jueves, 26 de noviembre de 2015

Enfermedades veterinarias

Enfermedades aviarias

La enfermedad de Pacheco es una enfermedad extremadamente grave de las aves psitaciformes (loros) causada por un herpesvirus muy contagioso. Todas las especies psitaciformes la pueden contraer y es casi exclusiva de estas aves. Las especies del género Amazona y Psittacus erithacusPoicephalus senegalus , Myiopsitta monachusMelopsittacus undulatus y Leptolophus hollandicus son especialmente vulnerables.
Las aves que sobreviven a la enfermedad tienden a mantener latente el virus, pueden sufrir una recidiva en caso de estrés, y pueden también contagiar a otras aves. Aunque la enfermedad puede aparecer entre amazonas y aras, el reservorio natural más frecuente del virus son los periquitos de la subfamilia Arinae.

Síntomas

La enfermedad suele ser fulminante, las aves mueren generalmente sin dar tiempo a hacer evidente los síntomas principales. En las aras y algunas otras especies pueden aparecer inconsistentemente algunos síntomas como: dificultad respiratoria, obstrucción nasal, conjuntivitis, orina frecuente y diarrea, a veces con sangre, falta de apetito, vómito y decaimiento, antes de que sobrevenga la muerte.1

Prevención

A causa de la posibilidad de latencia del virus, las aves que han sufrido la enfermedad deben aislarse de las aves sanas. A toda ave nueva en un criadero de psitaciformes conviene someterla a pesquisaje serológico y a cuarentena.1 Es conveniente mantener una higiene rigurosa y una ventilación adecuada. La vacunación durante un brote es inefectiva; debe hacerse antes de que aparezca la enfermedad. Existen diferentes cepas de herpes virus que producen la enfermedad de Pacheco y las vacunas son específicas para cada cepa.
La enfermedad de pacheco es sin duda, una de las enfermedades infecciosas más peligrosa y temida por los avicultores de psitácidas. Pese a no ser muy común en nuestro país, su entrada en un criadero puede causar hasta un 100% de bajas. No tiene cura y hasta hace poco resultaba difícil de diagnosticar antes de que empezase a dar síntomas.
pachecosos
La patología está causada por un herpesvirus. Este virus afecta principalmente los linfocitos, las células de la piel y del tejido nervioso. Suele causar una disfunción grave del hígado que ocasiona la  muerte del ave en casi todos los casos. Afecta a todo tipo de psitácidas, pero más gravemente a amazonas, guacamayos, caiques y pionus, aunque también causa muchas bajas entre yacos y you yous. Las psitáculas, cacatúas y eclectus parecen ser más resistentes a la patología. El  reservorio natural de la infección son diversas especies de conuros (aratinga de cabeza azul, aratinga mitrada, cotorra nanday, loro barranquero) y las cotorras argentinas, que suelen portar la enfermedad sin mostrar ningún síntoma.
Se trata de una enfermedad típica de animales de importación, con escasas condiciones higiénicas y hacinamiento de las aves en espacios reducidos. La mezcla de especies susceptibles con especies resistentes hace que la infección se escampe rápidamente y que pueda cursar con muchas bajas. En nuestro país es poco habitual tras el cierre de las fronteras de importación y suele ser vista en psitácidos venidos de otros países europeos, sean de origen salvaje o criados en cautividad. Por ello, si se adquieren aves venidas de otros países hay que realizar exhaustivas cuarentenas y analíticas pertinentes para descartar esta peligrosa enfermedad. Es más común en aquellos países con elevados índices de aves importadas de origen salvaje, como Holanda.
Aves de importación, hacinadas con pobres condiciones higiénicas:
pachecho5
pachecho8
El stress, la mala dieta, las condiciones insalubres, la poca higiene, etc. hacen que los portadores asintomáticos excreten el virus de forma activa, contagiando a todos sus compañeros de habitáculo. Es habitual tras la introducción de un nuevo ejemplar aviar portador, sin cuarentena ni analíticas, que al cabo de unos días o incluso semanas empiecen bajas repentinas sin causa aparente en nuestra colección. Y es que esta enfermedad puede cursar con la muerte súbita sin mostrar sintomatología previa.  Cualquier ave que supere la infección puede convertirse en portadora asintomática de por vida. Estos portadores pueden excretar el virus en situaciones de stress, contribuyen un peligro para el resto de la colección o las colecciones vecinas.
Desde que el ave se infecta hasta que empiezan sus síntomas o incluso su muerte súbita pueden pasar entre 3 y 20 días. Este periodo se puede alargar más en caso de aves resistentes, como las psitácidas asiáticas o australianas o en casos particulares. La enfermedad se transmite de forma directa, por contacto con heces contaminadas, secreciones respiratorias, aerosoles y saliva de aves infectadas. El virus es estable fuera del organismo del ave, con lo cual puede ser vehiculado por la ropa, la comida, el agua o cualquier otra superficie. Esto es muy importante en los criaderos, ya que un mismo cuidador suele ocuparse de todas las aves y puede escampar el virus a través de todas las jaulas mediante sus manos o su ropa.
Como síntomas, podemos encontrar los siguientes:vomitos
–          Letargia y postración
–          Regurgitaciones
–          Poliuria y polidipsia (bebe y orina más de la cuenta)
–          Diarrea con biliverdinuria (uratos amarillentos) o con presencia de sangre
–          Dificultad respiratoria, estornudos, descarga nasal
–          Conjuntivitis y sinusitis
–          Temblores e incoordinación
–          Ausencia de apetito y adelgazamiento en algunos casos
–          Muerte
Los síntomas pueden aparecer en cualquier combinación, pudiéndose mostrar todos, solo algunos o incluso ninguno, causando una muerte súbita al ave.2425072881_332a0079d5
En la mayoría de los casos, tras mostrar los síntomas, el psitácido acaba muriendo tarde o temprano. Muy pocos superan la infección.
Su diagnostico es sencillo hoy en día. Ante la sospecha de un ave infectada, procederemos a realizarle una serie de pruebas:
  • Hemograma completo
  • Panel bioquímico mínimo, especialmente renal y hepático
  • Radiografías
  • PCR de herpesvirus (de sangre, hisopo cloacal y coana)
  • Serología de herpesvirus
Para descartar portadores asintomáticos realizaremos también la PCR
Desgraciadamente la enfermedad no tiene cura y su progreso es tan rápido que no suele dar tiempo a hacer nada.
En la necropsia solemos ver unos riñones, hígado y bazo agrandados, zonas circunscritas de necrosis y hemorragias hepáticas, y también es posible la presencia de hemorragias en otros lugares como los intestinos, el páncreas y la cavidad celómica. El diagnostico estará basado en la historia clínica (es importante saber si el animal es de importación, o si ha estado en contacto con aves importadas), los síntomas clínicos, las lesiones y el aislamiento vírico de los tejidos.
pachecho1
pacheco
pacheco7
Se ha intentado tratar con Acyclovir, pero solo ha habido éxito en algunos casos. Dependiendo de los síntomas, también daremos tratamiento de soporte (fluidos, protectores hepáticos, antibióticos de soporte, alimentación forzada, etc.)
Al no tener un tratamiento efectivo, lo mejor es su prevención:
–          Adquirir aves de lugares de confianza, evitando los importadores o los intermediarios, aunque provengan de otros países europeos y sean criadas a mano.
–          Realizar buenas cuarentenas a todas las aves
–          Realizar controles veterinarios y PCR frente a la enfermedad en caso de ser sospechosas o de riesgo.
–          Tener buenas pautas de higiene: desinfectar, limpiar bien, lavarse las manos etc.
–          Alojar a las aves en buenas condiciones y ofrecerles una dieta correcta para evitar el stress.
–          Evitar mezclar especies susceptibles con resistentes en los criaderos
yacosEvitar mezclar pichones de diferentes origenes y diferentes especies:
pachecho2










No hay comentarios:

Publicar un comentario