arquitectura del medievo :
Un puente levadizo es un tipo de puente móvil que se puede levantar con la ayuda de una instalación mecánica para así permitir la entrada a través de un portón, o bien para permitir el tráfico marítimo a través de un cuerpo de agua. La parte que se mueve se gira a través de uneje horizontal o a modo de bisagra. Para elevar la plataforma se utilizan cuerdas o cadenas acopladas en las esquinas opuestas al eje.
Para asegurar la entrada en una ciudad, una fortaleza o castillo se utilizaron este tipo de mecanismos en la Edad Media.
Las entradas a los fuertes y castillos siempre fue un punto débil por lo que a lo largo de la historia se idearon diferentes artilugios para su protección. Con la ayuda de un puente levadizo se pudo evitar el acceso a través del foso de forma efectiva y rápida. En la Edad Media también se hizo uso de puentes de madera destruibles en caso de que fuera necesario, pero un puente levadizo, además de su flexibilidad, también permitía una salida rápida en caso de que fuera necesario. Para impedir que se bajase el puente por medio de ganchos desde el exterior, a menudo la plataforma se alojaba en una hendidura.
En la edad medieval se utilizaron principalmente dos tipos de construcciones para elevar la plataforma:
- Cadenas o cuerdas, de las que se utilizaron dos, en posición paralela y diagonales a través de dos entradas en el muro, donde se recogían por medio de un cabestrante. Para ayudar a elevar la plataforma se pueden utilizar contrapesos al final de las cadenas o en una prolongación de la trayectoria del puente, detrás del eje de rotación.
- Rodillos a modo de caña de pescar en los que se enroscaban las cadenas y que mediante palancaalzaban el puente. Se situaban detrás del eje de rotación.
Puentes levadizos
Los puentes levadizos eran puentes fuertemente construidos con madera, que se elevaban para evitar que la gente cruzara el foso cuando el castillo estaba bajo amenaza de ataque. Cuando no se estaba en estado de sitio, el puente levadizo a menudo quedaba bajo durante el día para permitir un cómodo acceso a la puerta principal del castillo. El puente levadizo era la parte más vulnerable del castillo, por lo que las fuerzas enemigas trataban de lograr un efecto sorpresa en su ataque inicial y atrapar a los defensores del castillo con la guardia baja y con el puente levadizo todavía abajo.
La pregunta sobre por qué los castillos tenían puentes levadizos, por más simple que parezca, es curiosamente, muy frecuente. Pero continuando con nuestra sección de preguntas y respuestas, nuestra suerte de servicio a la comunidad, en el que intentamos contestar algunos de los cuestionamientos e inquietudes que nuestros lectores suelen compartir con nosotros, hoy voy a contestar esta pregunta y a mencionar algunos datos interesantes sobre los castillos y su fascinante estructura.
Los castillos medievales
En diferentes partes del mundo, especialmente a lo largo de todo el continente europeo, existen numerosos castillos. Esas sorprendentes fortalezas de batalla, enormes y antiguas estructuras diseñadas con mucho ingenio, para poder resistir las más duras invasiones, hoy son una joya única, de un valor histórico y arquitectónico excepcional. Por eso es que, incluyendo a quien en este momento escribe, llaman mucho la atención.
¿Recuerdas cuando vimos cómo vivían los Hombres de la Edad Media y señalamos la gran importancia que tenía para cada reinado? De acuerdo, el castillo medieval era la mayor fortaleza defensiva de todo imperio del medievo, un sitio de resguardo en el que la estrategia era fundamental. En buena medida, varias de estas características se deben a dos partes esenciales del castillo medieval: el foso o la fosa de agua y el puente levadizo, conozcamos algunos detalles sobre éstas y algunas otras partes de los castillos medievales.
La fosa y el puente levadizo
En primer lugar hablemos de la fosa, un profundo canal o zanja llena de agua que rodeaba la totalidad del castillo, convirtiéndolo literalmente en una isla. El agua brindaba un mayor aislamiento, una defensa aún más grande contra posibles ataques de infantería a pie o a caballo. La única manera de atacar el castillo, desde fuera del mismo, era mediante la maquinaria y la artillería, es decir, con arqueros, ballestas, catapultas y lanzapiedras.
Del otro lado de la fosa, las altas y resistentes murallas bloqueaban cualquier otra posibilidad de entrada. Algunas fosas, de hecho, ni siquiera eran muy profundas, pues un caballero de la Edad Media, con su característica armadura, no podría cruzar la fosa sin hundirse por el peso de esta o sin ser alcanzado por los mejores arqueros, dispuestos de forma estratégica en los muros y torres del castillo. Así, el puente levadizo era la única entrada posible y eficaz.
El puente levadizo del castillo medieval en sí, era un enorme y pesado puente de madera capaz de moverse a conveniencia, hacia arriba y abajo. Éste estaba constituido por una amplia plataforma de madera que en un extremo estaba fijada con bisagras a las paredes del castillo y el otro, con cadenas y/o cuerdas. Cuando existía algún tipo de amenaza, mediante un simple sistema de engranajes (con rodillos como los de una caña de pesca) y aplicación de fuerza, se tiraba de las cuerdas (o las cadenas) y se cerraba el puente, que por ende, se movía en forma vertical. Cuando ya no había peligro, se liberaba la fuerza de las cuerdas y el puente descendía nuevamente.
En ocasiones, el puente levadizo no conectaba la entrada al castillo directamente con el resto del pueblo, sino que entre la fosa de agua y la tierra había una barbacana, que era otra fortaleza más pequeña que protegía la entrada al puente. En conjunto, la entrada al castillo sin una detallada y estratégica planificación previa era imposible. Precisamente para esto es que se inventó el puente levadizo, una estructura simple y rápida pero muy eficaz al momento de bloquear el acceso al interior de la fortaleza.
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