forros, o a veces panas, el armiño y el vero, así como sus variantes, contra-armiño, contravero y otras numerosas variaciones del vero.
La cibelina o falso-armiño también es considerada como un forro, pero se encuentra sobre todo como un forrado de los mantos de los adornos del escudo. Se encuentra también en los campos cubiertos de "forro al natural".
En el origen, el uso de forros para obtener ciertos efectos coloreados de los blasones parece haber sido una práctica frecuente.
Así, el "color" sable era, en un principio, un forro: era la cibelina de color negro (en ruso sobol del cual deriva sable), pero al final el sable ha terminado por ser considerado como un esmalte, la cibelina ha permanecido como un forro por sus motas (sinónimo de "falso armiño").
La etimología de gules permite pensar también en un forro primitivo. En heráldica, el término de "gules" designaba el color rojo que de hecho, se dice, que se utilizaba en las pieles de los gaznates de las martas. En cuanto al vero, reproducía los forros de la ardilla gris de Rusia con el vientre blanco y la espalda de gris azulada.
La etimología de gules permite pensar también en un forro primitivo. En heráldica, el término de "gules" designaba el color rojo que de hecho, se dice, que se utilizaba en las pieles de los gaznates de las martas. En cuanto al vero, reproducía los forros de la ardilla gris de Rusia con el vientre blanco y la espalda de gris azulada.
Los forros monocromáticos desaparecieron como forros heráldicos y no permanecen más que en las composiciones con motivos bicolores obtenidas por sembrados de motas como el armiño o la cibelina, o por "parchado" como el vero.
Analogías entre forros y sembrados[editar]
Los forros siendo composiciones bicolores utilizan un metal y un esmalte, son calificados como anfibios y como tales, no están bajo la regla de contrariedad de los esmaltes.
De hecho hay mucha diferencia entre campos sembrados de un pequeño mueble, como el "Francia antiguo" de azur sembrado de flores de lis de oro, y el armiño: de plata sembrado de motas de sable; o entre ciertos rebatimientos como los fuselados o los freatados y los innumerables veros. Y de hecho, los ejemplos citados funcionan frecuentemente como forros.
En los adornos exteriores, al contrario, los forros son representados al natural sobre el forrado de los mantos o de las cofias (tocados, bonetes). Las motas de armiño se vuelven pequeños manojos de pelo negro ondulantes (flameados), las campanas y botes de vero tienen límites menos geométricos y la red en quincunce sufre las deformaciones del drapeado del tejido.
Armiño, contra-armiño y armiñado[editar]
El campo sembrado por excelencia es el armiño, que es "plata sembrado de motas de armiño de sable". Este mueble "motas de armiño" no existe más que en los forros, lo que justifica conservar el término técnico "armiño" para describir los sembrados correspondientes.
- El contra-armiño es "de sable armiñado de plata", o aún "de sable sembrado de motas de armiño de plata".
- El caso general sería "el armiño", aunque ese término no estaba reservado más que a las figuras compuestas por las motas. Los campos imitando el armiño con cualquier color se blasonan: de
sembrados de motas de armiño de , y deben respetar la regla de alternancia de los colores, como todo campo sembrado.
Vero y Verado[editar]
El vero y sus diferentes variaciones están formados de la alternancia de "campanas" y de "botes" (que son de la misma forma que las campanas pero pies contra cabeza), orientadas horizontalmente sobre "tiras". Campana y bote son necesariamente de un metal y un esmalte.
El tamaño y el número de las piezas y de las tiras no son cualesquiera, y por tanto este forro no puede, como el armiño, ser considerados como un "sembrado", lo cual supone un número indeterminado de piezas.
De una pieza a la otra, el motivo puede estar alineado en palo, o desfasado en quincunce. Por otro lado, la línea de base puede ser del mismo color que la precedente, o al contrario, alternarlos. Combinando estas posibilidades, el vero puede presentarse en cuatro formas.
- Vero (fig. 1)
- El forro de base está constituido por campanas de azur y botes de plata. La primera tira porta un número entero de campana y comienza por un medio-bote de plata, la segunda desfasada en quincunce, comienza entonces por una media-campana de azur. Si cubre todo el campo, porta de cuatro a cinco tiras. (A menos de cuatro tiras, se habla de un campanario -que es muy raro, a partir de seis tiras se habla de menudo-vero).
- Vero en palo (fig.2)
- las tiras están repetidas de manera idéntica sin desfase.
- Vero en punta1 (fig.7)
- Es un vero en el cual las tiras pares están invertidas.
- Contravero (fig.3)
- Es un vero en palo en el cual las tiras pares están invertidas.
- Vero invertido (fig.4)
- Todas las tiras están invertidas. (Las campanas son de plata y la primera tira comienza por una media-campana. No se debe confundir con un vero de azur y de plata, donde las campanas son también de plata, pero que comienza por un medio-bote de azur). De hecho el "inverso" puede afectar no importan qué variante, se puede entonces imaginar un "vero en palo invertido", etcétera. Estas posibilidades son raramente utilizadas.
- Todas las fórmulas previas tienen sus variantes en verado, verado en palo, etcétera, en tanto que un color al menos difiere del forro de base.
- Verado (fig.5)
- aquí - "verado de gules y de oro".
- Contraverado (Fig.6)
- aquí - "contraverado de sinople y de plata".
- gules (usado siempre en plural)1 es la denominación del color rojovivo.2 De entre los esmaltes heráldicos, pertenece al grupo de los colores, junto con el azur (azul), el sable (negro), el sinople (verde) y el púrpura.
Sinónimos[editar]
Este esmalte también ha sido llamado gola, goles, güella, rosicler, color sangre, y sanguino o sanguíneo(por influencia del esmalte inglés sanguine, de color rojo oscuro).2Etimología[editar]
El término «gules» proviene del francés antiguo goules, ‘cuello de piel [roja]’, plural de gole, guele, ‘garganta’, del latín gula, ‘garganta’.3 El filólogo Joan Corominas atribuye el nombre de este esmalte heráldico a la costumbre de adornar los cuellos de los mantos con trozos de piel de la garganta de la marta, teñidos de rojo.4 Ciertamente algunas canciones de gesta medievales describen este tipo de prendas: el Roman de Raoul de Cambrai(siglo X), por ejemplo, habla de «gules de marta»,Nota 1 y el Aye d’Avignon, de gules de armiño;5Nota 2 mientras que un texto en latín, al describir una prenda de armiño, reza circa collem et circa manus rubris gulis præparatam(‘preparada en torno del cuello y de las muñecas con tiras rojas de piel’).6Históricamente se propusieron otras etimologías. Una de ellas sugería que «gules» podía provenir del francésgueules, ‘fauces’, debido al color rojo del interior de la boca de las fieras cuando devoran a su presa; otra proponía que se originaba en términos similares de diversas lenguas de Oriente Medio y de Asia (árabe, persa, turco, hebreo), como gul, ghiul o gulude, que designarían directa o indirectamente al color rojo.78Historia[editar]
La adopción del término «gules» en heráldica está ligada al desarrollo histórico de esta disciplina. El lenguaje del blasón, que permite describir armerías adecuadamente (blasonar), comenzó a desarrollarse en el siglo XII. De esa etapa formativa de la heráldica se conservan, en romances franceses, descripciones de escudos donde el gules es llamado simplemente vermeil (‘bermejo’) o rouge (‘rojo’).9 Hacia mediados del siglo XIII, sin embargo, los armoriales comienzan a tipificar el lenguaje heráldico, y en ellos el color rojo es llamado «gules» con cierta consistencia, aunque el lenguaje del blasón se estandarizaría recién en el siglo XVI.9En los inicios de la heráldica, entre los siglos XII y XIII, el gules era el esmalte más empleado: el historiadorMichel Pastoureau halló que aparecía en el 60 % de las armerías europeas.10La adopción del término «gules» por parte de la lengua castellana data de 1603.4 En el pasado también se utilizaron, en lugar de «gules», adjetivaciones de color como roxo, rojo y colorado.11Representación[editar]
El gules no se encuentra definido con exactitud. En consecuencia, el tono y el matiz de rojo a emplear para representarlo quedan a criterio del artista heráldico. Se recomienda, sin embargo, que el rojo sea intenso y fiel a su naturaleza; no debe inclinarse demasiado hacia el naranja, el violeta, el marrón ni el rosa.12Cuando no se dispone de colores, el gules puede representarse mediante un rayado muy fino de líneas verticales paralelas, según el método atribuido al jesuita Silvestre Pietra Santa.13 Este es el método de representación que se ve comúnmente en grabados a una tinta.Ejemplos de uso[editar]
Siguen tres ejemplos antiguos y notables del uso del gules.Figuras animales escorchadas[editar]
Los animales que se blasonan como «escorchados» se representan de gules. Escorchado, en el caso de los cuadrúpedos, significa que el animal está desollado, y en el caso de las aves, que está desplumada.14Nombres, atribuciones y significados en desuso[editar]
Hacia el inicio del Renacimiento15 se desarrolló un sistema de correspondencias simbólicas para los colores heráldicos que hoy se encuentra en desuso. Es de notar que hacia 1828 este sistema era considerado absurdo por el heraldista inglés William Berry,8Nota 3 aunque el español Francisco Piferrer, en 1858, lo comenta como si todavía fuese válido.13Si bien Jean Courtois, Heraldo Sicilia del Reino de Aragón, menciona en su tratado Le blason des couleurs(1414) que cualquiera de estas asociaciones del gules puede usarse para blasonar,16 en la práctica es posible que solamente se hayan usado el sistema planetario y el sistema de piedras preciosas. Para Alberto y Arturo García Caraffa (1919), el blasonado con gemas correspondía a los títulos y el de planetas a los soberanos.7 Arthur Fox-Davies cita un ejemplo de blasonado con piedras preciosas que data de 1458.17Nota 4Debajo se dan algunas de las antiguas correspondencias simbólicas del gules, así como algunos de los nombres que se le atribuyeron.Nombres «griegos»Nota 5 carcomme, coccinne, truty16 Otros nombres bélico, bermellón, color de sangre, escarlata13Nota 6 Metal el hierro,18 el cobre,16 el latón819 Planeta Marte8161819 Piedra preciosa el rubí,8161819 el granate piropo, el coral818 Signo del Zodíaco Aries,81819 Escorpio,1819 Cáncer8 Elemento el fuego8161819 Estación del año el verano,816 el otoño18 Mes marzo,81819 octubre,1819 junio, julio8 Día de la semana el martes,81819 el miércoles16 Números 3 y 10818 Árbol el cedro19 Flor el clavel,81819 la rosa roja818 Ave el pelícano19 Edad del hombre la edad viril8161819 Complexión humana colérica,81618 sanguínea1619 Virtudes teologales y cardinales la caridad,8161819 la justicia19 Virtudes y cualidades mundanas la nobleza,161819 la magnanimidad,818 la audacia,1618 la valentía,18 el amor,16 la alegría, la victoria, el ardid, el honor, el furor, el vencimiento con sangre13 Obligaciones del portador defender a los agraviados por falta de justicia - leonado es la denominación de un color rubio oscuro.1 Es muy poco utilizado.
Usos y representación[editar]
En la heráldica occidental, los colores universalmente aceptados son siete: oro, plata, gules, azur, sable, sinople y púrpura. Los demás esmaltes y metales son de invención posterior y suelen restringirse a la heráldica de determinada nación o región. En el caso del leonado, en la heráldica europea continental se lo representa de manera diferente que en las regiones angloparlantes: en las primeras responde a la definición proporcionada anteriormente, mientras que en las últimas es de un color naranja pardusco o incluso francamente naranja.23 A la izquierda pueden verse representaciones aproximadas del leonado continental (arriba) y del británico (abajo). Para el color de este último se ha seguido el criterio de la Heraldry Society, organización heraldista fundada por John Brooke-Little, Rey de Armas Clarenceux (Inglaterra).4En la heráldica inglesa, el leonado no se considera esmalte, metal ni forro, sino que se encuentra en una categoría aparte denominada «mancha» (stain), junto con otros dos colores: el morado (murrey) y el sanguíneo (sanguine). Algunos heraldistas, históricamente, señalaron que estas «manchas» eran los colores indicados para agregar a los escudos brisuras denotativas de infamia, pero otros autores, al no haber encontrado ejemplos de lo antedicho, dudan de que alguna vez estas brisuras se hayan llevado a la práctica.5 Por otra parte, el leonado «inglés» se ha usado de la misma manera que los demás colores heráldicos, sin que parezca tener connotaciones infamantes.2La coloración del esmalte leonado no se encuentra definida con exactitud, por lo que su tono y matiz quedan a criterio del artista heráldico. Se recomienda, sin embargo, que el color empleado sea intenso y fiel a su naturaleza,6 a riesgo de que pueda confundirse con otro color heráldico, como el anaranjado, o con alguna representación oscura y opaca del oro. En la heráldica de las naciones anglófonas no se emplea el esmalte anaranjado, por lo que un leonado naranja no presenta riesgo de confusión con aquel.Cuando no se dispone de colores, el leonado heráldico puede representarse mediante un patrón de rayas muy finas y contiguas, del que a la izquierda se da un ejemplo, aunque el patrón indicado no es el único que existe para este esmalte. Este es el método de representación que se ve comúnmente en grabados a una tinta.Pardo[editar]
Muy ocasionalmente, en la heráldica española e hispana se ha blasonado con el color pardo, del cual no es seguro si debe considerarse idéntico al leonado, o un color heráldico independiente.
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