La cerámica se produjo en enormes cantidades en la antigua Roma , principalmente con fines utilitarios. Se encuentra en todo el antiguo Imperio Romano y más allá. Monte Testaccio es un enorme montículo de desechos en Roma, hecho casi en su totalidad por ánforas rotas utilizadas para transportar y almacenar líquidos y otros productos, en este caso probablemente principalmente aceite de oliva español, que fue desembarcado cerca, y fue el principal combustible para la iluminación, así como Su uso en la cocina y lavado en los baños .
Es habitual dividir la cerámica doméstica romana ampliamente en productos gruesos y productos finos, los primeros son los frascos, platos y cuencos de cerámica cotidianos que se utilizaron para cocinar o almacenar y transportar alimentos y otros productos, y en algunos casos también como vajilla. , y que a menudo se fabricaban y compraban localmente. Las mercancías finas servían en recipientes o vajillas que se usaban para cenas más formales, y generalmente tienen una apariencia más decorativa y elegante. Algunos de los más importantes se hicieron en talleres especializados de cerámica, y a menudo se comerciaban a distancias considerables, no solo dentro, sino también entre, diferentes provincias del Imperio Romano. Por ejemplo, docenas de diferentes tipos de productos británicos gruesos y finos fueron producidos localmente, [1]Sin embargo, muchas otras clases de cerámica también se importaron de otras partes del Imperio. La fabricación de productos finos como terra sigillata tuvo lugar en grandes complejos de talleres que se organizaron a lo largo de líneas industriales y produjeron productos altamente estandarizados que se prestan bien a una clasificación precisa y sistemática.
No existe un equivalente romano directo a la pintura de jarrones artísticamente central de la antigua Grecia , y pocos objetos de interés artístico sobresaliente han sobrevivido, pero hay una gran cantidad de vajilla fina y muchas figuras pequeñas, a menudo incorporadas en lámparas de aceite o similares. objetos, y a menudo con temas religiosos o eróticos. Las costumbres funerarias romanas variaban con el tiempo y el espacio, por lo que los recipientes depositados como objetos funerarios , la fuente habitual de recipientes de cerámica antiguos completos, no siempre son abundantes, aunque todos los sitios romanos producen muchos tiestos rotos. La cerámica "fina" en lugar de la de lujo es la principal fortaleza de la cerámica romana, a diferencia del vidrio romano., que la élite solía usar junto con vajillas de oro o plata, y que podría ser extremadamente extravagante y costoso. Está claro por las cantidades encontradas que la cerámica fina se usó ampliamente en términos sociales y geográficos. La cerámica más costosa solía usar decoración en relieve , generalmente moldeada, en lugar de color, y a menudo copiaba formas y decoración de la metalurgia más prestigiosa. Especialmente en el Imperio Oriental, las tradiciones locales continuaron, hibridándose con los estilos romanos en diferentes grados. A partir del siglo III, la calidad de la cerámica fina disminuyó constantemente, en parte debido a las perturbaciones económicas y políticas, y porque la cristalería estaba reemplazando a la cerámica por vasos para beber (los ricos siempre habían preferido la plata en cualquier caso).
La arcilla cocida o la terracota también se emplearon ampliamente en la época romana con fines arquitectónicos, como ladrillos y azulejos estructurales, y ocasionalmente como decoración arquitectónica, y para la fabricación de pequeñas estatuillas y lámparas. Estos no se clasifican normalmente bajo el título de "cerámica" por los arqueólogos, pero las terracotas y las lámparas se incluirán en este artículo. La cerámica es un material clave en la datación e interpretación de sitios arqueológicos desde el Neolítico en adelante, y ha sido minuciosamente estudiada por los arqueólogos por generaciones. En la época romana, la cerámica se producía y se usaba en cantidades enormes, y la literatura sobre el tema, en numerosos idiomas, es muy extensa.
Productos finos [ editar ]
Terra sigillata o productos de brillo rojo [ editar ]
Los arqueólogos utilizan la designación de "artículos finos" para la alfarería romana destinada a servir comida y bebida en la mesa, a diferencia de las ollas diseñadas para cocinar y preparar, almacenar, transportar y otros fines alimenticios. Aunque había muchos tipos de cerámica fina, por ejemplo, vasos para beber en productos muy delicados y de paredes delgadas, y cerámica con esmaltes de plomo vítreo, la clase principal que viene a la mente es la cerámica romana de brillo rojo de Italia y la Galia hacer, y ampliamente comercializado, desde el siglo I aC hasta finales del siglo II dC, y tradicionalmente conocido como terra sigillata. Estos recipientes tienen telas finas, bastante duras y bien quemadas de color rosa a rosa, con un deslizamiento de superficie naturalmente brillante que varía en color desde naranja claro hasta un rojo bastante brillante. Las variaciones en el color y la textura de la tela del cuerpo y el deslizamiento, así como las formas de los vasos y los diseños en las formas decoradas pueden permitir a un estudiante capacitado identificar la fuente, la fecha y, a menudo, el taller individual con bastante precisión. Arretina , hecha en Arezzo en Toscana, fue el tipo de cerámica fina preeminente en el siglo I a. C. y principios del siglo I d. C. y fue sucedido por la cerámica samiana, fabricada en varios centros de la Galia, la Francia moderna y Alemania. Sin embargo, la definición de todos estos términos ha variado y evolucionado a lo largo de las muchas generaciones durante las cuales el material ha sido estudiado. [2] Técnicamente, los productos de brillo rojo tienen mucho en común con la cerámica griega pintada anteriormente, pero las formas decoradas emplean una decoración en relieve en relieve en lugar de pintura.
La vajilla del Resbalón Rojo Africano (ARS) pertenecía a la misma tradición, y se continuó fabricando mucho más tarde que la sigillata italiana y galo, hasta la conquista islámica . [3] El ARS a su vez influyó en la producción del deslizamiento rojo focaico , que es común en el Mediterráneo oriental y también apareció ocasionalmente en el oeste hasta el sur de Francia y Gran Bretaña.
La producción de tipos relacionados de mercancías existía en Asia Menor y en otras regiones orientales del Imperio (mercancías de Sigillata Oriental), mientras que las provincias ibéricas también tenían industrias locales que producían terra sigillata hispanica, que tenía algunas similitudes con los productos de Galia.
La mayoría de estas mercancías se distribuyeron ampliamente y se produjeron a escala industrial (los hornos más grandes podían disparar hasta 40,000 piezas a la vez [4] ), y sin duda utilizando un alto grado de especialización dentro de los talleres. Los nombres de muchos alfareros y propietarios de fábricas se conocen por las marcas de alfareros que se aplican con frecuencia a productos finos, y pueden ser muy informativos. Cnaius Ateius fue un productor especialmente destacado en Arezzo, pero el análisis moderno de su arcilla se puede demostrar con sus sellos producidos en Pisa, en Toscana, y en las fábricas sucursales de Lyon y La Graufesenque.en la Francia moderna Sin embargo, la interpretación de los sellos de nombre puede ser más compleja de lo que parece a primera vista. Los nombres en negrita visibles en las áreas decoradas anuncian el nombre de la fábrica, pero los nombres de los artesanos que trabajan dentro de la cerámica, los fabricantes de tazones, aparecen en recipientes simples, mientras que los moldes para cuencos decorados también a veces se firman a mano alzada con el molde. -maker, y sus firmas también a veces aparecen en vasos terminados. Teóricamente, una vasija decorada podría llevar el nombre del fabricante del molde, el del tazón o el finalizador (por ejemplo, en el borde) y el 'nombre de marca' de la fábrica en la decoración. [5] El uso de mano de obra esclava en los talleres italianos no está probado, aunque algunos nombres son ciertamente de libertad.(libertos, es decir, liberados ex esclavos). El sitio de La Graufesenque en el sur de la Galia, cerca de Millau , ha sido ampliamente estudiado y excavado. [6] Sus productos tenían una distribución inmensamente amplia a fines del siglo I d. C., y se han encontrado fragmentos desde la India hasta el Sudán y Escocia. [7]
En 1895, el erudito alemán Hans Dragendorff produjo una clasificación de las formas de los vasos en cerámica romana de brillo rojo que todavía se usa (como, por ejemplo, "Drag. 27" o "Dr.27" para referirse a la pequeña copa de perfil biconvexo). [8] Otros eruditos añadieron a sus formas numeradas, y algunos arqueólogos que trabajan en los productos de sitios de fabricación específicos, o los hallazgos de excavaciones importantes, iniciaron sus propias tipologías, por lo que ahora hay muchos otros sistemas de clasificación para Arretine y Samian, como existen, de hecho, para otras clases de alfarería romana, como los números de Hayes para las formas de resbalón rojo africano. Otros sistemas de numeración utilizados con sigillata italiana y galia incluyen los de Déchelette, Knorr, Curle, Walters, Loeschcke, Ritterling y Ludowici, por nombrar solo algunos.
El método más común para hacer una decoración en relieve en la superficie de un recipiente abierto de terra sigillata era lanzar un recipiente de cerámica cuyo perfil interior correspondía con la forma deseada del exterior del recipiente final. Luego, la superficie interna se decoró con sellos positivos individuales ( poinçons ), generalmente hechos de arcilla cocida, o pequeñas ruedas con motivos repetidos, como el ovolo(huevo y lengua) diseño que a menudo formaba el borde superior de la decoración. Los detalles también se pueden agregar a mano con un lápiz óptico. Cuando la decoración se completó en huecograbado en el interior, el molde se secó y se coció de la manera habitual, y posteriormente se usó para dar forma a los cuencos. Cuando el tazón se secó, se encogió lo suficiente como para sacarlo del molde, después de lo cual se llevaron a cabo los procesos de acabado, como la conformación o la adición de un anillo de pie y el acabado del borde. Los detalles variaron según la forma. [10]El cuenco completo podría deslizarse, secarse nuevamente y dispararse. Las formas cerradas, como jarras y jarras, rara vez se decoraban en relieve usando moldes, aunque algunos recipientes de este tipo se fabricaron en La Graufesenque haciendo las partes superior e inferior del recipiente por separado en moldes y uniéndolos en el punto del diámetro más ancho . La decoración en relieve de jarrones o jarrones altos generalmente se lograba usando motivos de aplicación moldeados (ramitas) y / o decoración de barbotina (deslizamiento). La última técnica fue particularmente popular en los talleres de East Gaulish de Rheinzabern , y también fue ampliamente utilizada en otros tipos de cerámica.
Los vasos de mesa de sigillata simples, que incluían platos grandes, platos poco profundos de varios tamaños, cuencos ligeramente más profundos y tazas pequeñas, se hicieron en la rueda usando una gama de plantillas para crear perfiles muy precisos. Los tamaños también fueron estandarizados, lo que habría facilitado el disparo, el almacenamiento y el transporte de los grandes números que se hicieron. La evolución de las formas coincide en muchos aspectos con respecto a los recipientes de mesa de plata y vidrio de los mismos períodos, y las formas precisas a veces pueden estar estrechamente fechadas. Las formas clasificadas arqueológicamente como 'simples' a veces tienen una decoración de tipo simple, a menudo en forma de un anillo de ruleta dentro de la base interior plana de un plato. Las mercancías simples también suelen llevar sellos de nombre. [11]
La cerámica ARS ( African Red Slip ) fue el representante más ampliamente distribuido de la tradición sigillata en el período tardío romano. (Se han encontrado importaciones ocasionales de ARS en lugares tan lejanos como Gran Bretaña en los siglos V y VI. [12] Se fabricó en la provincia de África Proconsularis (aproximadamente Túnez moderno ), y se hicieron formas y telas similares para una distribución más local en Egipto, que tenía sus propias tradiciones cerámicas muy activas y diversas en la época romana. Una amplia gama de cuencos, platos y pabellones se hicieron en ARS, pero la técnica de hacer recipientes decorados en relieve en moldes se suspendió. [13]En cambio, los motivos de aplicación se usaban con frecuencia donde se requería decoración en relieve, se realizaban por separado y se aplicaban al recipiente antes del secado y la cocción. Los motivos estampados también fueron una forma preferida de decoración, y en los siglos posteriores, a menudo aparecen temas y símbolos cristianos.
Otras mercancías finas [ editar ]
Algunas de las formas de las mercancías simples de Arretine se copiaron muy de cerca a finales del siglo I a. C. y principios del siglo I d. C. en una clase de cerámica hecha en el noreste de la Galia y conocida como vajilla galo-belga. [14] Muchos de estos platos y platos en telas con toques rojos ( terra rubra ) y con toques negros ( terra nigra ) llevan sellos de alfarero. En la mayoría de las regiones del Imperio Romano, incluidas las provincias fronterizas como Gran Bretaña, se fabricaron otros pabellones finos de paredes delgadas, vasos de precipitados, cuencos y platos, por ejemplo, productos romanos-británicos 'recubiertos de color' (deslizados) hechos en Colchester y en el valle de Nenepertenecen a esa clasificación. Varias de las macetas a la derecha de la fotografía grupal en la sección principal de este artículo son artículos de Nene Valley, incluido el gran vaso negro decorado con una animada escena de caza de perros y liebres en la técnica de la barbotina. [15]Se usaron muchas técnicas decorativas para embellecer la vajilla de cerámica, incluido el uso de hojas de colores, pintura y varias superficies texturizadas. Sin embargo, la decoración pintada no continuó con las tradiciones griegas y etruscas como una técnica especializada utilizada para elaborar artículos de mesa de lujo, aunque los diseños pintados más simples aparecen en muchos tipos de cerámica, tanto gruesos como finos, en todo el Imperio. Las líneas divisorias entre productos 'finos' y 'gruesos', o artículos de mesa y utensilios de cocina, se vuelven un poco borrosas en el caso de algunos de los productos locales, provinciales, porque la cerámica es a menudo de usos múltiples.
La cerámica esmaltada con plomo se hizo en muchas regiones del Imperio Romano, incluida la Galia, Italia y las provincias orientales. Este tipo de esmalte vítreo se usaba con mayor frecuencia para artículos pequeños y decorativos de vajillas, incluidas tazas hechas con moldes con decoración en relieve, lámparas y recipientes zoomórficos. [16] Los esmaltes varían en color de ámbar a marrón y muchos tonos de verde.
La vajilla hecha de loza egipcia , esmaltada en azul intenso, turquesa o verde, se siguió fabricando en Egipto durante todo el período romano, y las formas de algunos de estos vasos de loza en el siglo I a. C. y el siglo I d. C. estuvieron directamente influenciados por la cerámica arretina. . También se produjeron vasijas policromadas decoradas muy elaboradas. La loza egipcia, la frita o la 'composición esmaltada', como los egiptólogos lo denominan a menudo, tiene bastante más en común técnicamente con la fabricación de vidrio que con la loza, ya que es un material cerámico no arcilloso. [17]
La línea divisoria entre vasijas de cerámica y figurillas de terracota es otra que no siempre es afilada, ya que ciertos tipos de recipientes pequeños, como los vertidores de aceite, a veces se moldearon en formas de representación.
Artículos gruesos [ editar ]
Ollas de cocina [ editar ]
La cerámica era esencial para cocinar alimentos en la antigüedad. Aunque los utensilios de metal hechos de bronce o hierro estaban ampliamente disponibles en la época romana, los tazones, sartenes, cacerolas y frascos de barro simples y funcionales eran una parte económica y estándar del equipo de cada cocina. Desde Gran Bretaña hasta Egipto, desde España hasta Siria, a lo largo y ancho de un vasto imperio, las tradiciones locales de cerámica prerromana en productos de cocina simples a menudo continuaron sin cambios importantes durante siglos. Las ollas romanas, por lo tanto, deben estudiarse a nivel regional. [18]Además de los cuencos y sartenes ordinarios utilizados para cocinar, se fabricaron utensilios de cerámica para muchos usos especializados, como la pequeña prensa de queso ilustrada a la izquierda de la fotografía grupal de cerámica romana de Gran Bretaña. Los dos frascos negros a la izquierda detrás de la prensa de queso en la misma fotografía son ejemplos de cerámica romana -británica bruñida , hecha por primera vez en el suroeste de Inglaterra a finales de la Edad del Hierro, antes de la conquista romana: esta cerámica continuó siendo popular durante todo el período romano, y se hizo en grandes cantidades y se comercializó más ampliamente, bajo la influencia romana. Otros productos fabricados en la Gran Bretaña romana fueron Crambeck Ware , Huntcliff y Nene Valley Color Coated Ware., que a menudo estaba decorado.
Mortaria [ editar ]
Sin embargo, un tipo de recipiente utilizado en la preparación de alimentos estaba estrechamente relacionado con la difusión de la cultura romana y la cocina romana: el mortarium . Este era un tazón robusto y poco profundo con un borde grueso y curvado que lo hacía fácil de manejar, a menudo un labio vertido y una superficie interna deliberadamente rugosa con una capa de arena o arena gruesa durante la fabricación. Se usaba con una mano de mortero para hacer puré o pulverizar ingredientes para preparar platos romanos elaborados y cuidadosamente condimentados; La tradición culinaria romana hizo un amplio uso de hierbas y especias. El mortarium era el equivalente romano del procesador de alimentos, y es un indicador real de "romanización"; [19]En Gran Bretaña, la primera mortaria se importó de fuentes galias más de una generación antes de que Gran Bretaña se convirtiera en una provincia romana en el año 43 dC, lo que indica la creciente influencia de la cultura romana en la Edad del Hierro en el sur de Gran Bretaña, y tal vez la presencia real de inmigrantes de la Galia. Más tarde, además de productos importados, había morteros de fabricación local producidos en alfarerías especializadas en diferentes áreas de la provincia, además de productos importados: Paul Tyers analiza mortarios de no menos de 16 fuentes de fabricación diferentes, romanas, británicas y continentales, que se han encontrado en Gran Bretaña. [20] Al igual que muchos otros productos cerámicos romanos especializados, muchos morteros también llevaban sellos de taller o de fabricantes en sus llantas, y señalar su cronología y distribución puede ayudar a los arqueólogos a comprender los patrones comerciales y la economía romana.
Ánforas [ editar ]
Descripción y función [ editar ]
Las ánforas , o ánforas, se usaron durante la época romana para transportar alimentos a largas y cortas distancias. El contenido era generalmente líquido, aceite de oliva o vino en la mayoría de los casos, pero también garum , la popular salsa de pescado y salsa de frutas. Como contenedor, se suponía que un ánfora era fuerte, no demasiado pesado, con una forma adecuada para su fácil almacenamiento en el barco y, al mismo tiempo, conveniente para su manipulación una vez que llegaba a su destino final. Por lo general, las ánforas son recipientes de terracota de dos asas con un cuerpo globular / cilíndrico, un borde de varias formas y una base plana o, con menos frecuencia, plana. La espiga era adecuada para un arreglo de almacenamiento estable en el barco y funcionaba como un tercer asa en el proceso de vaciado del contenedor.
Estudios sobre ánforas [ editar ]
La primera clasificación sistemática de los tipos de ánforas fue realizada por el erudito alemán Heinrich Dressel . Tras el excepcional depósito de ánforas descubierto en Roma en Castro Pretorio a fines del siglo XIX, recolectó casi 200 inscripciones de ánforas y las incluyó en el Corpus Inscriptionum Latinarum . En sus estudios sobre el depósito de ánforas, fue el primero en elaborar una clasificación de tipos, la llamada tabla Dressel, [21] que todavía se usa hoy en día para muchos tipos. Estudios posteriores sobre ánforas romanas han producido clasificaciones más detalladas que generalmente llevan el nombre del erudito que las estudió. Para los tipos neofenicios, ver el trabajo de Maña publicado en 1951, [22]y la clasificación revisada por van der Werff en 1977-1978. [23] Las ánforas galo han sido estudiadas por Laubenheimer en un estudio publicado en 1989, [24] mientras que las ánforas de Creta han sido analizadas por Marangou-Lerat. [25] Beltràn estudió los tipos españoles en 1970. [26] Los tipos adriáticos han sido estudiados por Lamboglia en 1955. [27] Para un análisis general de los tipos del Mediterráneo occidental ver Panella, [28] y Peacock y Williams. [29]
Producción [ editar ]
Las ánforas eran contenedores de terracota con ruedas. Durante el proceso de producción, el cuerpo se hizo primero y luego se dejó secar parcialmente. [30] Luego, se agregarían bobinas de arcilla para formar el cuello, el borde y las asas. [31] Una vez que se completó el ánfora, el interior se trató con resina para garantizar un mejor rendimiento en el almacenamiento de líquidos. [32] La reconstrucción de estas etapas de producción se basa principalmente en datos etnográficos procedentes del estudio de la producción de ánforas modernas en algunas zonas del Mediterráneo oriental. [33]Las ánforas a menudo están marcadas con una variedad de sellos y graffiti. La función de estos sellos está relacionada con toda la vida del buque. Sellos, graffiti e inscripciones proporcionaron información desde el ciclo de producción hasta el contenido y la comercialización. Por lo general, se aplicaba un sello al ánfora en una etapa parcialmente seca y a menudo indicaba el nombre de la figlina (taller) y / o el nombre del propietario del taller. Los sellos pintados, tituli picti , se ejecutaron cuando se completó el ánfora y proporcionaron indicaciones sobre el peso del contenedor y el contenido.
Historia [ editar ]
El primer tipo de ánfora romana, Dressel 1, aparece en el centro de Italia a fines del siglo II a. C. [34] Este tipo tenía paredes gruesas y un tejido rojo característico. Era muy pesado, aunque también fuerte. A mediados del siglo I a. C., el llamado Dressel 2-4 comienza a ser ampliamente utilizado. [35] Este tipo de ánfora presentaba algunas ventajas al ser más ligero y con paredes más delgadas. Se ha calculado que, si bien una nave podía albergar aproximadamente 4.500 Dressel 1, era posible colocar 6.000 Dressel 2–4 en el mismo espacio. [36] Dressel 2–4 a menudo se producían en los mismos talleres utilizados para la producción de Dressel 1 que casi de repente dejaron de usarse. [37] Al mismo tiempo en Cuma(sur de Italia) comienza la producción del tipo cadii cumani (Dressel 21–22). Estos contenedores se utilizaron principalmente para el transporte de frutas y se utilizaron hasta la época imperial media. Al mismo tiempo, en el centro de Italia , se produjeron las llamadas ánforas Spello , pequeños contenedores, para el transporte de vino. En la costa adriática, los tipos más antiguos fueron reemplazados por el tipo Lamboglia 2, un ánfora de vino producida comúnmente entre finales del siglo II y el siglo I a. C. Este tipo se desarrolla más tarde en el Dressel 6A, que se vuelve dominante durante los tiempos de Augusto. [38]
En las provincias galas, los primeros ejemplos de ánforas romanas fueron imitaciones locales de tipos preexistentes como Dressel 1, Dressel 2–4, Pascual 1 y Haltern 70. La producción más típica de los galos comienza en los talleres de cerámica en Marsella a finales del siglo pasado. Tiempos de Augusto. El tipo Oberaden 74 se produjo de tal manera que influyó en la producción de algunos tipos de cursiva. [39] Las ánforas españolas se hicieron particularmente populares gracias a una floreciente fase de producción en los últimos tiempos republicanos. La Bética y la TarraconenseLas regiones (suroeste y este de España) fueron las principales áreas de producción entre el siglo II y el siglo I aC gracias a la distribución de la tierra a los veteranos y la fundación de nuevas colonias. Las ánforas españolas se extendieron ampliamente en el Mediterráneo durante los primeros tiempos imperiales. Los tipos más comunes se produjeron todos en la Bética y entre ellos estaba el Dressel 20, contenedor típico de aceite de oliva, el Dressel 7–13, para garum, y el Haltern 70, para el defrutum, salsa de frutas. En la región de Tarraconensis, el Pascual 1 era el tipo más común, una ánfora de vino en forma de Dressel 1 e imitaciones de Dressel 2–4.
La producción del norte de África se basó en una antigua tradición que se remonta a la colonia fenicia de Cartago . [40] Las ánforas fenicias tenían pequeños mangos característicos unidos directamente a la parte superior del cuerpo. Esta característica se convierte en la marca distintiva de las producciones tardías republicanas / tempranas imperiales que luego se llaman neofenicias. Los tipos producidos en Tripolitania y el norte de Túnez son los Maña C1 y C2, más tarde renombrados van Der Werff 1, 2 y 3. [41] En el área del Egeo, los tipos de la isla de Rodas eran bastante populares a partir del siglo III a. C. Gracias a la producción local de vino que floreció durante mucho tiempo. Este tipo se convirtió en elCamulodunum 184, un ánfora utilizada para el transporte del vino de Rhodian por todo el imperio. Las imitaciones del Dressel 2–4 se produjeron en la isla de Cos para el transporte de vino desde el siglo IV a. C. hasta la época imperial media. [42] Los contenedores cretenses también fueron populares para el transporte de vino y se pueden encontrar en el Mediterráneo desde la época de Augusto hasta el siglo III d. C. [43] Durante el imperio tardío, los tipos del norte de África dominaron la producción de ánforas. Los denominados africanos I y II fueron ampliamente utilizados desde el siglo II hasta finales del siglo IV d. C. Otros tipos del Mediterráneo oriental (Gaza), como el llamado Romano tardío 4, se hicieron muy populares entre los siglos IV y VII d. C., mientras que las producciones en cursiva dejaron de existir.
Otras cerámicas [ editar ]
Lámparas [ editar ]
La iluminación artificial era un lugar común en el mundo romano. Las velas, hechas de cera de abejas o sebo , fueron sin duda el medio más barato de iluminación, pero las velas rara vez sobreviven arqueológicamente. Sin embargo, las lámparas alimentadas con aceite de oliva y otros aceites vegetales sobreviven en gran número y se han estudiado en minucioso detalle. [44] Algunas lámparas romanas estaban hechas de metal, y podían ser de formas muy elaboradas que incorporaban estatuillas y boquillas múltiples, pero la arcilla cocida era el material más habitual, y la mayoría de las lámparas de arcilla pequeñas, probablemente económicas, tenían una sola boquilla para una. mecha, y por lo tanto una llama.
La mayoría de estas lámparas de arcilla fueron moldeadas con moldes en talleres que produjeron grandes cantidades de productos estandarizados. Algunas de las formas más populares incorporaron un disco central , un área circular generalmente alrededor de 4–6 cm. de diámetro, que incorporaba el orificio de llenado y podía ser adornado con motivos pictóricos en bajo relieve. La gama de decoración incluía deidades paganas, mitos y leyendas, escenas de género de la vida cotidiana, animales, caza, entretenimientos públicos como combate de gladiadores y carreras de carros, encuentros eróticos y, en la época romana tardía, algo de simbolismo cristiano: en resumen, la gama completa de temas que ocurren en las artes decorativas romanas ( también se encuentran lámparas judías con símbolos como la menorá ). [45]Los tipos y la decoración iniciados en el centro del Imperio, en Italia, a menudo se imitaban en productos fabricados en talleres ubicados en otras provincias. Las lámparas podrían copiarse directamente mediante el proceso conocido como surmoulage , utilizando una lámpara existente como arquetipo para producir el molde, en lugar de crear un arquetipo de arcilla modelado a mano. [46]
Los métodos de fabricación altamente organizados, que generalmente usan moldes de yeso (yeso), el volumen de producción y el comercio y la amplia distribución, hacen eco en algunos aspectos de la producción de productos de brillo rojo como Arretine y Samian, al igual que la existencia del nombre. sellos en algunas de las lámparas. Los nombres de los fabricantes o talleres normalmente se colocaban en la parte inferior de la lámpara, y son comunes en las lámparas generalmente sin decoración conocidas como Firmalampen ('lámparas de fábrica'), un tipo que era popular en las zonas militares de las provincias romanas del noroeste durante El siglo II DC. Un nombre bien conocido es el de Fortis , y sus productos se copiaron evidentemente fuera de su propio taller en Italia, o tal vez Fortis tenía sus propias fábricas en las provincias. El Firmalampe galo en la imagen adyacente, encontrada en Londres, está estampada en la base con el nombre del creador Atimeto.
Además de las muchas formas básicas de lámparas, que consistían en un cuerpo redondeado u ovoide, con una o más boquillas salientes, y a veces un asa, las lámparas de terracota también se fabricaron en una variedad de formas mucho más fantasiosas, moldeadas para representar animales, cabezas grotescas, pies y muchas otras formas. Estos se conocen tradicionalmente como lámparas de plástico ('plástico' significa 'modelado o moldeado').
La información cercana de datación y distribución que se puede obtener del estudio detallado de formas, marcas de fabricantes y decoración hace que las lámparas romanas sean hallazgos importantes y útiles en sitios arqueológicos. No se encuentran con tanta profusión en los sitios romanos en Gran Bretaña como en otros sitios en el Imperio, incluida la Galia, posiblemente porque el aceite de oliva importado probablemente hubiera sido más caro en Britannia.
Figuras de terracota [ editar ]
Los estilos italianos ejercieron mucha menos influencia en todo el Imperio en figurillas o estatuillas de terracota que en vasijas de cerámica; aquí las antiguas tradiciones de las figuras griegas de terracota , y las de Egipto y otras provincias orientales del Imperio, fueron las influencias dominantes. En algunas provincias del norte, como la Galia y Alemania, no existía la tradición nativa de la Edad del Hierro de hacer figurillas de terracota, pero se desarrollaron nuevas industrias bajo la influencia romana que fabricaban figuras hechas con moldes en arcilla blanca fina .. Al igual que las estatuillas de bronce, que habrían sido artículos más caros, las pequeñas figuras de terracota generalmente se hacían con fines rituales o religiosos, como la dedicación en los templos, la exhibición en santuarios domésticos o como artículos funerarios para depositar con los muertos. Sin embargo, algunas terracotas también fueron utilizadas como juguetes por los niños, incluso si no fueron fabricadas para ese propósito específico. [47] La mayoría de las pequeñas figuras de terracota eran objetos hechos con moldes fabricados en grandes cantidades, y la mayoría se habrían pintado de colores brillantes cuando eran nuevos. Estos pigmentos, aplicados después de la cocción, rara vez sobreviven al entierro, excepto en parches pequeños y desteñidos.
Cada región del Imperio producía terracotas en estilos locales distintivos, pero todas tenían un rango de temas bastante similar, sobre todo los temas religiosos estándar de dioses, diosas y sus atributos; Las representaciones de aves y animales a menudo pueden estar vinculadas con deidades específicas, aunque algunas figuras de animales pueden haberse hecho sin ningún propósito religioso o ritual. Los temas religiosos a menudo incluyen tradiciones y cultos locales: por ejemplo, el repertorio romano-egipcio de terracotas incluye deidades egipcias, como Harpócrates , la forma grecorromana de Horus , mientras que los dioses celtas aparecen entre los creados en las industrias centrales de Galia, centradas en el valle de Allier y la industria de Renania en Colonia.
Una diosa madre celta que amamanta a uno o, a veces, dos bebés, es uno de los tipos de galos centrales más populares, [48] aunque Venus también estuvo muy frecuentemente representada en la Galia. Las figuras de la diosa madre se muestran sentadas en sillas de cestería de respaldo alto que parecen haber sido típicas de la Galia y Gran Bretaña. Las figuras de las fuentes de Allier Valley y Colonia a veces llevan las firmas de modeladores y / o fabricantes de moldes. [49] Como en el caso de las industrias samian de Galia, los nombres de los fabricantes y los estilos y temas ilustran la fusión de las tradiciones locales y mediterráneas.
Ladrillo, azulejos y otras cerámicas arquitectónicas [ editar ]
Dos materiales fabricados fueron de gran importancia en la arquitectura romana: hormigón y arcilla cocida en forma de ladrillos y tejas estructurales, y en menor medida, en la decoración arquitectónica. Estos materiales se usaron en edificios de todo el Imperio Romano, y en muchas áreas, dejaron de usarse nuevamente después del período romano, solo para ser redescubiertos siglos después. Al igual que otros objetos de cerámica romana producidos en masa, los ladrillos y los azulejos a menudo estaban marcados con inscripciones que indicaban su fabricante, o la organización o autoridad, militar o civil, para la cual habían sido fabricados. [50]
Los ladrillos romanos utilizados para construir muros a menudo se denominan 'baldosas', porque son cuadrados bastante delgados y planos, hechos en tamaños estándar, a menudo relacionados con el pie romano ( c. 11 pulgadas o 280 milímetros), de unos 20 cm. a unos 58 cm cuadrados, y unos 5–7 cm de espesor. [51] Incluso los muros de piedra frecuentemente incorporan cursos de tejas horizontales. Las paredes construidas con ladrillos se terminaron con varios tipos de revestimiento, revoque o enlucido en las superficies exteriores e interiores, de modo que los ladrillos no fueran visibles.
Sin embargo, las baldosas utilizadas para techar estaban destinadas a ser vistas. Las tejas eran de formas distintivas, la tegula (pl. Tegulae ), que era una teja grande y delgada, casi cuadrada, con bridas hacia arriba en sus lados más largos, y el imbrex (pl. Imbrices ), de medio cilindro ligeramente cónico. formar. Los imbrices, entrelazados debido a su forma cónica, se colocaron sobre las bridas elevadas de las tegulae, y juntos formaron el característico techo de tejas onduladas que aún se puede ver en Italia y el sur de Francia. La inclinación de dicho techo tiene que ser bastante baja, no más de aproximadamente 30 grados. El techo se terminó con una serie de tejas planas, y a menudo con acabados decorativos, que también podrían ser de terracota, en el frontón.
Algunos edificios también presentaban antefijos , adornos verticales de forma triangular o redondeada que se colocaron a lo largo del borde del techo. También, a menudo, estaban hechas de terracota, y podían decorarse con motivos pictóricos destinados a evitar la mala suerte, o con inscripciones: las hechas en azulejos militares unidos a fuertes legionarios llevaban el número y el símbolo de la legión correspondiente.
Los sistemas de calefacción del hipocausto romano hicieron un uso extensivo de elementos de arcilla cocida: el espacio debajo del piso de una habitación a calentar se apoyaba en pilares robustos ( pilae ), generalmente hechos de pequeños ladrillos cuadrados unidos, para que el calor del horno adyacente Podría circular libremente. En los baños públicos y privados (esenciales para la forma de vida romana), el calor también se transportaba a través de las paredes en chimeneas hechas de tejas de caja entrelazadas. Aunque estos estaban cubiertos por revestimientos de paredes tanto por dentro como por fuera, a veces se fabricaban con una decoración geométrica e incluso figurativa bastante elaborada. Las tuberías de agua y drenaje también a menudo estaban hechas de arcilla cocida.
Las baldosas cerámicas no se usaban normalmente para pisos en edificios romanos, aunque el opus signinum , un material de piso preferido, estaba compuesto de concreto y baldosas trituradas, y los cuadrados pequeños cortados cuidadosamente de baldosas a menudo se usaban en pisos de mosaico , teselas de aproximadamente 2-3 cm. cuadrado que se usa para bordes lisos y cuadrados más pequeños, de aproximadamente 1 cm., donde se requería un color rojo en un mosaico pictórico con diseños geométricos o de figuras multicolores.
El borde de un techo podría ser adornado con placas llamados antefijas, como se mencionó anteriormente, la cerámica y algunos alivio " Servicios de revestimiento de paneles" con escenas figurativas para establecer en las paredes emular los frisos de mármol de grandes templos. Estos a menudo se llaman " relieves de Campana ", después de Giampietro Campana , el erudito y coleccionista italiano del siglo XIX que los estudió por primera vez. Se desarrollaron alrededor del año 50 aC y se usaron casi por completo en Italia entre Toscana y Campania, áreas que alguna vez estuvieron en el ámbito de los etruscoscultura de la que parecen una continuación. Inicialmente utilizados en pequeños templos, luego se encuentran en una amplia gama de edificios públicos y privados. Por lo general, entre 22 y 50 cm de alto y 27 a 48 cm de ancho, las placas tal vez estaban dispuestas típicamente en bandas o frisos . Los temas generalmente se extraen de la mitología. Dejan de encontrarse después de mediados del siglo II a. tuvieron que competir con estuco moldeado y pinturas murales. [52]
En arqueología, los ladrillos y los azulejos, especialmente cuando se encuentran solo en forma fragmentaria, a menudo se clasifican bajo el término genérico material de construcción de cerámica o CBM.
No hay comentarios:
Publicar un comentario