José II (en alemán: Josef Benedikt Anton Michel Adam ; inglés: Joseph Benedict Anthony Michael Adam ; 13 de marzo de 1741 - 20 de febrero de 1790) fue el Santo Emperador Romano desde agosto de 1765 y único gobernante de las tierras de los Habsburgo desde noviembre de 1780 hasta su muerte. Era el hijo mayor de la emperatriz María Teresa y su esposo, el emperador Francisco I , y el hermano de María Antonieta . Fue así el primer gobernante en los dominios austriacos de la Casa de Lorena , llamado Habsburgo-Lorena . José fue un defensor del absolutismo ilustrado.; sin embargo, su compromiso de modernizar las reformas posteriormente generó una oposición significativa, lo que resultó en un fracaso en la implementación total de sus programas. Ha sido clasificado, con Catalina la Grande de Rusia y Federico el Grandede Prusia , como uno de los tres grandes monarcas de la Ilustración. [1] Sus políticas ahora se conocen como Josephinism . Murió sin hijos y fue sucedido por su hermano menor, Leopold II .
Vida temprana [ editar ]
José nació en medio de los primeros trastornos de la Guerra de Sucesión de Austria . Su educación formal se proporcionó a través de los escritos de Voltaire y los Encyclopédistes , y por el ejemplo de su contemporáneo Rey Rey de Prusia (ya veces rival) . Su entrenamiento práctico fue conferido por funcionarios del gobierno, quienes fueron dirigidos a instruirlo en los detalles mecánicos de la administración de los numerosos estados que componen los dominios austriacos y el Sacro Imperio Romano.
Matrimonios y niños [ editar ]
Joseph se casó con la princesa Isabel de Parmaen octubre de 1760, una unión creada para reforzar el pacto defensivo de 1756entre Francia y Austria. (La madre de la novia, la princesa Louise Élisabeth,era la hija mayor del rey de Francia . El padre de Isabella era Philip, duque de Parma .) Joseph amaba a su novia, Isabella, la encontraba estimulante y encantadora, y buscó con especial cuidado Cultiva su favor y afecto. Isabella también encontró una mejor amiga y confidente en la hermana de su esposo, María Cristina, duquesa de Teschen .
El matrimonio de José e Isabel dio como resultado el nacimiento de una hija, María Teresa . [2] Isabella temía el embarazo y la muerte prematura, en gran parte como resultado de la pérdida temprana de su madre. Su propio embarazo resultó especialmente difícil ya que sufrió síntomas de dolor, enfermedad y melancolía durante y después, aunque Joseph la atendió y trató de consolarla. Permaneció en cama durante seis semanas después del nacimiento de su hija. Casi inmediatamente después de su nueva paternidad, la pareja sufrió dos abortos involuntarios consecutivos, una prueba especialmente dura para Isabella, seguida rápidamente por otro embarazo. El embarazo volvió a provocar melancolía, miedos y temor en Isabella. En noviembre de 1763, mientras tenía seis meses de embarazo, Isabella se enfermó deviruela y entró en el parto prematuro, lo que resultó en el nacimiento de su segundo hijo, la Archiduquesa María Cristina, quien murió poco después de nacer. Progresivamente enferma de viruela y agotada por un parto repentino y una tragedia, Isabella murió la semana siguiente. La pérdida de su amada esposa y su hijo recién nacido fue devastadora para José, después de lo cual se sintió profundamente reacio a volver a casarse, aunque amaba mucho a su hija y seguía siendo un padre devoto de María Teresa.
Por razones políticas, y bajo presión constante, en 1765, cedió y se casó con su prima segunda , la princesa María Josepha de Baviera , la hija de Carlos VII, el emperador del Sacro Imperio Romano y la archiduquesa María Amalia de Austria . [3]Este matrimonio resultó extremadamente infeliz, aunque breve, ya que solo duró dos años. Aunque María Josepha amaba a su marido, se sentía tímida e inferior en su compañía. Al carecer de intereses o placeres comunes, la relación ofrecía poco a José, quien confesó que no sentía amor (ni atracción) por ella a cambio. Se adaptó distanciándose de su esposa hasta el punto de evitar casi totalmente, viéndola solo en las comidas y al retirarse a la cama. María Josepha, a su vez, sufrió una considerable miseria al encontrarse encerrada en una unión fría y sin amor. Cuatro meses después del segundo aniversario de su boda, María Josepha enfermó y murió de viruela. Joseph no la visitó durante su enfermedad ni asistió a su funeral, aunque más tarde lamentó no haberle mostrado más amabilidad, respeto o calidez.Guerra de la sucesión bávara .
José nunca se volvió a casar. En 1770, la única hija sobreviviente de José, María Teresa de siete años, se enfermó de pleuresía y murió. La pérdida de su hija fue profundamente traumática para él y lo dejó afligido y lleno de cicatrices. Al carecer de hijos, José II fue finalmente sucedido por su hermano menor, que se convirtió en Leopoldo II .
Co-regla [ editar ]
Joseph fue nombrado miembro del consejo de estado constituido ( Staatsrat ) y comenzó a redactar unos minutos para que su madre los leyera. Estos documentos contienen los gérmenes de su política posterior y de todos los desastres que finalmente lo superaron. Era amigo de la tolerancia religiosa, ansioso por reducir el poder de la iglesia, aliviar el campesinado de las cargas feudales y eliminar las restricciones al comercio y al conocimiento. En estos, no difería de Frederick, o de su propio hermano y sucesor Leopoldo II , todos gobernantes ilustrados del siglo XVIII. Intentó liberar a los siervos, pero eso no duró después de su muerte. [4]
Donde José se diferenciaba de los grandes gobernantes contemporáneos, y donde él era similar a los jacobinos , estaba en la intensidad de su creencia en el poder del estado cuando era dirigido por la razón . Sin embargo, como gobernante absolutista, también estaba convencido de su derecho a hablar en nombre del estado no controlado por las leyes y de la sensibilidad de su propio gobierno. También había heredado de su madre la creencia de la casa de Austria en su calidad "augusta" y su pretensión de adquirir todo lo que consideraba deseable por su poder o beneficio. No pudo entender que sus planes filosóficos para moldear a la humanidad podrían encontrarse con una oposición perdonable. [5]José fue documentado por los contemporáneos como impresionante, pero no necesariamente simpático. En 1760, le fue entregada su consorte , la bien educada Isabella de Parma . Parece que Joseph estaba completamente enamorado de ella, pero Isabella prefería la compañía de la hermana de Joseph, Marie Christine de Austria . El carácter exagerado del Emperador era obvio para Federico II de Prusia , quien, después de su primera entrevista en 1769, lo describió como ambicioso y capaz de incendiar el mundo. El ministro francés Vergennes , que conoció a José cuando viajaba de incógnito en 1777, lo juzgó "ambicioso y despótico". [6]
Después de la muerte de su padre en 1765, se convirtió en emperador y su madre lo hizo co-regente en los dominios austriacos. Como emperador, tenía poco poder verdadero, y su madre había resuelto que ni su esposo ni su hijo deberían privarla del control soberano de sus dominios hereditarios. José, al amenazar con renunciar a su lugar como co-regente, podría inducir a su madre a disminuir su aversión por la tolerancia religiosa. Él pudo y puso una gran tensión en su paciencia y temperamento, como en el caso de la primera partición de Polonia y la Guerra de Baviera de 1778–1779, pero en última instancia, la emperatriz pronunció la última palabra. Por lo tanto, hasta la muerte de su madre en 1780, José nunca tuvo la libertad de seguir sus propios instintos.
Durante estos años, José viajó mucho. Se reunió con Federico el Grande en privado en Neisse en 1769 (más tarde pintado en La reunión de Federico II y José II en Neisse en 1769 ), y nuevamente en Mährisch-Neustadt en 1770; Los dos gobernantes inicialmente se llevaban bien. En la segunda ocasión, estuvo acompañado por el Conde Kaunitz., cuya conversación con Frederick puede decirse que marca el punto de partida de la primera partición de Polonia. A esta y a cualquier otra medida que prometiera extender los dominios de su casa, José dio una aprobación sincera. Así, cuando Frederick cayó gravemente enfermo en 1775, José formó un ejército en Bohemia que, en el caso de la muerte de Frederick, avanzaría a Prusia y exigiría Silesia (un territorio que Frederick había conquistado a María Teresa en la Guerra de Sucesión de Austria ). . Sin embargo, Federico se recuperó, y luego se volvió cauteloso y desconfiado de José. [7]
Joseph también estaba ansioso por hacer valer el reclamo de Austria sobre Baviera tras la muerte del elector Maximilian Joseph en 1777. En abril de ese año, visitó a su hermana, la reina de Francia, María Antonieta de Austria , que viajaba bajo el nombre de " Conde Falkenstein ". Fue bien recibido y halagado por los enciclopedistas, pero sus observaciones lo llevaron a predecir la inminente caída de la monarquía francesa, y el ejército o la armada francesa no lo impresionaron favorablemente. [8]
En 1778, ordenó a las tropas reunidas que se opusieran a Federico, quien apoyaba al demandante rival de Baviera. Esta fue la guerra de la sucesión bávara . La lucha real fue evitada por la falta de voluntad de Federico para embarcarse en una nueva guerra y por la determinación de María Teresa de mantener la paz. Sin embargo, la guerra le costó a José la mayor parte de su influencia sobre los otros príncipes alemanes, que desconfiaban de sus posibles diseños en sus tierras, y consideraban a Federico como su protector.
Como hijo de Francisco I, José lo sucedió como duque titular de Lorena y Bar , que se había entregado a Francia por el matrimonio de su padre, y rey titular de Jerusalén y duque de Calabria (como representante del Reino de Nápoles ).
Único reinado [ editar ]
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La muerte de María Teresa el 29 de noviembre de 1780 dejó a José libre para seguir su propia política, e inmediatamente dirigió a su gobierno a un nuevo rumbo, intentando realizar su ideal de despotismo ilustrado queactúa sobre un sistema definido para el bien de todos. Él emprendió la difusión de la educación, la secularización de las tierras de la iglesia, la reducción de las órdenes religiosas y el clero en general para completar la sumisión al estado laico, el tema de la Patente de la Tolerancia (1781) que ofrece una garantía limitada de libertad de culto . y la promoción de la unidad mediante el uso obligatorio del idioma alemán (que reemplaza al latín o, en algunos casos, a los idiomas locales), todo lo cual, desde el punto de vista de la filosofía del siglo XVIII, la Era de la Ilustración., apareció "razonable". Se esforzó por lograr la unidad administrativa con la prisa característica de alcanzar resultados sin preparación. José llevó a cabo medidas de emancipación del campesinado , que su madre había iniciado, y abolió la servidumbre en 1781. En 1789, decretó que los campesinos debían recibir pagos en efectivo en lugar de obligaciones laborales. Estas políticas fueron violentamente rechazadas tanto por la nobleza como por los campesinos, [9] ya que su economía de trueque carecía de dinero. José también abolió la pena de muerte en 1787, una reforma que se mantuvo hasta 1795.
Después del estallido de la Revolución francesa en 1789, José buscó ayudar a la familia de su hermana, la reina María Antonieta Antonieta de Francia y su esposo, el rey Luis XVI de Francia . Joseph vigiló el desarrollo de la revolución y se involucró activamente en la planificación de un intento de rescate. Sin embargo, estos planes fracasaron, ya sea debido a la negativa de María Antonieta a dejar a sus hijos atrás en favor de un carruaje más rápido oa la renuencia de Luis XVI a convertirse en un rey fugitivo. Joseph murió en 1790, lo que dificultó las negociaciones con Austria sobre posibles intentos de rescate. No fue hasta el 21 de junio de 1791 que se hizo un intento, con la ayuda del Conde Fersen., un general sueco que había sido favorecido en los tribunales tanto de María Antonieta como de José. El intento fracasó después de que el Rey fuera reconocido por el reverso de una moneda. María Antonieta estaba cada vez más desesperada por la ayuda de su tierra natal, incluso dándole secretos militares franceses a Austria. Sin embargo, a pesar de que Austria estaba en guerra con Francia en ese momento, se negó a ayudar directamente a la Reina francesa, ahora completamente separada.
Políticas administrativas [ editar ]
Cuando María Teresa murió, José comenzó a emitir edictos, más de 6.000 en total, más 11.000 nuevas leyes diseñadas para regular y reordenar todos los aspectos del imperio. El espíritu del joseinismo era benévolo y paterno. Tenía la intención de hacer feliz a su gente, pero estrictamente de acuerdo con sus propios criterios.
José se propuso construir un gobierno racionalizado, centralizado y uniforme para sus diversas tierras, una jerarquía en sí misma como autócrata supremo. Se esperaba que el personal del gobierno estuviera imbuido del mismo espíritu dedicado de servicio al estado que él mismo tenía. Se reclutó sin favor para los orígenes étnicos o de clase, y la promoción se realizó únicamente por mérito. Para mayor uniformidad, el emperador convirtió al alemán en el idioma obligatorio de los asuntos oficiales en todo el Imperio, lo que afectó especialmente al Reino de Hungría . [10] La asamblea húngara fue despojada de sus prerrogativas, y ni siquiera convocada.
Como ministro privado de finanzas, el Conde Karl von Zinzendorf (1739–1813) introdujo un sistema uniforme de contabilidad de los ingresos, gastos y deudas estatales de los territorios de la corona austriaca. Austria tuvo más éxito que Francia al cumplir con sus gastos regulares y obtener créditos. Sin embargo, los eventos de los últimos años de José II también sugieren que el gobierno fue financieramente vulnerable a las guerras europeas que se produjeron después de 1792. [11]
La reforma legal [ editar ]
El ocupado José inspiró una reforma completa del sistema legal, abolió los castigos brutales y la pena de muerte en la mayoría de los casos, e impuso el principio de la completa igualdad de trato para todos los delincuentes. Terminó la censura de la prensa y el teatro.
En 1781–82 extendió la plena libertad legal a los siervos. Los alquileres pagados por los campesinos debían ser regulados por los funcionarios de la corona y los impuestos se aplicaban a todos los ingresos derivados de la tierra. Los terratenientes, sin embargo, encontraron amenazada su posición económica y, finalmente, revertieron la política. De hecho, en Hungría y Transilvania, la resistencia de los magnates fue tal que José tuvo que contentarse por un tiempo con medidas a medias. De los cinco millones de húngaros, 40,000 eran nobles, de los cuales 4,000 eran magnates que poseían y gobernaban la tierra; la mayor parte del resto eran siervos legalmente atados a fincas particulares. Tras el colapso de la revuelta campesina de Horea., 1784–85, en el que más de cien nobles fueron asesinados, el emperador actuó. Su Patente Imperial de 1785 abolió la servidumbre, pero no otorgó a los campesinos la propiedad de la tierra ni la libertad de pagar a los nobles terratenientes. Les dio libertad personal. La emancipación de los campesinos del reino de Hungría promovió el crecimiento de una nueva clase de terratenientes sujetos a impuestos, pero no abolió los profundos males del feudalismo y la explotación de los ocupantes ilegales. El feudalismo finalmente terminó en 1848. [12]
Para igualar la incidencia de los impuestos, Joseph hizo una evaluación de todas las tierras del imperio para que pudiera imponer un impuesto único e igualitario sobre la tierra. El objetivo era modernizar la relación de dependencia entre los terratenientes y el campesinado, aliviar parte de la carga fiscal del campesinado y aumentar los ingresos estatales. Joseph consideró que los impuestos y las reformas agrarias estaban interconectados y se esforzaron por implementarlos al mismo tiempo. Las diversas comisiones que estableció para formular y llevar a cabo las reformas encontraron resistencia entre la nobleza, el campesinado y algunos funcionarios. La mayoría de las reformas fueron abrogadas poco antes o después de la muerte de José en 1790; estaban condenados al fracaso desde el principio porque intentaron cambiar demasiado en un tiempo demasiado corto,
En las ciudades, los nuevos principios económicos de la Ilustración exigían la destrucción de los gremios autónomos, ya debilitados durante la era del mercantilismo. Las reformas fiscales de José II y la institución de Katastralgemeinde (distritos fiscales para las grandes propiedades) sirvieron para este propósito, y los nuevos privilegios de las fábricas terminaron con los derechos de gremio mientras que las leyes de aduanas apuntaban a la unidad económica. La influencia fisiocrática también condujo a la inclusión de la agricultura en estas reformas.
La educación y la medicina [ editar ]
Para generar una ciudadanía alfabetizada, la educación primaria se hizo obligatoria para todos los niños y niñas, y la educación superior en líneas prácticas se ofreció a unos pocos seleccionados. Joseph creó becas para estudiantes pobres con talento y permitió el establecimiento de escuelas para judíos y otras minorías religiosas. En 1784 ordenó que el país cambiara su idioma de instrucción del latín al alemán, un paso muy controvertido en un imperio multilingüe.
En el siglo XVIII, la centralización era la tendencia en la medicina porque más y mejores doctores estaban solicitando instalaciones mejoradas. Las ciudades carecían de los presupuestos para financiar los hospitales locales, y la monarquía quería terminar con las costosas epidemias y cuarentenas. Joseph intentó centralizar la atención médica en Viena mediante la construcción de un solo hospital grande, el famoso Allgemeines Krankenhaus , que abrió sus puertas en 1784. Sin embargo, la centralización empeoró los problemas de saneamiento, causando epidemias y una tasa de mortalidad del 20% en el nuevo hospital; La ciudad, sin embargo, se convirtió en preeminente en el campo médico en el próximo siglo. [13]
Religión [ editar ]
La política de tolerancia religiosa de José fue la más agresiva de todos los estados de Europa.
Probablemente la más impopular de todas sus reformas fue su intento de modernización de la Iglesia católicaaltamente tradicional , que en tiempos antiguos había ayudado a establecer el Sacro Imperio Romano a partir de Carlomagno . Llamándose a sí mismo el guardián del catolicismo, José II golpeó vigorosamente el poder papal . Trató de hacer de la Iglesia católica en su imperio la herramienta del estado, independiente de Roma. Los clérigos fueron privados del diezmo y se les ordenó estudiar en seminarios bajo la supervisión del gobierno, mientras que los obispos tenían que prestar un juramento formal de lealtad a la corona. Financiaba el gran aumento de obispados, parroquias y clero secular por las ventas extensas de tierras monásticas. Como hombre de la Ilustración.ridiculizaba las órdenes monásticas contemplativas, que consideraba improductivas. En consecuencia, suprimió un tercio de los monasterios (más de 700 estaban cerrados) y redujo el número de monjes y monjas de 65,000 a 27,000. Los tribunales eclesiásticos de la Iglesia fueron abolidos y el matrimonio fue definido como un contrato civil fuera de la jurisdicción de la Iglesia.
José redujo drásticamente el número de días sagrados que debían observarse en el Imperio y ordenó que se redujera la ornamentación en las iglesias. Simplificó por la fuerza la manera en que se celebraba la misa (el acto central de la adoración católica). Los opositores a las reformas los culparon por revelar tendencias protestantes, con el surgimiento del racionalismo ilustrado y el surgimiento de una clase liberal de funcionarios burgueses. El anticlericalismo surgió y persistió, mientras que los católicos tradicionales se energizaron en oposición al emperador.
En su Patente de tolerancia de 1781, la Iglesia católica perdió su monopolio de la fe al pertenecer al Emperador y su entorno más cercano: los protestantes y los judíospodían practicar libremente. Sin embargo, se mantuvo la precedencia católica. Esta decisión entró en vigor especialmente en Austria .
El Decreto de secularización emitido el 12 de enero de 1782 prohibió varias órdenes monásticas no involucradas en la enseñanza o sanación y liquidó 140 monasterios (hogar de 1484 monjes y 190 monjas). Las órdenes monásticas prohibidas: jesuitas, camaldolés , orden de los frailes menores capuchinos , carmelitas , cartujos , clarisas , orden de San Benito , cistercienses , orden dominicana (orden de predicadores), franciscanos , padres paulinos y premonstratenses , y su riqueza fue tomada por el fondo religioso.
Sus innovaciones anticlericales y liberales indujeron al Papa Pío VI a visitarle en marzo de 1782. José recibió al Papa cortésmente y se mostró un buen católico , pero se negó a ser influenciado. Por otro lado, José fue muy amigable con la masonería., como lo encontró altamente compatible con su propia filosofía de la Ilustración, aunque aparentemente nunca se unió a la Logia. La masonería atrajo a muchos anticlericales y fue condenada por la Iglesia. Los sentimientos de José hacia la religión se reflejan en un ingenio que una vez habló en París. Mientras se le daba un recorrido por la biblioteca de la Sorbona, el archivista llevó a José a un cuarto oscuro que contenía documentos religiosos, y lamentó la falta de luz que impedía que José pudiera leerlos. José tranquilizó al hombre diciendo: "Ah, cuando se trata de teología, nunca hay mucha luz". [14] Por lo tanto, José fue, sin duda, un católico mucho más relajado que su madre.
En 1789 emitió una carta de tolerancia religiosa para los judíos de Galicia, una región con una gran población judía tradicional que habla yiddish. La carta abolía la autonomía comunal por la cual los judíos controlaban sus asuntos internos; promovió la germanización y el uso de ropa no judía.
Política exterior [ editar ]
El Imperio de los Habsburgo también tenía una política de guerra, expansión, colonización y comercio, además de exportar influencias intelectuales. Mientras se oponía a Prusia y Turquía, Austria era amiga de Rusia aunque intentaba eliminar a los principados danubianos de la influencia rusa. Mayer sostiene que José era un líder expansionista excesivamente beligerante, que buscaba hacer de la monarquía de los Habsburgo la más grande de las potencias europeas. [15] Su objetivo principal era adquirir Baviera, si era necesario a cambio de los Países Bajos austriacos , pero en 1778 y nuevamente en 1785 fue frustrado por el rey Federico II de Prusia, a quien temía mucho; en la segunda ocasión, otros príncipes alemanes, desconfiados de los diseños de José en sus tierras, se unieron al costado de Federico. [dieciséis]También se involucró en una guerra cara e inútil con los turcos (1787–1791). [17] La participación de José en la guerra otomana se mostró renuente, no atribuible a su carácter adquisitivo habitual, sino a sus estrechos vínculos con Rusia, que consideraba el precio necesario que debía pagarse por la seguridad de su pueblo. [18] Después de las derrotas iniciales, los austriacos ganaron una serie de victorias en 1789, lo que finalmente resultaría inútil.
La política balcánica tanto de María Teresa como de José II reflejó el cameralismo promovido por el Príncipe Kaunitz, enfatizando la consolidación de las tierras fronterizas mediante la reorganización y expansión de la frontera militar. Transilvania se incorporó a la frontera en 1761 y los regimientos fronterizos se convirtieron en la columna vertebral de la orden militar, con el comandante del regimiento ejerciendo el poder militar y civil. "Populationistik" fue la teoría predominante de la colonización, que mide la prosperidad en términos de trabajo. José II también hizo hincapié en el desarrollo económico. La influencia de Habsburgo fue un factor esencial en el desarrollo de los Balcanes en la última mitad del siglo XVIII, especialmente para los serbios y croatas. [19]
Reaccion [ editar ]
Las múltiples interferencias con las viejas costumbres comenzaron a producir malestar en todas las partes de sus dominios. Mientras tanto, José se lanzó a una sucesión de políticas exteriores, todas destinadas a engrandecer, y todas igualmente calculadas para ofender a sus vecinos, todas ellas envueltas en celo, y desanimadas. Intentó deshacerse del Tratado de Barrera , que excluyó a sus súbditos flamencos de la navegación del Escalda . Cuando se opuso a Francia, recurrió a otros esquemas de alianza con el Imperio ruso para la partición del Imperio Otomano y la República de Venecia.. Estos planes también se tuvieron que renunciar a la oposición de los vecinos, y en particular de Francia. Luego José reanudó sus intentos de obtener Baviera, esta vez intercambiándolo por los Países Bajos austriacos, y solo provocó la formación del Fürstenbund , organizado por Federico II de Prusia .
La nobleza en todo su imperio se oponía en gran medida a sus políticas sobre impuestos y sus actitudes igualitarias y despóticas. [ cita requerida ]En los Países Bajos y Hungría austriacos, todos estaban resentidos por la forma en que trató de acabar con todos los gobiernos regionales y de subordinar todo a su propio gobierno personal en Viena. La gente común no era feliz. Odiaban la interferencia del Emperador en cada detalle de sus vidas diarias. Como parece, José estaba reformando las políticas del imperio de los Habsburgo basándose en sus propios criterios e inclinaciones personales más que por el bien de la gente. Según muchas de las regulaciones de Joseph, impuestas por una policía secreta, los austriacos consideraban que Joseph estaba tratando de reformar sus personajes y sus instituciones. Solo unas pocas semanas antes de la muerte de José, el director de la Policía Imperial le informó: "Todas las clases, e incluso aquellas que tienen el mayor respeto por el soberano, están descontentas e indignadas.[20]
En Lombardía (en el norte de Italia), las cautelosas reformas de María Teresa recibieron el apoyo de los reformadores locales. Sin embargo, José II, al crear una poderosa oficialidad imperial dirigida desde Viena, socavó la posición dominante del principado milanés y las tradiciones de jurisdicción y administración. En lugar de la autonomía provincial, estableció un centralismo ilimitado, que redujo a Lombardía política y económicamente a un área marginal del Imperio. Como reacción a estos cambios radicales, los reformadores de la clase media se desviaron de la cooperación a una fuerte resistencia. De esta base surgieron los comienzos del posterior liberalismo lombardo.
En 1784, José II intentó hacer del alemán un idioma oficial en Hungría después de que cambió el nombre de Burgtheater en Viena en el Teatro Nacional Alemán en 1776. Ferenc Széchényi respondió convocando una reunión y dijo: " Veremos si también pasa su patriotismo". a la Corona. "Julius Keglević respondió con una carta en alemán a José II:" Escribo alemán, no por las instrucciones, Su Gracia, sino porque tengo que ver con un ciudadano alemán. "El" ciudadano alemán "José II Que traigan la Santa Corona de Hungría.a Viena, donde entregó las llaves del cofre en el que estaba cerrada la Corona a los guardias de la Corona Joseph Keglević y Miklos Nádasdy. José II se abstuvo de organizar una coronación, y Ferenc Széchényi se retiró de la política. El Allgemeines bürgerliches Gesetzbuch también llamado Josephinisches Gesetzbuch, el antecesor de Allgemeines bürgerliches Gesetzbuch, el Código Civil de Austria, que se aplica a todos los ciudadanos por igual, se publicó el 1 de noviembre de 1786 después de 10 años de trabajo desde 1776. § 1:"Todos los sujetos esperan del príncipe territorial seguridad y protección, por lo que es deber del príncipe territorial, los derechos de los súbditos determinar claramente y guiar el camino de las acciones sobre cómo la prosperidad universal y especial lo necesita". [21] Es una clara distinción entre los derechos de los sujetos y los deberes del príncipe territorial, y no al revés. Príncipe territorial ( Landesfürst ) no significa príncipe nacionalista ( Volksfürst ). En Hungría no había un código civil codificado hasta 1959. [22] La Corona fue devuelta a Hungría en 1790, en esta ocasión el pueblo celebró una celebración en masa. [23] [24] [25]Una de las razones por las cuales se negó a ser coronado con la Santa Corona de Hungría fue que Alcuin había escrito en una carta a Carlomagno en 798: " Y no se debe escuchar a esas personas que siguen diciendo que la voz de la gente es la voz. de Dios, ya que el alboroto de la multitud siempre está muy cerca de la locura " . [26]
Para 1790, las rebeliones habían estallado en protesta contra las reformas de José en los Países Bajos austriacos (la Revolución Brabantiana ) y Hungría, y sus otros dominios estaban tranquilos bajo las cargas de su guerra con los otomanos. Su imperio fue amenazado con la disolución, y se vio obligado a sacrificar algunos de sus proyectos de reforma. El 30 de enero de 1790, retiró formalmente casi todas sus reformas en Hungría.
Muerte [ editar ]
En noviembre de 1788, José regresó a Viena con la salud arruinada y fue abandonado. Su ministro Kaunitz se negó a visitar su enfermería y no lo vio durante dos años. Su hermano Leopold se quedó en Florencia . Finalmente, José, agotado y con el corazón roto, reconoció que sus sirvientes no podían o no harían sus planes.
José murió el 20 de febrero de 1790. Está enterrado en la tumba número 42 en la Cripta Imperial de Viena. Pidió que su epitafio dijera: "Aquí está José II, quien fracasó en todo lo que hizo". [27] José fue sucedido por su hermano, Leopoldo II .
Memoria y legado [ editar ]
En 1888, el historiador húngaro Henrik Marczali publicó un estudio de tres volúmenes sobre José, el primer trabajo académico moderno importante en su reinado, y el primero en hacer un uso sistemático de la investigación de archivos. Marczali era judío y un producto de la escuela de historiografía burgués-liberal en Hungría, y retrató a José como un héroe liberal. El erudito ruso Pavel Pavlovich Mitrofanov publicó una completa biografía en 1907 que estableció el estándar durante un siglo después de su traducción al alemán en 1910. La interpretación de Mitrofanov fue muy perjudicial para José: no era un emperador populista y su liberalismo era un mito; José no fue inspirado por las ideas de la Ilustración, sino por políticas de poder puro. Era más déspota que su madre. El dogmatismo y la impaciencia fueron los motivos de sus fracasos. [28]
PGM Dickson notó que José II cabalgó por encima de los privilegios, libertades y prejuicios aristocráticos de la antigüedad, creando así muchos enemigos, y al final triunfaron. El intento de José de reformar las tierras húngaras ilustra la debilidad del absolutismo frente a las libertades feudales bien defendidas. [29]Detrás de sus numerosas reformas se encuentra un programa integral influenciado por las doctrinas del absolutismo ilustrado, la ley natural, el mercantilismo y la fisiocracia. Con el objetivo de establecer un marco legal uniforme para reemplazar las estructuras tradicionales heterogéneas, las reformas se guiaron, al menos implícitamente, por los principios de libertad e igualdad y se basaron en una concepción de la autoridad legislativa central del estado. La adhesión de José marca una ruptura importante ya que las reformas anteriores bajo María Teresa no habían desafiado estas estructuras, pero no hubo una ruptura similar al final de la era joseiniana. Las reformas iniciadas por José II se continuaron en diversos grados bajo su sucesor Leopold y sucesores posteriores, y se les dio una forma "austriaca" absoluta y completa en el Allgemeine Bürgerliche Gesetzbuch de 1811.[ cita requerida ]
El académico estadounidense de origen austriaco Saul K. Padover llegó a un gran público estadounidense con su colorido El emperador revolucionario: José II de Austria (1934). Padover celebró el radicalismo de José, diciendo que su "guerra contra los privilegios feudales" lo convirtió en uno de los grandes "libertadores de la humanidad". Las fallas de José se atribuyeron a su impaciencia y falta de tacto, y sus innecesarias aventuras militares, pero a pesar de todo esto, Padadover afirmó que El emperador fue el más grande de todos los monarcas de la Ilustración. [30] Mientras Padover representaba a una especie de demócrata del New Deal , los historiadores nazis en la década de 1930 hicieron de José un precursor de Hitler. [31]
Una nueva era de la historiografía comenzó en los años sesenta. El estadounidense Paul Bernard rechazó las imágenes nacionales, radicales y anticlericales alemanas de José y, en cambio, enfatizó las continuidades a largo plazo. Argumentó que las reformas de José estaban bien adaptadas a las necesidades del día. Muchos fracasaron debido al atraso económico y la desafortunada política exterior de José. [32] El historiador británico Tim Blanning enfatizó profundas contradicciones inherentes a sus políticas que los hicieron fracasar. Por ejemplo, José alentó las explotaciones campesinas en pequeña escala, retrasando así la modernización económica que solo las grandes haciendas podían manejar. [33] El historiador francés Jean Berenger concluye que, a pesar de sus muchos reveses, el reinado de José "representó una fase decisiva en el proceso de modernización de la monarquía austriaca". Los fracasos se produjeron porque "simplemente quería hacer demasiado, demasiado rápido". [34] Szabo concluye que, con mucho, la beca más importante sobre Joseph es la de Derek Beales, que aparece a lo largo de tres décadas y se basa en búsquedas exhaustivas en muchos archivos. Beales mira la personalidad del emperador, con su comportamiento arbitrario y mezcla de afabilidad e irascibilidad. Beales muestra que Joseph realmente apreciaba la música de Mozart y admiraba mucho sus óperas. Como la mayoría de los otros académicos, Beales tiene una visión negativa de las políticas exteriores de Joseph. Beales encuentra que José era despótico en el sentido de transgredir las constituciones establecidas y rechazar los buenos consejos, pero no despótico en el sentido de cualquier abuso de poder. [35]
Memoria popular [ editar ]
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La imagen de José en la memoria popular ha sido variada. Después de su muerte, el gobierno central construyó muchos monumentos en sus tierras. La primera República de Checoslovaquia derribó los monumentos cuando se independizaron en 1918. Mientras que los checos acreditaron a José II las reformas educativas, la tolerancia religiosa y el alivio de la censura, condenaron sus políticas de centralización y germanización a las que acusaban de causar una disminución en Cultura checa [36]
El distrito de Budapest de Józsefváros recibió su nombre por el Emperador en 1777 y lleva este nombre hasta el presente.
Patrón de las artes [ editar ]
Como muchos de los " déspotas ilustrados " de su tiempo, José fue un amante y patrón de las artes y es recordado como tal. Fue conocido como el "Rey Musical" y dirigió la alta cultura austriaca hacia una orientación más germánica. Él encargó la ópera en alemán Die Entführung aus dem Serail de Mozart . El joven Ludwig van Beethoven recibió el encargo de escribirle una cantata fúnebre, pero no se realizó debido a su dificultad técnica.
Joseph aparece en un lugar destacado en la obra Amadeus de Peter Shaffer , y la película se basa en ella . En la versión cinematográfica, el actor Jeffrey Jones lo presenta como un monarca bien intencionado pero algo aturdido de habilidad musical limitada pero entusiasta, fácilmente manipulable por Salieri ; Sin embargo, Shaffer ha dejado en claro que su juego es ficción en muchos aspectos y no pretende retratar la realidad histórica. Joseph fue interpretado por Danny Huston en la película de 2006 Marie Antoinette .
Títulos y estilos [ editar ]
- 13 de marzo de 1741 - 4 de abril de 1764: Su Alteza Real elArchiduque José de Austria, Príncipe Real de Hungría y Bohemia, Príncipe de Toscana
- 4 de abril de 1764 - 18 de agosto de 1765: Su Majestad el rey de los romanos
- 18 de agosto de 1765 - 20 de febrero de 1790: Su Majestad ImperialEl Sacro Emperador Romano
- Rey de Alemania , Jerusalén , Hungría , Bohemia , Dalmacia , Croacia , Eslavonia , Galicia y Lodomeria
- Archiduque de austria
- Duque de Borgoña , Lorena , Estiria , Carintia , Carniola
- Gran duque de toscana
- Gran príncipe de transilvania
- Duque de Brabante , Limburgo , Luxemburgo , Güeldres , Württemberg , Silesia Superior e Inferior , Milán , Mantua , Parma, Piacenza , Guastalla , Auschwitz , Zator , Calabria , Bar , Montferrat, Teschen
- Príncipe de Swabia , Charleville
- Principado Conde de Habsburgo , Flandes , Tirol , Hennegau , Kyburg, Gorizia, Gradisca
- Margrave de Amberes , Burgau , Lusacia superior e inferior , Pont-à-Mousson , Nomeny , Moravia
- Conde de Namur , Provence, Vaudémont , Blâmont , Zutphen , Saarwerden , Salm , Falkenstein
- Señor de la Marcha Wendish y Mechelen
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