lunes, 5 de octubre de 2020

PUEBLOS CELTAS ANTÍGUOS

 Los galos eran los pueblos que habitaron lo que hoy es Francia, Bélgica, el oeste de Suiza y las zonas de Países Bajos y Alemania al oeste del río Rin y una franja aún poco determinada de este último país, a la orilla derecha del río.

Los griegos les llamaron celtas hasta que los romanos les denominaron “galos”, y a su gran región la Galia. Ya los mismos romanos habían notado esto, por lo que hacían una diferencia entre la Galia Cisalpina (de este lado de los Alpes) y la Galia Transalpina (del otro lado de los Alpes). A su vez, la Transalpina se dividía en cuatro partes que, según la época de Roma, llamaron Gallia belgica (de celtas menos ortodoxos), la Galia comata o "melenuna" (la netamente celta o tradicional), la Gallia aquitana (con celtas de características diversas o poco definidas) y la Gallia liguria o Celtoligur, la primera en ser anexada a Roma como provincia.


Galos
Map Gallia Tribes Towns-es.svg
Mapa de Galia alrededor del año 58 a. C.

Introducción[editar]

Los galos (o celtas) se extendieron por toda Europa desde siglos antes de la llegada de los romanos. Era gente en continua migración, a quienes los griegos llamaron keltói, aunque se piensa que con este nombre no estaban señalando a un único pueblo, sino a esa gente que se desplazaba y se situaba en determinados territorios, identificándolos realmente con los hiperbóreos.

Por eso los historiadores y geógrafos griegos, al observar las migraciones y escribir sobre los keltói (galos), decían:

“La Céltica está más allá de los Alpes”, “La Céltica está cerca de los ligures, en Italia”, “La Céltica está en Asia Menor [Turquía]”, “La Céltica está más allá de las Columnas de Hércules”.

Estos celtas asentados en el territorio que actualmente ocupa toda Francia, fueron llamados en la Antigüedad por los romanos galos, y el territorio, Galia Transalpina. Así mismo otros grupos de galos se habían asentado en el norte y centro de Italia, siendo llamados por los romanos galos de la Galia Cisalpina. Otros grupos celtas habían seguido su camino cruzando los Pirineos hasta Hispania, donde se mezclaron con los pueblos indígenas y cuya fusión dio lugar a lo que los historiadores llamaron Celtíberos.

Algunos autores explican la confusión que hubo entre el término latino gallus, con el significado de galo, y su homónimo gallus, con el significado de gallo (ave de corral), en francés coq. Según explica el lingüista francés Paul Robert, hasta el año 1138 se utilizaba en Francia el término jal (derivado del latín gallus) para designar al gallo. A partir de entonces se usó el nombre onomatopéyico coq. Pero en el Renacimiento se empleó el juego de palabras de la homonimia y se tomó como emblema de Francia el gallo. Según M. Robert, a partir del siglo XV se empezó a usar en Francia la palabra gaulois como sinónimo de celta o galo.

Los galos de Asia Menor[editar]

Estatuilla Romana de Bronce de un Galo cautivo, siglo II dC

Más tarde, en el siglo III a. C., hubo una gran migración de galos hacia Oriente, recorriendo toda Grecia y llegando hasta Asia Menor donde, después de grandes enfrentamientos con Eumenes I y Átalo I (reyes de Pérgamo), fueron rechazados por estos y se dirigieron a la zona central de Capadocia, donde se asentaron formando una región que pasó a llamarse Galacia y, por tanto, sus habitantes (los galos) pasaron a llamarse gálatas o galateos.

No fue a este grupo étnico a los que se dirigió el apóstol Pablo en su famosa Epístola a los Gálatas. Las “congregaciones de Galacia” (1:2) a las que Pablo escribió eran una mezcla de judíos y no judíos, siendo estos últimos prosélitos circuncisos y gentiles incircuncisos, algunos de los cuales probablemente eran de ascendencia celta. (Hch 13:14, 43; 16:1; Gál 5:2.) A todos se les llamaba cristianos gálatas porque vivían en Galacia. El tenor de la carta hace pensar que Pablo estaba escribiendo a aquellos cristianos del S. de esta provincia romana con los que estaba bien familiarizado, y no a personas de la parte septentrional que le eran totalmente desconocidas y a las que al parecer nunca visitó.

La antigua ciudad de Ankara, que fue sometida antaño por Alejandro Magno, pasó a ser la capital de esta región, con el nombre de Ancyra. La dinastía turca de los selyúcidas la rebautizó más tarde como Angora. El nombre de Ankara fue restablecido en 1930.

La romanización[editar]

Monumento a Gergovia.

Julio César se dirigió contra las tribus celtas de las Galias entre el 58 y el 51 a.C y escribió sus experiencias en De Bello Gallico (‘sobre la guerra de las Galias’). La región que entonces conquistaría César era la Galia Transalpina, donde se hallaba incluida la Gallia Comata o Melenuna (Galia cabelluda). César describió a los galos como individuos inteligentes, muy activos, impulsivos e inestables. El entonces cónsul romano acudió al territorio de la Galia Melenuna para socorrer al pueblo heduo, el cual creía que los helvecios, asentados en lo que hoy es Suiza, sintiéndose amenazados por los germanos, deseaban invadir sus tierras, cuando en realidad sólo la pensaban atravesar en su paso hacia el pago de los Santones, al norte de la Aquitania.

Más tarde los mismos heduos, que estaban en lucha contra los celtas de la Galia Bélgica, volvieron a pedir su ayuda. Como la paz duraba poco en esos territorios, las continuas disputas entre las dos grandes confederaciones de heduos y arvernos, y la amistad con que Roma había distinguido a los primeros, es por lo que Julio César ve la excusa perfecta para instalarse en el lugar. Siempre con el pretexto de pacificar la región, lleva a cabo diversas acciones en contra de varias tribus galas, y en 56 a.C libró una batalla naval contra los vénetos en su paso hacia Britania (Gran Bretaña).

En el año 55 a.C, pueblos celtas, a los que Julio César confunde con germanos, se hallaban muy cerca de las Galias, en la otra orilla del Rin. César mandó a su legión que construyera un puente de madera sobre el río y lo cruzó para luchar contra ese pueblo. De esta forma, evitó una nueva invasión. Fueron dos campañas brillantes y temerarias contra Ariovisto, el jefe "germano", que a pesar de ser su ejército mucho más numeroso fue aniquilado por los romanos cerca de Ostheim (en la actual AlsaciaFrancia).

La lengua[editar]

Los galos hablaban diferentes dialectos de una lengua céltica perteneciente a la familia indoeuropea, que en la actualidad está extinta. En la zona de Aquitania hablaban probablemente lenguas vascas, siendo esta zona bastante más amplia de lo que es actualmente. Ninguna de las lenguas que en estos tiempos se ha dado en llamar “lengua celta” proviene de aquella lengua hablada por los galos o los celtas. La lengua que se habla en Bretaña es una herencia de la gente que llegó de Gran Bretaña durante los primeros siglos de la era cristiana.

Se conoce poca escritura de los galos y se cree que esto se debe a los tabúes religiosos que tenían en este tema de la escritura. Después de su contacto con griegos y romanos utilizaron el alfabeto de unos y de otros.

Galos famosos[editar]













La expresión pueblos galos designa a los pueblos protohistóricos de celtas que residían en la Galia, (Gallia en latín), es decir, aproximadamente en los territorios de las actuales FranciaBélgicaSuiza e Italia del norte, probablemente a partir de la primera Edad de Bronce (segundo milenio a. C.).

Los galos estaban divididos en muchos pueblos o tribus que se comprendían entre ellos, que pensaban que descendían todos de una misma cepa y que conocían su genealogía. A estos vínculos de afiliación, reales o míticos, que les creaban obligaciones de solidaridad, se añadían además alianzas que suscribían algunos para ser considerados en la clientela de otros para formar federaciones como las de los arvernos y heduos. Cada uno de estos pueblos se dividió en "civitas" identificadas por un jefe del lugar y un territorio llamado en latín «pagus», que a su vez se subdividía en «vicus», más o menos equivalente a los cantones actuales.

Las civilizaciones galas se asocian en arqueología a la civilización celta de La Tène (nombre de un yacimiento descubierto en el borde del lago de Neuchâtel, Suiza). La civilización de La Tène floreció en el continente en la segunda Edad de Hierro, y desapareció en Irlanda durante la Alta Edad Media.


Etimología[editar]

El nombre latino de Galli —plural de Gallus—, habitantes de la Gallia, se asoció en el Renacimiento con su homófono galus ‘gallo’, convertido así en el animal emblemático de Francia.

Los antiguos griegos llamaban a los galos Keltoi (Κελτοι) (lat. Celtae, según Julio César) o también Galátai (Γαλάται), plural de Galátēs (Γαλάτης).

Los pueblos germánicos llamaban a los celtas *Walhaz,1​ con el significado posterior de ‘romano, latinohablante’, convertido en alemán moderno Welsch, un término a menudo peyorativo con el que los alemanes designan hoy a los pueblos de lengua romance.

Límites cronológicos y geográficos[editar]

Estatuilla romana de bronce de un galo cautivo, siglo II dC

Los orígenes[editar]

Extensión europea de los pueblos galos.

Los galos son los primeros celtas que poblaron la Europa central, después de que hubieran comenzado a emigrar hacia 1500 a. C. al norte-oeste. Esto explica el porqué de que en otras zonas de Europa se utilicen palabras directamente relacionadas con los celtas o pueblos galos, por poner un ejemplo la Galizia Ucraniana, y tiene alguna relación con los vikingos que supuestamente fundaron la ciudad de Kiev navegando por ríos, de igual forma que la mayor parte de los asentamientos celtas, keltas, keltiae, son con acceso por navegación PortoGal, Wales, (Gales) Galway etc. Existe relación celta con los vikingos, teniendo en cuenta que en la protohistoria todos estos pueblos indoeuropeos estaban emparentados, teniendo como posible origen, los celtas, la Galacia turca hacia el norte por Ucrania y Grecia, llegando desde Ucrania a Polonia y los países bálticos a Escandinavia, y desde Grecia hasta Irlanda y Portugal[cita requerida]

Basta recordar la familia de lenguas uraloaltaicas: finohungúricos también llamadas lenguas ugrofinesas (finlandés y húngaro), estoniocarelioturco y mansi para suponer que los indicios no son desdeñables, para constituir una parte importante de la población de diferentes regiones de la Galia. [cita requerida] Los celtas, que habitualmente no utilizaban la escritura, aparecen, por tanto, en el período conocido como protohistoria, en la Edad del Bronce y la Edad de Hierro.

Los inicios de la época gala son difíciles de fechar y varían entre regiones. Como demostró Henri Hubert, el proceso habría durado varios siglos durante los cuales varios pueblos habrían coexistido. No habrían llegado de repente por una especie de guerra de invasión general, ni en masa por la migración de una multitud de individuos aislados, sino por la llegada de grupos organizados en tribus poco numerosas, que se establecieron en medio de otros pueblos que les acogieron con hospitalidad, derechos definidos por tratados y un territorio.

Es comúnmente admitido que la civilización céltica floreció en la Galia en el periodo de La Tène, es decir, en la segunda Edad de Hierro, a partir del siglo V a.C. La ciudad de Marsella, colonia de la ciudad griega de Focea fue fundada en torno a 600 a. C. en el territorio de los segobriges.

Testimonios arqueológicos e históricos[editar]

Algunos arqueólogos, sin embargo, remontan la civilización gala al siglo VIII a. C. o al siglo VII a. C. (época de la Civilización celta de Hallstatt): las fuentes arqueológicas de esa época, como la tumba de la princesa en Vix (Cote d'Or), datada a principios del siglo V a. C.), dan fe de la existencia de príncipes que ya hacían uso de la espada larga.

En las fuentes griegas, en particular de la época macedonia, hay numerosas menciones de los celtas -entonces llamados «gálatas»-, que formaban parte de contingentes mercenarios y se refieren principalmente a su coraje y a su valor guerrero. Se corresponderían con el período de mayor expansión celta (siglo IV a. C. - siglo III a. C.).

En las fuentes latinas, algo posteriores, los galos de los siglos II y I a.C. son claramente distinguidos de cimbriosteutones (tribus germánico-celtas), bretones y helvecios (tribus celtas de Gran Bretaña y Suiza).

El fin de la independencia[editar]

El conjunto de la Galia está dividido en tres partes: una está habitada por los belgas, otros por los aquitanos, la tercera por el pueblo que, en su propia lengua, se llama celta, y en el nuestro, galo. Todo estos pueblos se diferencian entre sí por el lenguaje, las costumbres, las leyes. Los galos están separados de los aquitanos por el Garona, de los belgas por el Sena y el Marne

Independiente sin estar por ello unificada, la Galia se incorporó militarmente a la república romana en dos etapas: la Galia meridional, más allá de los Alpes (Gallia bracata, expresión latina que se refería a Galia "con pantalones") fue conquistada desde finales del siglo II a. C. y romanizada, al parecer, en menos de un siglo. Se convirtió en la primera provincia romana fuera de Italia: la Galia Narbonense, y contó con la primera ciudad de derecho romano fuera de Italia (Narbona).

La Galia septentrional (llamada Gallia comata, es decir, la «Galia chevelue» o «Galia Cabelluda» por Julio César) fue sometida entre el 58 y el 51 a. C. por las legiones de este último. Esta «Guerra de las Galias» culminó con la derrota de una coalición gala dirigida por el arverno Vercingétorix, en la Batalla de Alesia52 a. C. La historiografía romana, sin embargo, no establece el final de la pacificación hasta el 51 a. C., a raíz de una victoria final sobre los restos de la coalición se reunieron bajo las órdenes del jefe Lucterio. La presencia de muchos lugares llamados «camps de César» (campamentos de César) en Francia no debe engañar: la mayoría de ellos son asentamientos posteriores, que datan a veces de la época medieval. Sin embargo, es probable que la pacificación fuera más larga que lo que se creyó durante mucho tiempo y durara al menos hasta el imperium de Augusto.

Los galos del Imperio[editar]

Los términos galos y Galia, así como la mayor parte de los nombres de los pueblos y tribus de la Galia protohistórica, se mantuvieron en uso para describir a los pueblos y territorios de ultramar. Posteriormente, estas circunscripciones y sus nombres se asociaron a las diócesis para llegar hasta nuestros días, como por ejemplo en Périgueux, ciudad de los petrocorios, o en Vannes, ciudad de los vénetos.

En arqueología e historia, desde hace mucho tiempo se ha designado a los galos romanizados con el término «galorromanos», aunque este término nunca se ha utilizado en las fuentes.

Herencia gala[editar]

El Gálata moribundo, una copia romana en mármol de una obra helenística del siglo III a C. Museos CapitolinosRoma.

El legado que los galos transmitieron al resto del mundo antiguo, concierne principalmente a los ámbitos de la artesanía —ebanistería, forja, (el barril, en particular, es un invento galo), artes culinarias, artes militares (la cota de mallas celta, sin duda, fue el modelo utilizado por los romanos y su uso se extendió a Europa a principios de la Edad Media)— y sobrevivió a través de la cultura romana durante la Alta Edad Media.

Con el objetivo de fomentar el espíritu nacional, la ideología de la escuela de Jules Michelet, especialmente al principio del siglo XX, en un contexto de oposición a Alemania, ha extendido una visión etnocéntrica del pueblo francés, prefiriendo unos galos indígenas en comparación con los elementos romanos, germánicos y posteriores romances. De hecho, el siglo XIX Napoleón III, autor de una biografía de Julio César, contribuyó mucho a dar a los galos un papel moderno, por su participación en las excavaciones que pretendían exhumar los lugares de la guerra de las Galias.

Se conoce muy mal la lengua gala (unos cientos de palabras aisladas), y nada de su gramática y pronunciación. Por ello es casi imposible saber cuál fue su verdadera contribución, en relación a las lenguas latinas y germánicas, en la constitución de la lengua francesa; incluso, si se hubiera convertido en una lengua romance, muchas palabras como «roi» (rey) se han asociado a una etimología latina «rex» aunque «rix» existe en galo. En realidad, así como los galos cisalpinos y transalpinos tenían el mismo sustrato étnico, sus lenguas también estarían sin duda más próximas de lo que se supone.

Los galos usaban el alfabeto griego y como moneda las divisiones de la moneda griega statere. Puede que emplearan (los testimonios no son directos y si poco seguros) el sistema de numeración vigesimal (base 20). Hay alguna presencia residual en el idioma francés de ello, por ejemplo, 80 se dice quatre-vingts (cuatro-veinte) y no octante como en latín, etc., y probablemente es debido a su legado.

Rasgo notable, en la Turquía actual, la Galacia es un lejano testimonio de la presencia de galos (gálatas) que habrían servido a Alejandro Magno como mercenarios antes de establecerse en esta región de Asia Menor. También les habría sido reservado un barrio en Estambul, que lleva su nombre, Galatasaray, «palacio de Gálatas», donde habrían residido los mercenarios contratados por el poder bizantino. Es al menos uno de los posibles orígenes de este nombre. De creer a San Jerónimo, en su comentario de Epístola a los gálatas, estos últimos todavía hablaban, en el siglo IV d. C., el mismo idioma que los tréveros. Se debe de suponer, por tanto, que en esa época el galo aún no había desaparecido de Asia Menor, ni de los alrededores de la región de Tréveris.

Personajes galos célebres:

Clientelismo[editar]

Los galos, al igual que otras muchas civilizaciones antiguas, establecían entre ellos formas de funcionamiento sobre el principio de la clientela (clientelismo. Este lazo social muy fuerte apareció en la época aristocrática (siglos III y II a. C.) y perduró hasta la conquista, cuando los notables locales (los «vergobretos») fueron sustituidos por los nobles. Los clientes servían a los patrones, probablemente en un origen para pagar antiguas deudas, reparar algunas faltas, o por otras razones de carácter social y este vínculo se transmitía hereditariamente. El hombre o el pueblo cliente era libre (el clientelismo antiguo o patrocinio es diferente de la esclavitud), pero tenía que prestar servicios o pagar tributos. Un patrón podía tener varios clientes y también podía, finalmente, romper el vínculo que pesaba sobre su clientela o bien transmitirla a otro. Los gens, linajes o familias enteras, podían también ser clientes de una persona o de una familia y después de otra.

Pueblos galos[editar]

Lista de pueblos en el momento de la Guerra de las Galias[editar]

Pueblos de la Galia citados par César23
nombre francéslocalización
Alóbroges (Allobroges)entre el alto Ródano y el Isère
Ambarros (Ambarri)Valle bajo del Saona
Ambianos (Ambiani)Valle del Somme
Ambibarios (Ambibarii)Armórica (localización problemática)
Ambiliatos (Ambiliati)(confusión posible con los ambianos)
Ambivaretos (Ambivareti)no localizados, puede ser al noreste
Andes (Andes)región de Angers
Arvernos (Arverni)Auvernia
Atrebates (Atrebates)región de Arrás
Atuátucos (Atuatuci)Bélgica - región de Namur
Aulercos branovices (Aulerci Brannovices)rama de los aulercos no localizada
Aulercos cenómanos (Aulerci Cenomani)región de Mans
Aulercos eburovices (Aulerci Eburovices)región de Évreux
Auscos (Ausci)región de Auch
Belóvacos (Bellovaci)región de Beauvais
Bigerriones (Bigerriones)región de Bigorre
Bituriges (Bituriges)Berry
Blanovios (Blannovii)confusión posible con los aulercos branovices
Boyos (Boi)extranjeros instalados entre los heduos
Cadurcos (Cadurci)Quercy
Cáletes (Caletes)Alta Normandía
Carnutes (Carnutes)Beauce
Catalaunos (Catalauni)Châlons-en-Champagne
Caturiges (Caturiges)Valle alto del Durance
Ceutrones (Ceutrones)Valle alto del Isère
Cocosates (Cocosates)Aquitanos mal localizados
Coriosolites (Coriosolites)Côtes-d'Armor
Diablintes (Diablintes)Mayenne
Eleutetos (Eleuteti)no localizados, puede ser entre el Cantal y Aveyrón
Elusates (Eleusates)Aquitanos, región de Eauze
Esuvios (Essuvii)Calvados
Gábalos (Gabali)Gévaudan (hoy Lozère)
Gates (Gates)Aquitanos, no localizados
Grayócelos (Graioceli)región de Mont-Cenis
Grudios (Grudii)pagus o cliente de los nervios
Heduos (Haedui, Aedui)Nivernais, Morvan
Helvecios (Helvetii)Meseta suiza
Helvios (Helvii)Baja Ardéche y las Cevenas
Latobicos (Latobici)pagus o cliente de los helvecios
Lemovices (Lemovices)Lemosín
Leucos (Leuci)Alto Marne
Levacos (Levaci)pagus o cliente de los nervios
Lexovios (Lexovii)Lieuvin, país de Auge
Lingones (Lingones)meseta de Langres
Mandubios (Mandubii)Auxois (Alesia)
Mediomátricos (Mediomatrici)Lorena
Meldos (Meldi)Brie
Menapios (Menapii)Bélgica - Flandes
Mórinos (Morini)Boulonnais, Flandes occidental
Námnetes (Namnetes)País de Nantes
Nantuates (Nantuates)Valais suizo
Nervios (Nervii)Bélgica - Henao, Brabante
Nitióbroges (Nitiobroges)región de Agen
Osismos (Osismi)Finisterre
Parisios (Parisii)región de París
Petrocorios (Petrocorii)Périgord
Pictones (Pictones)Poitou
Pleumoxios (Pleuximoxii)pagus o cliente de los nervios
Ptianios (Ptianii)Aquitanos, no localizados
Ráuracos (Rauraci)región de Basilea
Redones (Redones)región de Redon
Remos (Remi)Champaña
Rutenos (Ruteni)región de Albi y de Rodez
Sántonos (Santoni)Saintonge
Sécuanos (Sequani)Franco Condado, una parte de la Alta Alsacia y de Ain
Sedunos (Seduni)Suiza - región de Sion
Segusiavos (Segusiavi)Forez
Senones (Senones)Beauce, Gâtinais
Sociates (Sotiates)Aquitanos, región de Sos
Suesiones (Sucesiones)Soissonnais
Tarbelos (Tarbelli)región de Tarbes
Tarusates (Tarusates)Aquitanos, ¿zona de Albret?
Tigurinos (Tigurini)aliados de los helvecios, no localizados
Tréveros (Treveri)Luxemburgo, Alemania -Tréveris
Tulingos (Tulingi)aliados de los helvecios, no localizados
Túronos (Turoni)Turena
Unelos (Unelli)Cotentin
Velavios (Vellavii)Velay
Veliocasos (Veliocasses)Vexin
Vénetos (Veneti)Morbihan
Veragros (Veragri)Suiza - región de Martigny
Viromanduos (Viromandui)Vermandois, Thiérache
Vocates (Vocates)Aquitanos, zona de Buch
Voconcios (Vocontii)Condado, Prealpes de Provenza
Volcas arecómicos (Volcae Arecomici)Languedoc
Volcas tectósages (Volcae Tectosages)Valle alto del Garona

Lista de los pueblos galo-romanos, por grandes regiones, en el año 14 de la era cristiana[editar]

Mapa de los pueblos galos.

Aquí está una lista no exhaustiva aún —algunas ciudades han sido capitales de diferentes pueblos a lo largo del tiempo y no todas son coétaneas–. Esta lista es la división administrativa establecida a la muerte de Augusto, en el 14 d. C.:

En Galia Comata o (Galia Cabelluda)[editar]

  • Ciudades libres (Civitates Liberæ), recompensadas por su fidelidad antigua o nueva, pero que todos esperaban ganarlo por la inapreciable ventaja de la inmunidad.

En Gallia Aquitania[editar]

Véase Novempopulania para obtener una lista de los pueblos de la Aquitania antigua.

En Gallia Bélgica[editar]

Pueblos de la Provincia Romana[editar]

Pueblos alpinos[editar]

Es de destacar que algunos de los nombres de estos pueblos -o de sus capitales- tienen derivados en nuestro tiempo, ya sea como nombres de ciudades -provenientes del nombre de la ciudad capital o del propio pueblo- ya sea como el de los habitantes de esas ciudades -bajocasse es el nombre de un residente de Bayeux.

Los diferentes estatus[editar]

Se han dado algunas explicaciones sobre el por qué de las diferencias entre los estatutos citados, especialmente, el por qué de las raras Civitaes Foederatæ. Se aducen razones diferentes para las ciudades de los heduos y los carnutes:

  • Heduos: hay que recordar que fueron los heduos los que habrían "solicitado" intervenir en la Galia en el 58 a. C., a causa de que algunos de los desplazamientos de los pueblos galos, podrían restringir, pensaban ellos, su territorio. No atendiendo a esto, Roma envió al senador y general Julio César, para intervenir y, por tanto, conquistar de una manera oficial la Galia. Los heduos siempre habían sido aliados de Roma, y se les agradeció con este régimen especial.
  • Carnutes: aquí, hay una razón diferente. La leyenda que dice que los druidas de los diferentes pueblos de la Galia celta se reunían en el bosque de carnutes cada año, es cierta (aunque de una manera muy diferente de la imagen dada por René Goscinny en Astérix y los godos). Esta es la razón principal del status dado a la ciudad de Carnutes. Deseando ser bien vistos por los druidas, que tienen un lugar más que importante en la sociedad gala, Roma decidió promover su reunión anual, proporcionándoles un importante lugar de celebración para esa reunión. Esta voluntad de agrado a los druidas desapareció más tarde, cuando Roma quiso eliminarles, para contar con una política basada puramente en la influencia de los poderes humanos, el líder de la ciudad y otras autoridades civiles, más que en los poderes divinos de los druidas. Por otra parte, la influencia que los cultos y mitos romanos, a los ojos de los antiguos romanos, podrían tener sobre los pueblos galos favorecía aconsejaba una romanización más avanzada.
  • Otras ciudades que tenían el status de liberæ eran debido al hecho, con independencia de por ser clientes de los eduos u otras razones, por haber ayudado a Roma muy pronto en la guerra gala. Hay que recordar que una sección del ejército romano, un ala, se hizo completamente con jinetes galos, muy reputados.

Otros pueblos galos[editar]

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