martes, 15 de noviembre de 2016

Teatros por países - Alemania


La Alte Oper - Frankfurt (Ópera Antigua de Fráncfort del Meno) es una sala de conciertos y antiguo teatro de ópera de Fráncfort del MenoAlemania.

Diseñado por Richard Lucae, fue inaugurado el 20 de octubre de 1880, en presencia del Kaiser Guillermo I de Alemania.
En 1937 se hizo el estreno mundial de Carmina Burana de Carl Orff.
Prácticamente destruida durante los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial en 1944, sus ruinas estuvieron a punto de desaparecer y ser reemplazadas por un edificio moderno. En el año 1965 el alcalde Rudi Arndt sugirió, volar el edificio " con un poco de dinamita ", y así consiguió su apodo de " Dinamita Rudi " . Arndt insistió más tarde que nunca había propuesto seriamente una voladura. Una campaña de los ciudadanos la salvó y la reconstrucción comenzó en 1976. Fue reabierta en 1981 con la Octava Sinfonía de Gustav Mahler dirigida por Michael Gielen.

Consta de dos salas, la mayor (Grosse Saal) para 2,500 espectadores y la Mozart-Saal para 700.
Debido a que en 1951 se inauguró la nueva Opera de Fráncfort, durante la reconstrucción se rediseñó el interior para sala de conciertos, piezas de teatro y eventualmente -opera, aunque esta disciplina le cabe preferentemente a la nueva sala.

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Alte Oper (Frankfurt am Main) - DSC02325.JPG











Anhaltisches Theater (Dessau) es el teatro que aloja la compañía de óperaballet, conciertos y actividades escénicas de DessauAlemania.
Consta de dos salas, la mayor con capacidad para 1096 espectadores.
Sede de la ópera, de la Anhaltische Philharmonie y del teatro de marionetas mundialmente famoso.
Se celebra anualmente el Festival Kurt Weill, oriundo de esa ciudad.

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El Badisches Staatstheater Karlsruhe es un teatro de ópera alemán de KarlsruheBaden-Wurtemberg. Fue inaugurado en 1810. A lo largo de los años se han producido remodelaciones hasta 1975, conservando su fachada desde entonces.
Las funciones son multifuncionales ("Dreispartenhaus") y comprenden la música teatral, ballet y obras de teatro al igual que sala de conciertos para las bandas orquestales: Badische Staatskapelle y Badische Staatsopernchor.

El teatro fue construido en 1808 por el arquitecto local: Friedrich Weinbrenner. Dos años después sería inaugurado bajo el nombre de "Großherzoglichen Hoftheater".1 2
El 28 de febrero de 1847 se produjo un incendio en el que fallecieron 63 espectadores, la mayoría a causa del pánico al no poder abrir las puertas, puesto que se abrían hacia dentro impidiendo así una escapatoria rápida. Cabe destacar que el edificio era de madera y que los lienzos aceleraron la propagación del fuego. Tras el accidente se adoptaron medidas de seguridad para prevenir más sucesos. Heinrich Hübsch supervisó la reconstrucción del teatro y en 1853 volvería a abrir las puertas bajo la dirección de Eduard Devrient.
En 1944 volvió a ser destruido por los bombardeos aéreos durante la Segunda Guerra Mundial. Veinte años después volvieron a diseñar un boceto de lo que debería ser el nuevo teatro, actualmente gestionado por el Tribunal Constitucional de Alemania.3 En 1975 terminarían las obras de lo que sería el actual edificio.
Desde 1977 se han interpretado las obras del compositor Georg Friedrich Händel de forma anual. En 1985 se creó el Festival Händel cuya celebración tiene lugar el 23 de febrero coincidiendo con la fecha de su nacimiento.










El Bayreuther Festspielhaus (Teatro del Festival de Bayreuth) es un teatro de ópera de Bayreuth, en BavieraAlemania, que se dedica exclusivamente a la representación de las óperas compuestas por Richard Wagner. Es la sede del Festival de Bayreuth, para el que fue especialmente concebido y construido por el propio Wagner. Fue el lugar donde se estrenó Parsifal, la última ópera de Wagner (1882), así como Siegfried y Götterdämmerung, las dos últimas partes del ciclo El anillo del nibelungo, que vio aquí también su primera representación integral (1876).

Diseño

Wagner adaptó el diseño, sin permiso del arquitecto, de un proyecto de Gottfried Semper para un teatro en Múnich que no llegó a realizarse y que el propio Semper reutilizó después para el Burgtheater de Viena. La construcción estuvo a cargo del arquitecto Otto Brückwald, bajo la supervisión de Wagner y con el apoyo financiero del rey Luis II de Baviera. La primera piedra se colocó el día del cumpleaños de Wagner, el 22 de mayo de 1872. La inauguración se hizo con la primera representación completa de las cuatro óperas que constituyen el ciclo El anillo del nibelungo, del 13 al 17 de agosto de 1876.
Interior del auditorio, en la actualidad.
El cuerpo principal del edificio, con estructura de madera, presenta una escasa ornamentación, con muros de ladrillo, lo que en ocasiones le valió el apelativo despectivo de "el granero". La entrada principal (Königsbau), construida en 1882 como entrada privada para el rey Luis II de Baviera con motivo del segundo Festival y el estreno de Parsifal, presenta, como contraste, la típica ornamentación de finales del siglo XIX, con columnas y muros de piedra. El interior está construido principalmente en madera. En contra de la tradición, el auditorio tiene forma de abanico escalonado, sin galerías ni palcos, con visibilidad perfecta del escenario desde las 1925 localidades.
La boca del escenario presenta un doble proscenio, que da al público la sensación de que la escena está más lejos de lo que realmente es. Este doble proscenio, junto con la disposición del foso de la orquesta y el oscurecimiento total de la sala durante la representación (no habitual en esa época), crean, en palabras del propio Wagner, un foso místico(en alemán: mystischer Abgrund) entre el público y la escena, lo que le da un especial carácter a las representaciones y proporcionan un refuerzo físico al contenido mítico de la mayoría de las óperas de Wagner. Contaba también con escaleras en forma de abanico, la acústica del lugar era impresionante, ya que los cantantes de las óperas que se presentaban ahí no necesitaban forzar tanto su voz para hacer que los escucharan, es decir, de manera natural eran escuchados hasta el último rincón del auditorio.
El teatro ha mantenido el mismo aspecto durante toda su historia, principalmente en la parte accesible al público. La parte escénica, sin embargo, ha sufrido diversas reformas para adaptarse a la evolución de las tecnologías escénicas. Las primeras reformas se hicieron en la década de 1920, coincidiendo con la renovación de las escenografías originales de los primeros festivales, que fueron incorporando escenarios tridimensionales, en lugar de los primitivos telones pintados. Entre 1958 y 1968 se acometió una reforma gradual de toda la estructura del edificio, que sustituyó el primitivo entramado de madera por uno nuevo de acero y hormigón.
Actualmente la boca del escenario tiene 11,8 m de altura y 13 m de anchura, mientras que el escenario tiene una anchura máxima de 27 m y una profundidad de 22 m (que se puede ampliar hasta 40 m si se utiliza el escenario posterior). La torre escénica tiene una altura máxima de 30 m. La sala dispone de 1925 plazas, distribuidas en las 30 filas del patio de butacas (Parkett) y las tres plantas al fondo de la sala (LogeBalkon y Galerie).1 2

El foso de la orquesta

El interior del Festspielhaus, durante la primera representación del Anillo del Nibelungo, en 1876.
El foso de la orquesta queda oculto debajo de una gran concha de madera que devuelve el sonido al escenario, de forma que se mezcla la música con la voz de los cantantes.
Una característica muy significativa del Festspielhaus es la disposición inusual del foso de la orquesta, que se extiende bajo el suelo del escenario y está cubierto por un techo (actualmente metálico, originalmente de madera), de forma que la orquesta es completamente invisible para el público. Esta disposición preocupó a Wagner, que quería conseguir que el público se concentrara solamente en lo que estaba sucediendo sobre la escena, sin distraerse con los movimientos del director o los músicos. Este diseño corrige también el equilibrio de volumen sonoro entre los cantantes y la orquesta, creando la acústica ideal para las óperas de Wagner. Por otra parte, la disposición hace muy difícil dirigir la orquesta, incluso para los mejores directores del mundo, no solo por la oscuridad que reina en el foso, sino porque la reverberación acústica en su interior hace difícil la sincronización entre la orquesta y los cantantes.
La disposición de la orquesta dentro del foso es también singular, sobre todo en tres aspectos:
  1. Los primeros violines se sitúan en el lado derecho del director, y no en el lugar habitual, en el lado izquierdo. De esta forma, el sonido de los violines no se dirige directamente hacia el público, sino hacia el fondo del escenario, donde se refleja de nuevo hacia el auditorio.
  2. Los contrabajosviolonchelos y arpas (cuando se usa más de una, como en el Anillo) están divididos en dos grupos, a cada lado del foso.
  3. El resto de la orquesta se coloca directamente bajo el escenario. La comunicación visual con el director es vital, porque la mayoría de los músicos no pueden ver ni oír a los cantantes, pero esta disposición crea el sonido orquestal característico ideado por Wagner.
En la actualidad el foso tiene 14 m de anchura por 11,5 de largo. Su piso desciende, de forma escalonada, desde 1,5 m por debajo del nivel del escenario hasta 5 m por debajo de éste, en su parte más profunda.

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