domingo, 17 de julio de 2022

ANTROPOLOGÍA - TÉRMINOS

 El mal de Simeón también conocido como "pata de cabra", es una creencia popular supersticiosa que está extendida en muchas zonas de Argentina, según la cual, un bebe es infectado por pequeños gusanos pueden ser macho o hembra o ambos, de color verde o negro que le come toda la columna.

Superstición[editar]

Síntomas y diagnóstico[editar]

Según la creencia popular, los bebés con este mal tienen uno o más gusanos que "se alimentan" de su columna vertebral, causándoles comezón y dolor que los hacen arquearse con su cabeza hacia atrás cuando son levantados.2

Los síntomas son malestar digestivo, dolor, vómitos, diarrea y falta de apetito.

Causas[editar]

Entre las principales causas a las que se atribuye este mal:

  • Convivencia de la madre embarazada con perros en celo durante la gestación.
  • Dejar la ropa del bebé colgada de la noche a la mañana para que seque en el exterior.
  • Malas energías en la casa durante el embarazo o los primeros días de vida del niño: Relaciones enfermizas, pensamientos negativos y otras incomodidades.

Tratamiento[editar]

El tratamiento original para este mal es parte de la religión Umbanda, pero las personas adaptan los rezos según sus creencias. Antes que nada se recomienda buscar un curandero de confianza.

  • Tratamiento 1: Rezar durante 9 días seguidos con el niño panza arriba, rodeados por velas celestes y rojas. Durante este tiempo debes alimentar al niño con zumo de zanahorias para el gusano se alimente de eso y deje de lado la columna del bebé. Cuando el tratamiento culmine el gusano será eliminado mediante vómitos o defecación.
  • Tratamiento 2: Sumergir una rosa y un poco de ruda en aceite de oliva, dejar reposar una hora. Con el bebé panza arriba untar su frente y pancita haciendo la señal de la cruz, mientras se reza. Hacer lo mismo sobre el corazón, rodillas y muñecas. Luego hacer lo mismo pero con el niño de espaldas, sobre la nuca, la columna vertebral y los riñones.

Explicación científica[editar]

Por lo general, los médicos suelen atribuir este mal a las siguientes causas:









Los Manáos (la antigua ortografía) fueron una tribu indígena, que habitaron la región entre la actual ciudad de Manaus - la capital del Estado de Amazonas (Brasil) - y Manacapuru, en Brasil, cuando la llegada de los colonizadores portugués. Su nombre en su lengua significa "Madre de Dios", y dio origen al nombre actual de la ciudad.1​ Formaban parte del grupo arawak. Un importante líder de los indios Manaós fue Ajuricaba.2​ y 3

La tribu de Manaos (o Manaós), considerada orgullosa por portugués, se negó a ser dominada para servir como mano de obra esclava, entró en confrontación con los habitantes de la fortaleza. A través de matrimonios con las hijas deTuxauas (caciques), los militares portugueses comenzaron a conectarse a los Manaos, y trata de apaciguar el conflicto. Sin embargo, el indio Ajuricaba, uno de los líderes de Manaos, se opuso a la colonización de los portugueses, pero parecía apoyar la Holanda (hay controversia). Poseer habilidades excepcionales de liderazgo, Ajuricaba consiguió unir a varias tribus locales, y luchar contra los indios aliados de los portugueses. También organizó un sistema de vigilancia que impedían el movimiento de los portugueses por ríos y lagos en la región.

La zona de conflicto se iba por el Río Negro (afluente del río Amazonas) de Río Branco (Roraima) Sobre la captura de Ajuricaba (de acuerdo con los Artur Reyes, distinguido con el nombre de la Biblioteca Pública principal de Manaus), hay contradicciones sobre su detención se produjo o no brutal. El comunicado oficial no dice nada. Pero la leyenda dice que hubo un golpe violento. De ambas partes, había heroísmo. El portugués comenzó a perder el ánimo después de cuatro asaltos infructuosos, cuando unos soldados lo rodearon, atacando Ajuricaba desde atrás y lo ganaron. Al parecer, la leyenda que tras perder a su hijo Ajuricaba (tan valiente como él), el joven Cucunaça, se lanza entre el enemigo y hacer que las pérdidas, después de ser arrestado y puesto que el hierro.

Ajuricaba y fue llevado a Belén, después de varias pruebas acusando al gran guerrero, antes de llegar a la desembocadura del Río Negro (afluente del río Amazonas), trató de liberar a sí mismo y a sus compañeros. El líder indígene, indignado, aunque presionero en cadenas, amenazó, de verdad, a las tropas de Paes do Amaral y Belchior, que dominaron la revuelta de los indios, después de mucho derramamiento de sangre. De no ser sometido a la humillación en la cara de la victoria del enemigo, Auricaba se lanzó (con otro líder?) En las aguas del río-mar que amaba, ahogado, lo que genera satisfacción a los conquistadores ya libre de preocupaciones para mantenerlo bajo estricta vigilancia para Belén, como el confesar gobernador Maia da Gama.

Además Ajuricaba, más de dos mil indios fueron enviados a Belén para ser vendidos como esclavo. Ajuricaba tenía vínculos con los holandeses, según Ribeiro de Sampaio, que fue negado por Joaquín Nabuco (diplomático imperial de Brasil y defensor de los esclavos). Von Martius habría encontrado Indians Erê-manaó en 1819 en el Alto Río Negro. Después nunca más fueron vistos.

Los habitantes de Manaus adoptado el término indígena "Manauara" para identificar sus antepasados indígenas.4

En relación con los antepasados indígenas de la gente de Manaus, se hizo un intento de olvidar y borrar sus rasgos indígenas y obras históricas (debido a la colonización portuguesa). Es evidente que la destrucción de hecho a los indios del cementerio, donde se encuentra actualmente la plaza Dom Pedro II y el Palacio Rio Branco. Cuando el gobernador de Amazonas, Eduardo Ribeiro, remodelado la plaza, las calles por la noche por alto, se encontró un gran número de igac (olla grande, que se utiliza para almacenar agua, harina o cereales). En la actualidad, no hay ninguna marca que indique la historia indígena en este lugar.







Männerbund (pl. männerbünde) es un término germánico que significa un tipo de agrupación masculina e identificaba a un sistema de lazos sociales en los antiguos pueblos germánicos.1​ Se puede definir como una amalgama territorial de jóvenes varones sexualmente maduros que estaban habilitados para llevar armas a su propio culto y desempeñaban funciones sociales específicas. A los doce años ya podían considerarse capacitados para pertenecer a un männerbund, pues las sociedades germánicas consideraban que era una edad madura y suficientemente apta para el uso de armas y superar los ritos de iniciación de la confraternidad guerrera. En algunos grupos tribales, las männerbund ofrecían un perfil especial de grupo de combate, lo que hoy se entendería como tropas de élite, durante conflictos militares por intereses territoriales.

Origen[editar]

Posiblemente, este tipo de agrupaciones procedían de una antigua tradición indoeuropea. Las históricas diferencias entre los turanios e iraníes, eran conflictos de sociedades a veces con o sin cultos männerbunde por medio.2​ De hecho, el concepto de turanios se refiere a las sociedades tribales iraníes que habían preservado las instituciones de un männerbund, una sociedad independiente fuera de la sociedad.3

Tácito ya mencionó el comitatus en su obra Germania, la existencia de estructuras de alianzas y amistades que forzaban a los reyes a gobernar bajo consulta con sus guerreros, formando un grupo guerrero homogéneo. Comitatus era un vínculo muy fuerte entre los guerreros y su señor, y ninguno abandonaba el campo de batalla antes que el otro.

Historia y leyenda[editar]

Dentro del männerbund resalta claramente las hermandades de cultos religiosos, los berserkers, seguidores del culto a Odín que entraban en cierto éxtasis guerrero durante la batalla con una técnica chamanística apropiada y aprendida. Las partidas vikingas de berserkers que asolaban granjas, mataban a sus dueños, violaban a las mujeres y sus hijas fueron una forma tardía y degenerada del männerbund. En tiempos recientes, ya con el cristianismo imperante en Europa, derivaron en hermandades y alianzas juradas como la Liga Hanseática, sociedades secretas o clanes de crimen organizado (la mafia es un claro ejemplo). El nazismo también ofreció una visión distorsionada del männerbund como la sturmabteilung y schutzstaffel, basada en la hombría, solidaridad masculina y superioridad sobre el extranjero.4​ En la literatura legendaria, los caballeros de la mesa redonda del Rey Arturo es otra interpretación de männerbund.5

Neopaganismo[editar]

Las confesiones neopaganas germánicas, especialmente el teodismo, se organizaron de forma que mantienen las raíces originales odínicas al mismo tiempo que reconstruyeron el männerbund del periodo de las migraciones.







La masculinidad (también llamada hombría o virilidad en su acepción popular) es el conjunto de características que la sociedad supone que definen a los hombres (por ser propias de su sexo o al menos acentuadas en él). Usualmente abarca rasgos tanto biológicos como culturales. Mientras que, distintas corrientes académicas han señalado que la masculinidad es un conjunto de atributos, que los comportamientos y roles asociados con los hombres, niños y adultos, que son definidos social y biológicamente,123distinta de la definición del sexo anatómico masculino.45​ En esta línea de pensamiento académico, desde los estudios de género, se ha señalado que la masculinidad es también la construcción cultural de género que designa el rol de los varones en las sociedades.6

Entre los rasgos convencionalmente considerados masculinos, en tanto el conjunto de características al rol tradicional del varón, se incluyen la valentía, la independencia, y la asertividad.789​ Las valoraciones de estas características y sus aplicaciones específicas varían según la ubicación y el contexto, dependiendo de factores sociales y culturales.10​ Otras fuentes también consideran la fuerza muscular e intelectual,11​ la valentía, la virilidad, la ambición, el dominio de habilidades, el estoicismo, la agresividad, la competitividad, la seguridad, la auto-represión de la afectividad12​ y el ejercicio de la violencia13​ como rasgos de masculinidad. Todo esto se debe a expectativas culturales.14​ De este modo, a lo largo de la historia, los varones han experimentado una gran presión social para responder a las expectativas culturales de masculinidad, a través de comportamientos asociados a esos atributos. Así mismo en este contexto también ha provocado reacciones de hostilidad y represión cuando aparecen mujeres exhibiendo estas características.15

La concepción tradicional y hegemónica de "masculinidad" vincula y legitima la idea de que existe una relación natural entre el sexo masculino y la detención social del poder, especialmente en lo que refiere a la posición relativa de los hombres respecto de las mujeres. Esta ideología, conocida popularmente machismo ,16​ ha condicionado a los hombres para desarrollar conductas caracterizando el riesgo, la ausencia de responsabilidad y el ejercicio de la violencia.17​ Actualmente, la ideología machista es rechazada oficialmente en las sociedades contemporáneas. Sin embargo en la práctica todavía existen desigualdades o presión por perpetuarla.18

En algunas culturas y dependiendo del idioma, los conceptos y objetos inanimados se consideran masculinos o femeninos (la contraparte de lo masculino).19​. Así mismo en la actualidad, se consideran algunos diseños de objetos cotidianos y representaciones como "masculinas" o "femeninas" desde el punto de vista de ventas, diseño y mercadeo.

Generalidades[editar]

El concepto de la masculinidad varía histórica y culturalmente; por ejemplo, aunque el dandi fue visto como un ideal de masculinidad del siglo XIX, es considerado afeminado por los estándares modernos.21​ Similar a la masculinidad es la virilidad (del latín vir , "hombre"). Y por otro lado muchas actividades cotidianas que los hombres modernos realizan como lavar los platos o la ropa eran vistas como "afeminadas" en la antigüedad.

Actualmente existe un amplio espectro de investigaciones sobre el tema de la masculinidad y las masculinidades desde distintas ciencias sociales y con diferentes perspectivas. El estudio de la masculinidad o las masculinidades han sido objeto tanto de la antropología, como la sociología, la filosofía, la psicología y el ámbito de la sexualidad y la salud reproductiva.22​ El estudio académico de la masculinidad ha recibido una mayor atención durante la década de 1980 y principios de la de 1990, (por ejemplo, el número de cursos sobre el tema en los Estados Unidos pasó de 30 a más de 300).23​ Esto ha provocado la investigación de la intersección de la masculinidad con otros ejes de la discriminación social y conceptos de otros campos, como la construcción social de la diferencia de género24​(prevalente en un número de teorías filosóficas y sociológicas).

El símbolo de Marte representa al varón.

Cualidades, características o roles masculinos, se consideran típicos de, o apropiados para, un niño o un hombre. Tienen grados de comparación: "más masculino" y "lo más masculino de todo", y lo contrario puede ser expresado por "poco masculino" o "epiceno".25​ Según algunas fuentes, se entiende por masculinidades a un conjunto de construcciones culturales a través de la historia, por las cuales se les asignan a los varones ciertos roles sociales propios de su género. Desde esta perspectiva se le asignan, también, otras características a las mujeres. Por ejemplo, según el psicólogo Juan Carlos Ramírez Rodríguez, se espera de los varones que sean fuertes, independientes, agresivos, activos, resistentes, que soporten el dolor y que sean ellos los violentos.26​ Normas masculinas convencionales, como las describe Ronald F. Levant en su Masculinity Reconstructed (Masculinidad reconstruida), son "evitar la feminidad; emociones restringidas; sexo desconectado de la intimidad; búsqueda del logro y el estatus; la autosuficiencia; la fuerza; la agresión y la homofobia."27​ Estas normas refuerzan los roles de género mediante la asociación de atributos y características con un género.28

Desarrollo de la masculinidad[editar]

La importancia relativa de la socialización y de la genética en el desarrollo de la masculinidad es debatida.2930​ Psicoanalistas como Sigmund Freud y Carl Jung creían que en el inconsciente todos los seres humanos son bisexuales innatos31​ y los aspectos de la identidad femenina y masculina están presentes en todos los varones humanos.323334

El desarrollo histórico de los roles de género es abordado por la genética del comportamiento, la psicología evolutiva, la ecología humana, la antropología y la sociología.35​ Todas las culturas humanas parecen alentar los roles de género en la literatura, la música, la moda, las producciones audiovisuales, los productos interactivos entre otros productos culturales; ejemplos pueden incluir las epopeyas de Homero, los cuentos de Hengist y Horsa y los comentarios normativos de Confucio. Tratamientos más especializados de la masculinidad se pueden encontrar en el Bhagavad Gita y en el bushidō de Hagakure.

En muchas culturas, la exhibición de características no típicas del género puede ser un problema social. En sociología, este etiquetado es conocido como suposiciones de género y es parte de la socialización para satisfacer las costumbres de una sociedad. El comportamiento no estándar puede considerarse indicativo de homosexualidad, a pesar del hecho de que la expresión de género, identidad de género y orientación sexual son ampliamente aceptados como conceptos distintos en algunas culturas.36​ Cuando la sexualidad se define en términos de la elección del objeto (como en los primeros estudios de sexología), la homosexualidad masculina se interpreta como afeminamiento.37​ La desaprobación social de la masculinidad excesiva puede ser denostada como "machismo"16​ o por neologismos como "envenenamiento de testosterona".








Matará (encomienda)

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Mapa de Matará y Guacará según la división política actual.

Matará era un pueblo de indios de la etnia matará, cercano a la extinta ciudad hispana de Concepción de Buena Esperanza, en la actual Provincia del ChacoArgentina. Se hallaba muy cerca de otro pueblo de encomiendas llamado Guacara. Ambos fueron fundados en 1584 y encomendados a vecinos de Talavera de Esteco, pero luego de fundar Concepción de Buena EsperanzaAlonso de Vera y Aragón y Calderón se dirigió hacia ellos por considerar que se hallaban en su jurisdicción y los ocupó, haciéndose cargo de la encomienda. Esta acción provocó un pleito resuelto luego por el rey de España.1

Se hallaban a unas 7 leguas al oeste de Concepción, esto es unos 50 kilómetros.2​ Matará fue fundamental para el desarrollo económico de Concepción, al punto que la destrucción de este pueblo en 1631 por una coalición de tribus fue el preludio del abandono de Concepción.

Un censo realizado en 1622 contó 638 indios mataráes y "nogosnas" en la encomienda de Matará. Al morir Vera y Aragón en 1605, la encomienda de Matará fue heredada por su viuda Isabel de Salazar a quien sucedieron Pedro Esteban Dávila y luego Felipe de Argañaraz.3

Los restos de Matará fueron encontrados en una zona del sudoeste del departamento General Güemesprovincia del Chaco, conocida como Pampa de Tolosa.

No debe confundirse al pueblo de Matará con otro del mismo nombre (Matará) situado en la provincia de Santiago del Estero en donde fue hallada en 1971 la Cruz de Matará, atribuida al jesuita Alonso Barzana o Barcena, quien la habría tallado en 1594. Un censo aduce la existencia de una tercera encomienda de indios llamada Matalá o Matala, en las cercanías de Matará, pero la ausencia de otros registros hace pensar que solamente haya sido una subdivisión de Matará, quizás por su numerosa población.

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