillo, contestados por otros tantos desde la Plaza Mayor, al tiempo que se izan las banderas en el balcón del consistorio y voltean todas las campanas de la ciudad.
- Beso de la Bandera: El día 6 también sirve de antesala a los días grandes de celebración, en este caso con un acto de exaltación a la enseña yeclana.
- La Alborada: El amanecer del día 7 está ligado al estruendo de miles de arcabuces, con el que se hace un llamamiento general a la población para que inicie la subida al santuario.
- Ofrenda: En la tarde del día 7, constituye uno de los actos más multitudinarios, pues participa todo aquel que lo desea, en parejas, los señores con el traje de "tiraor" y las señoras con teja y mantilla. Tras un desfile por las calles de la ciudad, se llega a la Basílica dónde se lleva a cabo la Ofrenda de Flores a la Virgen.
- La Bajada: Multitudinaria romería con la que la imagen de la Virgen es trasladada a la ciudad desde el Castillo, para celebrar en ella su onomástica. La talla permanece en la Basílica de la Purísima desde el día 7 hasta su regreso al santuario.
- Día de la Virgen: El 8 de diciembre es la jornada grande, celebrándose la Misa Mayor en la Basílica y una solemne procesión con la imagen. Más de quinientos arcabuceros acompañan a la Purísima en el desfile, descargando disparos en su honor e inundando nuevamente de pólvora toda la ciudad. Mención especial merece la solemne entrada de la patrona al templo, momento en que adquiere singular protagonismo el llamado juego u ondeo de la bandera que se realiza tradicionalmente frente al trono.
- La Minerva: En la mañana del día de la subida, el Santísimo Sacramento en su custodia, bendice a la soldadesca y al pueblo en el atrio de Basílica en medio del tronas de los arcabuces y ante el mayordomo jugando la bandera.
- Día de la Subida: Romería de regreso al Castillo, constituyendo el final de las fiestas. Tiene lugar tras la celebración de un novenario que prolonga la estancia de la patrona en la ciudad hasta mediados de diciembre.
Los participantes se dividen en agrupaciones de escuadras: Alabarderos, Alborada, Arabí, Atrio de la Purísima, Capitán Mora, Capitán Zaplana I de la Bandera, Capitán Zaplana I del Bastón, El Castillo III del Bastón, El Paso de la Bandera, La Purísima, La Retaguardia, Retaguardia Los Luna, María Inmaculada, Minerva, Vinaroz, Virgen del Castillo, pudiendo tambier participar de manera libre, sin pertenecer a ninguna escuadra.
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