martes, 21 de abril de 2015

Pseudohistoria



El nordicismo o teoría nórdica fue una tesis racial en boga a finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Aprovechaba el modelo de la antropología clásica común de su época, según el cual los pueblos europeos se dividían en tres subramas de la raza caucásica: la nórdica, la alpina y la mediterránea. Enseñaba que la raza nórdica estaba extendida por el norte deEuropa, especialmente entre los hablantes de las lenguas germánicas, y se caracterizaba por individuos de gran estatura, rostros y cabeza alargados, pelo rubio y ojos claros (mieles, azules, verdes o grises). Por su parte, la raza alpina predominaría en la Europa central y estaría caracterizada por una baja estatura y la cabeza relativamente redonda. La raza mediterránea sería común en el sur de Europa y, específicamente, en ciertas partes del norte de África y estaría caracterizada por el cabello oscuro y la piel morena (según algunos teóricos de la época ello se debería a la mezcla racial con pueblos norteafricanos).- ............................................:http://es.wikipedia.org/w/index.php?title=Especial:Libro&bookcmd=download&collection_id=14ada5e8eda14f36b6790dbccac6c70c64de645a&writer=rdf2latex&return_to=Nordicismo

Orígenes

El término «nórdico» fue propuesto primeramente como grupo racial por el antropólogo francés Joseph Deniker, debido a que este grupo racial se encontraba principalmente en el norte de Europa. Sin embargo, fue la obra del sociólogo y economista William Z. Ripley la que popularizó la idea de las tres razas europeas haciendo uso de la terminología acuñada por Deniker (anteriormente Ripley había empleado «teutón» como designación) en su obra de referencia Las Razas de Europa, en la que distinguía las razas europeas basándose en diversas mediciones antropométricas y teniendo en cuenta principalmente la estatura y el índice cefálico. El teórico racialista anglogermano Houston Stewart Chamberlain, que constituiría un modelo a seguir para Adolf Hitler, concibió a los nórdicos como los pueblos celtas y germánicos originarios, así como algunos pueblos eslavos. Todos ellos eran, a saber, los baltos, belgas, holandeses, ingleses, franceses, alemanes, irlandeses, polacos, escandinavos, escoceses y galeses. Chamberlain llamaría 'celtogermánicos' a estos pueblos. El filósofo e historiador francés Joseph Arthur de Gobineau también identificaba a los arios originarios con el tipo humano "nórdico". En los Estados Unidos, el principal teórico del nordicismo fue el autor eugenista Madison Grant, quien sostenía que la raza nórdica había sido responsable de la mayoría de los avances de la humanidad y que el mestizaje constituía un suicidio étnico o racial. Según Grant, si no se introducían políticas de eugenesia, la raza nórdica sería sustituida por otras razas. Incluso fue más estricto que sus predecesores, como Chamberlain, a la hora de atribuir la categoría de nórdico y sostuvo que los pueblos con el menor rastro de ascendencia no nórdica eran "inferiores". Es probable que las radicales opiniones de Grant hayan servido a los propagandistas para desprestigiar al nordicismo y hacerle perder cualquier apoyo científico y político al finalizar la Segunda Guerra Mundial.
El libro de Grant, The Passing of the Great Race, or the Racial Basis of European History (1916) fue la primera obra no escrita por un alemán que el Estado nacionalsocialista tradujo y publicó. Grant solía enorgullecerse de enseñar una carta de Alfred Rosenberg (editor del Völkischer Beobachter) en la que éste afirmaba que el libro de Grant era «su biblia». No obstante, en la primera edición de su popular libro, Grant clasificaba a los alemanes como mayoritariamente nórdicos, mientras que en su segunda edición, publicada tras la entrada de los Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial, recalificó a la entonces potencia enemiga como dominada por "alpinos inferiores".
A pesar de las ideas de Grant que ciertamente ocasionan cierta sensación de desunión entre la raza blanca, la importancia del nordicismo nunca consistió en la "supremacía de la raza nórdica" sino en la idea de que toda la raza blanca compartía un origen nórdico, y por lo tanto, de saberse como una gran familia que debía mantenerse unida para su supervivencia.

Nordicismo como idealismo

Los dioses griegos Apolo y Atenea tal y como eran concebidos por los mismos escultores griegos. En ambos casos, se trata de un tipo racial nórdico (el llamado "perfil griego"; frente y nariz rectas casi unidas, es una característica nórdica). Eran los dioses más adorados de toda Grecia, y Apolo, particularmente querido en Esparta.
El nordicismo también puede conceptuarse como una tendencia idealista cuyos orígenes pueden ser rastreados desde la Antigüedad clásica[1][2] (cultura griega y romana) y que está estrechamente relacionada con el arte y con el modelo humano al que los antiguos europeos deseaban aspirar, y que también pretendía responder a la pregunta de cuál es la fuente de la tradición indoeuropea y cuál es eltipo humano que sentó las principales bases de Europa desde la época prehistórica.
Sin embargo, el florecimiento del sentimiento nordicista más reciente es el que tuvo lugar bajo el Tercer Reich, el Nacionalsocialismo y la doctrina SS de la mano de personajes como Karl WeinländerHerman GauchHans F. K. GüntherWalter DarréAlfred Rosenberg,Heinrich Himmler y el propio Adolf Hitler.
No obstante, el pensamiento nordicista también se refleja en autores y filósofos, como Friedrich Nietzsche o Arthur Schopenhauer, quienes, sin ser nacionalsocialistas, son considerados como precursores del Nacionalsocialismo.
La literatura griega, por su parte, está plagada de referencias al aspecto físico de los héroes y los dioses y hay una persistente tendencia entre los helenos a describir a sus ídolos como 'rubios y de ojos azules': Aquiles, Helena, Deméter, Apolo, Atenea, Céfiro, Eros, Radamantis, Artemisa, Dionisio, Artemisa, entre muchos otros, son descritos explícitamente de este modo.
El estudioso alemán Wilhelm Sieglin (1855-1935) recopiló todos los pasajes de la mitología helénica donde se hacía referencia al aspecto de dioses y héroes. De entre los dioses y diosas, 60 eran rubios y 35 morenos —y de los morenos, 29 eran divinidades ctonias-telúricas, marinas (como Poseidón) o del Inframundo, y que procedían de la antigua mitología pre-aria de Grecia. De los héroes mitológicos, 140 eran rubios y 8 morenos.
Los datos sobre las descripciones de los personajes mitológicos son importantes ya que otorgan una valiosa información acerca del ideal de divinidad y de perfección de los antiguos griegos, y señala que sus valores se identificaban con el Norte y con el tipo racial "nórdico". Sin embargo, Sieglin también tuvo en cuenta los pasajes donde se describe el aspecto de personajes históricos reales. Así, de 122 personas prominentes de la antigua Grecia cuyo aspecto es descrito, 109 eran de cabellos claros (rubios o pelirrojos), y sólo 13 morenos. Entre los personajes históricos famosos descritos como "rubios" por diversas fuentes, se encuentran, por ejemplo, Alcibíades, Alejandro Magno, Critias, Demetrio de Falero, el rey Lisimaco, Ptolomeo II Filadelfo, Dionisio I de Siracusa, Eurípides y el rey Pirro.
Prudente ante datos como estos, Adriano Romualdi dijo:
De todos estos datos resultaría abusivo deducir que en todas las épocas de la historia griega los rubios hayan constituido una mayoría tan abrumadora. Pero lo cierto es que eran numerosos y, sobre todo, daban el tono a la clase dirigente.
Los indoeuropeos.
Exactamente lo mismo se puede decir de IndiaPersia o Roma. Rubios o pelirrojos eran los dioses, los héroes, los reyes, los grandes hombres, en fin, el pueblo ario que formaba la casta aristocrática minoritaria y dominante. La plebe, en cambio, el pueblo numeroso sometido, era de piel y cabellos más morenos.
De hecho, el antropólogo americano J. L. Angel calculó en 1944, tras un atento examen de los cráneos de la antigua Grecia, que los predominantemente nórdicos constituían entorno a un 27% de la población griega durante la época clásica. Sin embargo, Angel se concentró mucho en la zona del Ática, es decir, el Estado de Atenas, el puerto de El Pireo, etc., donde hubo una fuerte presencia extranjera mediante el comercio y la esclavitud. En otras zonas, el aspecto nórdico debía haber estado más fuertemente representado, especialmente en territorios que constituían estanques de sangre helénica pura y donde no hubo apenas inmigración de esclavos norafricanos ni orientales. Así, el poeta Baquílides describe generalizando sin empaque a las jóvenes espartanas como rubias, coincidiendo con otro poeta, Tirteo de Esparta. El posterior Dicearco describe a las tebanas en los mismos términos y según el propio Heródoto, los dorios (antepasados de los espartanos) eran procedentes de "entre las nieves" y a quienes describía con una apariencia nórdica.

Anti-nordicismo

Mapa de Madison Grant (1916), que muestra la distribución de las subrazas europeas. La influencia genética nórdica aparecería en color rojo. El verde indicaría la raza alpina y el amarillo la raza mediterránea.
La misma lógica y mentalidad que caracterizaría más tarde a los sectores "antirracistas" y negacionistas de la raza se manifestaría en aquellos que negaban las diferencias naturales entre las subrazas europeas. Sólo que mientras en el "antirracismo", serían aplicadas hacia toda la especie humana, quienes rechazaban el nordicismo las aplicaban a la raza blanca. Muchos de los racialistas que propugnaban, además, una jerarquía entre las razas, comenzaron a rechazar, en total contradicción a sus creencias, las conclusiones del nordicismo ya que, según ellos, colocaba a los nórdicos como un tipo racial "superior" frente a los demás subgrupos europeos, lo cual no era del agrado de todos, ya que la subraza nórdica no representaba a la mayoría de la población europea. Bajo esta idea surgió la falsa creencia, difundida no sólo por la propaganda anti-nacionalsocialista, sino inclusive y paradójicamente entre muchos que sostienen la superioridad de la raza blanca sobre otras razas, de que el nordicismo era la teoría que "únicamente consideraba como arios a los nórdicos y que sólo valoraba a la gente blanca de tipo nórdico".
En contra del nordicismo, se llegó a argumentar principalmente (y aún hoy hay quienes se aferran a este falaz argumento, hoy superado) que las culturas vulgarmente asociadas a la genética nórdica (germanos, celtas, eslavos, etc.) no habían sido tan "avanzadas" y no poseían tantos "méritos" en comparación con las culturas desarrolladas en el Mediterráneo (griegos y romanos principalmente) las cuales siempre habían sido consideradas como cunas y fundadoras de la civilización occidental y cuyos miembros se asumían sin más como de "fenotipo mediterráneo" debido al fenotipo general de la zona observado en época contemporánea. De hecho, incluso Giuseppè Sergi en su obra The mediterranean Race (1901) (obra que daría nacimiento al "mediterraneanismo" como reacción al nordicismo) sostenía que la particular mezcla de la subraza mediterránea fue lo que le confirió su "ventaja creativa"; una contradicción total a la teoría racial de que elmestizaje es contraproducente para las razas. Partiendo de esta premisa y siguiendo en esta línea de contradicción, Grant afirmó, para dar una explicación especulativa de este problema, que los logros de la cultura mediterránea se debieron a la sangre nórdica que había entrado en el caudal genético mediterráneo como resultado de las antiguas invasiones de pueblos del norte.
El primer problema de este argumento yacía en asumir que la frecuencia del fenotipo que se encontraba en esas zonas en esa época, era exactamente la misma que se podía encontrar a comienzos de la época clásica y que no había cambiado de forma drástica, ignorando por completo las posteriores y sucesivas migraciones extraeuropeas y el gradual mestizaje ocasionado por éstas. El segundo problema era asumir sin evidencia de ningún tipo, que estas culturas al haberse desarrollado en el Mediterráneo, poseían por lo tanto un "fenotipo mediterráneo", especialmente la casta fundadora y dirigente que es el sustrato étnico que interesa a la hora de evaluar el origen de una cultura. Que un pueblo (como Grecia) se ubique geográficamente en el Mediterráneo, no implica que su fenotipo haya sido "mediterráneo". De hecho, lo cierto es que el fenotipo nórdico era predominante en las castas dirigentes, tanto de Grecia como de Roma, aunque muy especialmente en Grecia, lo que reafirma que fue la genética nórdica la fundadora de esas culturas.
Aunado a esto, cabe destacar que no existen rasgos homocigóticos mediterráneos, es decir, los rasgos considerados "mediterráneos", al contrario que la mayoría de los rasgos nórdicos, no proceden de un grupo genéticamente homogéneo, sino de una interacción genéticamente heterogénea.
¿En qué consistía entonces aquella diferencia percibida por quienes atribuían a las culturas del Mediterráneo "una superioridad evidente" en contraste con las culturas del norte? La pregunta puede ser respondida en base a dos factores determinantes:
  • El clima. Mientras más duras las condiciones climáticas, mayor el esfuerzo ejercido para la supervivencia y por lo tanto, menores posibilidades para ejercer otras actividades asociadas a la civilización.
  • La presencia o ausencia de razas ajenas. La utilización de razas ajenas como mano de obra esclava facilitó el desarrollo de las civilizaciones del Mediterráneo ya que les ahorraba numerosos esfuerzos, otorgando tiempo libre para otras actividades. Por su localización geográfica, los pueblos del Mediterráneo tenían mayor acceso a una cantidad más numerosa de esclavos, puesto que éstos consistían generalmente en individuos de otras razas provenientes de África y Asia.

Nordicismo y Nacionalsocialismo

Un ejemplo de valor individual para ponerlo a disposición de la comunidad:Heinrich Himmler, fue una figura que estaba muy lejos de pertenecer al grupo nórdico, pues presentaba en su fenotipo una fuerte mongolización, lo que no fue impedimento para comprender la importancia de los nórdicos al decir: La raza nórdica es decisiva, no sólo para Alemania, sino para el mundo entero. Si tenemos éxito en establecer esta raza nórdica desde y alrededor de Alemania e inducirles a convertirse en granjeros, y desde este vivero producimos una raza de 200 millones, entonces el mundo nos pertenecerá. Si ganase el bolchevismo, significará el exterminio de la raza nórdica.
Toda la propaganda nacionalsocialista, como ésta de la organización de universitarios alemanes, refleja un ideal nordicista.
Portada de Gutes Blut - Ewiger Quell("Buena sangre - primavera eterna"), un folleto de propaganda SS que trata principalmente sobre el nordicismo y la eugenesia, en imágenes.
El propio Adolf Hitler compartía la anterior explicación al decir:
...es una temeraria injusticia presentar a los germanos de la época anterior al cristianismo como hombres "sin cultura", es decir, bárbaros, cuando jamás lo fueron, pues el haberse visto obligados a vivir bajo condiciones que obstaculizaron el desenvolvimiento de sus energías creadoras, se debió a la inclemencia de su suelo nórdico.

De no haber existido el mundo clásico, si los germanos hubieran llegado a las regiones meridionales de Europa, más propicias a la vida, y si, además, hubiesen contado con los primeros medios técnicos auxiliares, sirviéndose de pueblos de raza inferior, la capacidad creadora de cultura, latente en ellos, hubiera podido alcanzar un brillante florecimiento, como es el caso de los helenos, por ejemplo. 
Pero la innata fuerza creadora de la cultura que poseía el germano no puede atribuirse únicamente a su origen regional. Llevados a tierras del Sur, ni el lapón ni el esquimal podrían desarrollar una elevada cultura. Fue precisamente el ario a quien la Providencia dotó de la bella facultad de crear y organizar.
Mi Lucha, 1924, Volumen II, Capítulo II.
La SS fue organizada como la élite del NSDAP con la intención de que fuera compuesta por hombres de sangre nórdica y salud de acero. Como se demostró con el tiempo, la SS no era sólo una granja de sementales, sino la unidad de choque más eficaz de la II Guerra MundialHeinrich Himmler afirmó en 1943:
Las Waffen SS incorporan los más altos ideales del nacionalsocialismo. Son las sucesoras de las famosas bandas de guerreros nórdicos de la antigüedad. Es la unidad del credo y la espada, de la potencia militar y la fe política lo que hace de tal manera invencibles a las Waffen SS, tan temidas en los campos de batalla de Europa... nunca una fuerza militar de élite ha llegado a tal perfección en tan poco tiempo...
Mientras que el propio León Degrelle afirmó en Europa Vivirá:
Cada vez que se busca la civilización en cualquier lugar de Europa, se ve la sangre del Norte.
Edwige Thibaut, en su documentación sobre la doctrina SSLa Orden SS, hace constar también la idea de que, a pesar de que no todos los alemanes podían clasificarse como "nórdicos", el tipo nórdico era la base racial de cada uno de los miembros del pueblo alemán:
A pesar de la mezcla a menudo elevada y de la imbricación de razas en diversas regiones del Reich, encontramos en las diferentes partes de Alemania razas distintas con caracteres muy acusados. (Se describen a continuación los rasgos de las subrazas nórdica, dinárica, mediterránea, báltica-oriental y oriental) La raza nórdica está fuertemente representada en todas las regiones del Reich, tanto en el norte como en el sur, al oeste o al este. Muchos hombres en nuestro pueblo no pueden asimilarse exactamente a una raza precisa. Exceptuando a los representantes que parecen de raza pura, cada raza se encuentra en el seno de todos los pueblos bajo una forma más o menos fuertemente mezclada. El patrimonio hereditario nórdico predomina en el pueblo alemán. La raza nórdica no es tan sólo la raza predominante, sino que su sangre se halla presente en casi todos los alemanes (...) La parte de sangre nórdica en la masa hereditaria del pueblo alemán se eleva a, aproximadamente, el 50%. Además, la genealogía nos demuestra que cada alemán es portador de sangre nórdica.
Capítulo III: Cuestiones raciales[3]
En el programa Lebensborn, la mayoría de los niños y madres fueron elegidos de los países escandinavos, Rusia, los países bálticos, Alemania, Holanda y Polonia. Países que tenían una mayor cantidad de sangre nórdica, considerada poseedora del físico ideal ario y de la sangre más pura. Los nacionalsocialistas tenían en mente que, en el futuro, la selección de los líderes y los mejores talentos espirituales "arios" debía implementarse sobre todo el cuerpo de la "raza blanca", mientras que la selección de los elementos raciales a predominar gradualmente en la posteridad debía ser hecha sobre la base de los mejores especímenes de sangre "nórdica". Para ellos no era necesariamente lo mismo el valor del individuo para la comunidad que su valor genético como reproductor. En el mismo nacionalsocialismo alemán, vemos gran variedad de caracteres dentro de sus líderes. Así, tanto GöringHeydrichDarréSchirachTodt, etc., eran predominantemente "nórdicos".GoebbelsStreicherHimmler o Frank no lo eran.

No hay comentarios:

Publicar un comentario