La Catedral de Santa Sofía1 o simplemente Catedral católica de Zhytomyr (en ucraniano: Кафедральний собор св. Софії) es un templo católica que funciona como la iglesia principal de la Diócesis de Kiev-Zhytomyr en Ucrania.2
El templo fue construido entre 1746-1748 fundado por el obispo Samuel Jan Ożga.
Después de un incendio en 1768, el templo fue convertido en uno de tres naves en el estilo clásico. El templo es ahora un edificio ecléctico con un interior barroco conservado.
En la época soviética, que fue cerrado a los fieles durante varios años, los sacerdotes fueron arrestados y fueron enviados a campos de trabajo.
Desde 1991, tras la caída del comunismo la catedral fue restaurada y ampliada.
La catedral de la Dormición o Asunción es un templo ortodoxo situado en la ciudad de Járkov, Ucrania. Fue el principal templo ortodoxo de esta ciudad, hasta principios del siglo XX, fecha en que quedó concluida la Catedral de la Anunciación.
La catedral de la Dormición, concluida en 1841, está situada en las riberas del río Lopan, sobre la colina denominada de la Universidad, dominando el perfil urbano. Su campanario, que tiene 90 metros de altura (11.º campanario ortodoxo más alto del mundo), es de inspiración neoclásica y fue construido en la década de los años 1820, tras la invasión napoleónica, en agradecimiento al zar Alejandro I de Rusia.
La iglesia, del último cuarto del siglo XVIII, es de estilo barroco tardío, inspirada en el modelo de San Clemente de Moscú.1Destacaba el iconostasio dorado de madera de tilo. Un gran reloj francés fue instalado en el campanario en 1856.
Durante el régimen soviético, la iglesia fue cerrada, y sus cúpulas derribadas en 1929. Fue restaurada a fines de la década de los 70 del siglo XX; en la actualidad, pertenece a la Iglesia Ortodoxa de Ucrania dependiente del Patriarcado de Moscú.
La Catedral Patriarcal de la Resurrección de Cristo1 (en ucraniano: Патріарший Собор Воскресіння Христового) es la principal catedral de la Iglesia católica griega ucraniana (en plena comunión con el papa), que se encuentra en Kiev (Kyiv), la capital del país europeo de Ucrania. La iglesia fue inaugurada el 27 de marzo de 2011. La catedral se encuentra en el barrio Livoberezhnyi en la margen izquierda del río Dniéper (Dnipro), siendo una de las pocas iglesias de Kiev que no se encuentran en la orilla derecha.
La catedral de Santa Sofía en Kiev (en ucraniano: Собор Святої Софії, Sobor Sviatoyi Sofiyi o Софійський собор, Sofiys’kyi sobor; en ruso: Собор Святой Софии, Sobor Svyatói Sofii o Софийский собор, Sofiyski sobor) es un monumento arquitectónico sobresaliente de la Rus de Kiev. Hoy en día, es uno de los monumentos más conocidos de la ciudad y el primer patrimonio ucraniano inscrito de la Lista del Patrimonio Mundial de la Unesco, junto con el Monasterio de las Cuevas de Kiev.
El complejo de la catedral es el principal componente del Santuario Nacional «Sofía de Kiev» la institución estatal responsable de la conservación del complejo catedralicio junto con otros monumentos históricos de la ciudad.
Historia
El nombre de la catedral viene de la catedral Hagia Sofía del siglo VI en Constantinopla (que significa «Sagrada Sabiduría») y está dedicada a la Sagrada Sabiduría de Dios más que a una santa específica con el nombre de Sofía. Según una teoría menos popular, su modelo fue la Catedral de Santa Sofía en Nóvgorod, con sus 13 cúpulas de roble (h. 989), que Yaroslav I el Sabio decidió imitar en piedra como un signo de gratitud a los ciudadanos de Nóvgorod que le habían ayudado a asegurar el trono de Kiev en 1019.
Los primeros cimientos se establecieron en 1037 (o 10111 ), pero la catedral tardó dos décadas en acabarse. La estructura tiene cinco naves, cinco ábsides y, de manera bastante sorprendente tratándose de arquitectura bizantina, 13 cúpulas. Está rodeada por galerías de dos hileras por tres lados. Mide 37 metros por 55, el exterior solía tener pedestales. En el interior, conserva mosaicos y frescos del siglo XI, incluyendo una representación ruinosa de la familia de Yaroslav y la Virgen en oración.
En origen, la catedral fue lugar de enterramiento de los gobernantes de la Rus de Kiev incluyendo a Vladímir II Monómaco, Vsévolod Yaroslávich y desde luego el fundador de la catedral, Yaroslav I el Sabio, aunque sólo ha sobrevivido hasta nuestros días la tumba de este último (véase la imagen).
Después del saqueo de Kiev por Andréi Bogoliubski de Vladímir-Súzdal en 1169, seguido por los tártaros mongoles en 1240, la catedral cayó en mal estado. Tras la Unión de Brest (1595-96) la catedral de Santa Sofía quedó en manos de la Iglesia Greco-Católica Ucraniana hasta que fue reclamada por el obispo metropolita ortodoxo ucraniano Pedro Mogila (Mohyla) en 1633. Mogila encargó trabajos de restauración y la parte superior del edificio fue meticulosamente reconstruida, según modelo del arquitecto italiano Octaviano Mancini en el marcado estilo barroco ucraniano, al tiempo que conservaba el interior bizantino, manteniendo intacto su esplendor. La obra siguió con el hetman cosaco Iván Mazepa y en 1740, acabó la catedral con su forma actual.
Después de la Revolución Rusa de 1917, y durante la campaña antireligiosa soviética de los años 1920, el plan del gobierno pidió la destrucción de la catedral y la transformación del suelo en un parque de «Héroes de Perekop» (por una victoria del Ejército Rojo en la Guerra Civil Rusa en Crimea). La catedral se salvó de la destrucción principalmente por el esfuerzo de muchos científicos e historiadores. No obstante, en 1934, las autoridades soviéticas confiscaron la estructura, incluyendo el complejo arquitectónico de los siglos XVII-XVIII que la rodeaba y la designó como un museo arquitectónico e histórico.
A finales de los años 1980, las autoridades soviéticas, y luego las ucranianas, prometieron devolver el edificio a la Iglesia Ortodoxa rusa. Debido a varios cismas y facciones dentro de la Iglesia, la devolución se pospuso, pues todas las iglesias ortodoxas y greco-católicas la reclamaban. Aunque todas las iglesias ortodoxas han sido autorizadas a celebrar servicios en diferentes fechas, otras veces se les ha denegado el acceso. Fue memorable el funeral del patriarca Volodimir de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana del Patriarcado de Kiev, cuando intervino la policía antidisturbios para impedir el enterramiento en los locales del museo y tuvo lugar un choque sangriento. Después de semejantes acontecimientos, a ninguna confesión religiosa se le han reconocido aún los derechos para prestar servicios religiosos regulares. El complejo actualmente permanece como un museo del Cristianismo de Ucrania, siendo la mayor parte de sus visitantes turistas.
El 27 de agosto de 2007, la Catedral de Santa Sofía fue considerada como una de las Siete Maravillas de Ucrania, por un sistema de votación de expertos y la comunidad de Internet.
No hay comentarios:
Publicar un comentario